Los tres partidos con representación en el Parlamento de Galicia no se han puesto de acuerdo para pactar una condena de la invasión de Ucrania. El BNG, principal fuerza de la oposición a la mayoría absoluta de Alberto Núñez Feijóo, ha acusado a PP y Partido Socialista de “utilizar el dolor de un pueblo, los muertos y los refugiados” para atacar a la formación nacionalista.
PSOE y populares acordaron un texto y se lo presentaron cerrado al Bloque. Este respondió con un documento diferente, el que ya había apoyado los tres partidos pero en una instancia diferente, la Diptación de A Coruña. Socialistas y PP se negaron e instaron al BNG a “condenar sin ambigüedades” el ataque de Rusia a Ucrania. La paradoja es que en el ente provincial, donde sí hubo acuerdo, gobierna un bipartito de socialistas y nacionalistas, y su presidente es el actual secretario general del PSOE gallego, Valentín González Formoso.
El documento de PP y PSOE para emitir en forma de declaración institucional en el pleno de la Cámara gallega pide “condenar enérgicamente la agresión de Rusia a Ucrania”, la retirada de las tropas y la “guía de los principios y valores democráticos compartidos con Europa”. Pero añade “el más firme compromiso de este Parlamento con la defensa de los principios de la democracia, el estado de derecho y la protección de los derechos fundamentales contemplados en el Preámbulo del Tratado de constitución de la Alianza del Atlántico Norte y en el de la Constitución de la UE”, además de apoyar a las Fuerzas Armadas españolas, informa Europa Press.
El BNG ha sido históricamente muy crítico con el papel de la OTAN. Lo ha vuelto a ser desde que estalló la guerra ucraniana: su diputado en el Congreso criticó la invasión rusa pero también la actitud de la Alianza Atlántica en los últimos años. Su propuesta, votada por socialistas y populares en la diputación coruñesa, incluye cuatro puntos: condena de la agresión de Rusia a Ucrania y la total solidaridad con el pueblo ucraniano; petición de un inmediato alto al fuego y la retirada de las tropas rusas de su territorio; respeto al derecho internacional, a los derechos humanos y a los Acuerdos de Minsk, y trabajar por la resolución del conflicto en el marco de la ONU y de la OSCE; así como el retorno a la vía diplomática como única fórmula para resolver las diferencias y alcanzar acuerdos de paz duraderos.
La reacción inicial del BNG tras el ataque ruso levantó cierto debate incluso dentro de las propias filas nacionalistas. El primer comunicado de su Executiva no mencionaba a Rusia ni a Putin y, a decir de algunas voces, era demasiado condescendiente con la estrategia de Rusia. Su portavoz Ana Pontón fue de entrada mucho más clara en la condena de la invasión y en exigir la retirada de las tropas rusas de Ucrania, además de criticar a la OTAN. La viceportavoz y también diputada Olalla Rodil calificó este martes lo ocurrido con la declaración insitucional del Parlamento como “lo más indecente” que vio desde que está en la Cámara.
El portavoz del Grupo Socialista, Luis Álvarez, ha advertido que “lo único que cabe de forma sensata” desde el Parlamento y frente a la invasión de Ucrania por Rusia es “apoyar a los organismos internacionales, a la UE y a la OTAN, y al gobierno de España dentro de las acciones coordinadas con el resto de instituciones”. Y Pedro Puy, del PP, considera que el BNG se niega a respaldar a nuestro gobierno, a respaldar a la Unión Europea y a respaldar las decisiones que se están adoptando“.