Más de un millar de personas se han sumado este domingo a la Marcha contra celulosas que organiza cada año la Asociación pola Defensa da Ría (APDR). Es la primera después de la sentencia de la Audiencia Nacional de julio de 2021 que tumba la prórroga de la pastera ubicada en la ría de Pontevedra y los participantes han salido con más optimismo del habitual a las calles: “Ence ya es pasado”.
Un grupo de personas partió de la alameda de Pontevedra y otro lo hizo desde la de Marín para encontrarse ante las instalaciones de Ence en Lourizán. Los organizadores señalaron que la de este año fue una marcha “especial”. La decisión de la Audiencia Nacional ha sido recurrida y el proceso está ahora pendiente de que se pronuncie el Tribunal Supremo. Los responsables de la asociación confían en que ratifique la sentencia y comience “un futuro ansiado sin Ence en la ría”.
El presidente de la APDR, Antón Masa, consideró que este domingo “lluvioso y gris” representa el pasado “oscuro, negro y contaminante” de Ence, pero “mañana será un día floreciente”. El futuro sin la celulosa permitiría “que la ría y la comarca vivan de su vocación natural: la explotación natural de los recursos naturales, el marisqueo, la pesca, el ocio y el deporte en la ría”, dijo.
Entre cánticos como “A ría é nosa e non da celulosa”, las dos marchas que partieron pasadas las 12.30 se unieron a las puertas de la fábrica. Allí, la secretaria de la asociación, Antía Marinho, leyó un manifiesto que reivindica “ya” pueden decir “con la boca bien grande” que están “más cerca que nunca” de lograr la “tan ansiada victoria colectiva”. Aun así, ha pedido “pelear esta última batalla” porque “el monstruo y todos sus viles siervos continúan asfixiando con sus últimos estertores”.
Al finalizar su intervención, miembros de la asociación colgaron en la puerta de Ence una corona de flores con las siglas RIP porque, en su opinión, “la muerte de Ence es ya una realidad”.