Mato reconoce que tres de los ceses en Trabajo se deben a la trama Zeta

La consejera de Trabajo, Beatriz Mato, reconoció este viernes que los tres cargos de su departamento que cesaron en sus puestos en las últimas semanas lo hicieron por su implicación en la operación Zeta, algo que no había asumido hasta el día de hoy. Así, asegura que los cambios tienen que ver con esta trama corrupta, que supuestamente recobía subvenciones públicas por cursos que no realizaba o falseaba.

Beatriz Mato aclaró que el ex director general Odilo Martiñá presentó la dimisión “por motivos personales” para “precisamente estar alejado del Gobierno para poder hacer mejor su defensa”, mientras que el jefe de servicio también se marchó “voluntariamente”. Niega, no obstante que sea una “crisis de gobierno encubierta”, como denuncia el PSdeG, pero asume que “existieron ceses vinculados a esta trama”. Incluso llegó la consejera a no descartar nuevos ceses o destituciones.

Esta semana la secretaria de Organización del PSdeG, Pilar Cancela, le demandó “explicaciones” a Alberto Núñez Feijoo sobre lo que considera “una crisis de gobierno encubierta” en la Xunta. “El presidente de la Xunta y la consejera de Trabajo tienen que dar explicaciones inmediatas. Dos personas con responsabilidades en los ámbitos de la formación y de la economía social han cesado y los ciudadanos exigen información sobre lo que está pasando”, señaló.

“No se han dado explicaciones convincentes, estamos delante de una crisis de gobierno encubierta y ni Feijóo ni Mato dan explicaciones sobre lo que está sucediendo, mientras vemos que hay investigaciones y autos judiciales que vinculan este caso de cursos de formación con una supuesta financiación irregular del PP”, añadió.

En la rueda de prensa posterior al Consejo de la Xunta, Núñez Feijoo, preguntado por estos comentarios, se defendió atacando, y se limitó a afirmar que Pilar Cancela “era directora general en los momentos en que se otorgaban, sin ningún tipo de inspección y control, esas ayudas y esos contratos a la empresa denunciada por la Xunta y que está en este momento en los juzgados”.

En cuanto a los ceses y dimisiones apuntadas por Cancela, Núñez Feijoo afirmó que sus motivos fueron explicados “de forma bastante clara por la consejera”. Odilo Martiñá, director general de Relaciones Laborales, “cuando se tuvo conocimiento de algunas actuaciones, como es natural, presentó la dimisión”, afirmó el presidente de la Xunta, que reconoció que los cesados Luis Álvarez Freijido (director de área de Servicios Provinciales de la Diputación de A Coruña) y Joaquín Vila (jefe de servicio de Empleo) “tenían una relación presunta sobre determinados cobros o percepciones de estas empresas”. Los otros dos ceses de cargos de la consejería están motivados, según fuentes del departamento, “por una reorganización administrativa por motivos estrictamente de trabajo”, una versión repetida este jueves por el presidente de la Xunta.

Odilo Martiñá estuvo entre 2006 y 2009, presuntamente, a sueldo de Gerardo Crespo, del que podría haber recibido alrededor de 18 mil euros. Fue director general hasta el mismo día en que fue imputado en el marco de la Operación Zeta. Luis Álvarez Freijido habría recibido, según las informaciones que componen la investigación, unos 8 mil euros de Crespo. Joaquín Vila, por su parte, aparece en el sumario como receptor de varios regalos procedentes del empresario.