La sombra de la corrupción acecha ya a casi todo el gobierno municipal del PP de A Coruña. En esta ocasión no es la operación Zeta, por la que siguen declarando varios encausados, sino una de las partes de la Pokémon, aquella que sospecha de numerosos enchufes a cambio de contratos públicos en el Ayuntamiento. Y ahora es el alcalde Carlos Negreira el que está señalado, como ya lo estaba en el caso de los falsos cursos en la trama que lideraría el empresario Gerardo Crespo.
El número dos del regidor, su mano derecha y primer teniente de alcalde, Julio Flores, habría hecho gestiones ya desde la llegada del PP al gobierno local en 2011 para colocar amigos, conocidos y allegados a los conservadores en servicios públicos gestionados por Véndex, la empresa sobre la que gira toda esta trama. Así se deduce de las llamadas y correos electrónicos intervenidos por la jueza Pilar de Lara, que aclara -en el auto al que tuvo acceso este diario- que Flores tenía una “lista para contratar a determinadas personas” y advierte que “no actuaría aisladamente, sino que lo haría con el posible conocimiento y consentimiento de sus compañeros de gobierno, incluido el propio alcalde, don Carlos Negreira”.
Se basa en el hecho de que varios de los correos electrónicos donde se solicita la contratación de personas o donde se adjuntan currículos son reenviados la otros concejales y también al alcalde Carlos Negreira, por lo que resulta difícil creer que no estuviese al tanto del que ocurría, más aún si se tiene en cuenta que era su teniente de alcalde y número dos el que gestionaba estos “enchufes”.
El método era tan normal cómo normalizado. José María Tutor, delegado de Véndex en Galicia, conseguía las contrataciones públicas y accedía a la lista de posibles enchufados, en poder de varios altos cargos del Ayuntamiento. “Personas que podrían ser próximas por razones diversas a la nueva corporación”, según dice la jueza, y que figuraban en el listado que le facilitaba Julio Flores, de más de cuarenta personas, pero también en otras que tenían el asesor personal del teniente de alcalde, Juan Carlos Boga, o en las de las jefas de Contratación y de Cultura, Gloria Díaz Crespo y Susana Martínez Portabales, según los datos de sus equipos informáticos.
Pero hay más ramificaciones: el delegado de La Voz de Galicia en A Coruña, Francisco Espiñeira, es nombrado por la jueza, que destaca su figura por “intercambiar correos” con Julio Flores “sobre la contratación de recomendados y facilitación de currículos”.
En definitiva, De Lara destaca que el Ayuntamiento de A Coruña “vendría a operar a modo de agencia de colocación de empleo” y aclara que esta función “no le correspode desde luego a los ayuntamientos, a no ser que se haga de forma disciplinada, reglamentaria y sujeta a los principios de igualdad, mérito y competencia”. Y cita varios ejemplos sobre enchufes, como lo de la hija de un coronel jefe que había trabajado en el área de tráfico de la ciudad.
La jueza instructora autoriza así la Aduanas a acceder a datos de la Seguridad Social y Hacienda de 54 personas que podrían haber sido beneficiadas laboralmente gracias a la intervención de miembros del gobierno local, asesores o altos cargos, tal y como se deduce de las llamadas y correos electrónicos intervenidos. En algunos de los nombres, destaca la coincidencia de apellidos con algunos de los señalados por recomendar o intercambiar currículos.
La finalidad de estos trabajos es la de “investigar el posible delito de tráfico de influencias y/o soborno por la contratación de personas recomendadas, y la relación que pudieran tener con las empresas investigadas”. Así, tal y como aclara la jueza, se hace “necesario comprobar a través de la Seguridad Social y Hacienda se alguna de las personas que aparecen nos listados de los correos electrónicos hubieran sido contratadas por influencia o recomendación de alguna autoridad o funcionario municipal”.
Negreira califica de “conjeturas” los nuevos datos del auto
Preguntado por los medios, Carlos Negreira califica de “conjeturas” las acusaciones que se deducen del auto de la jueza De Lara. El alcalde cree que lo relatado en el documento “son los mismos hechos y sobre ellos se construyen nuevas conjeturas”. “Queremos pasar de las conjeturas a hechos probados; que continúe la investigación y nosotros colaboraremos con ella”, insiste el regidor, que no quiso responder sobre se recibía o no esos correos con la lista de personas supuestamente recomendadas para Véndex. “La política es una cosa y la justicia, otra”, llegó a decir el presidente del PP en la provincia de A Coruña, hombre fuerte del partido en Galicia y apuesta fuerte del presidente de la Xunta, Núñez Feijóo.
“Recibo miles de correos pero no tengo conocimiento de ninguna irregularidad, porque si lo tuviera, lo denunciaría inmediatamente donde tiene que denunciarse”, aseguró Negreira, que no aclaró si va a incluir imputados en la lista del PP de cara a las elecciones municipales, situación en la que se encuentra, precisamente, Julio Flores, número dos del gobierno y mano derecha del regidor. “Presentaré la candidatura en los dos últimos días de plazo porque hasta ese momento toca gobernar”, concluyó.
Tanto el BNG como la Marea Atlántica pidieron ya explicaciones, se preguntan por qué Negreira no las dio durante los últimos meses cuando fue preguntado y denuncian una “trama de colocación” en el Ayuntamiento coruñés.