El plan de Altri y su macrocelulosa agita la campaña de las europeas en Galicia y obliga a los partidos a posicionarse

Daniel Salgado

4 de junio de 2024 14:25 h

0

La campaña electoral para el Parlamento europeo discurre en Galicia sin apenas ruido. Los propios candidatos lo admiten. “Ayudaría que existiese conciencia de que son unas elecciones muy importantes”, declaraba Ana Miranda, aspirante del BNG, a este periódico, “pero no se ve en los medios masivos”. Los debates rara vez exceden lo general y, en el caso de la derecha, son apenas una excusa para volver a desplegar su argumentario contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Pero hay un asunto de ámbito gallego con repercusiones comunitarias que sí ha obligado a los partidos a tomar partido: los planes de la compañía portuguesa Altri para, dinero público mediante, instalar una macrocelulosa en el corazón geográfico de la comunidad.

El proyecto, conocido en sus detalles tras las elecciones gallegas del 18 de febrero, supondrá, de realizarse, la construcción de una factoría de 360 hectáreas, que se alimentará de eucalipto y consumirá 46 millones de litros de agua extraídos del río Ulla. El Gobierno central debe autorizar si puede o no optar a uno de los Perte europeos. Lo que, cuando hace unos años y a al calor de los fondos de recuperación de la UE lo anunció Feijóo, iba a ser una fábrica biotextil se ha transformado en una pastera. El secretario general de los socialistas gallegos, José Ramón Gómez Besteiro, insiste una y otra vez en reclamar explicaciones a la Xunta sobre este cambio, pero no abandona cierta ambigüedad sobre el tema. “No se trata de decir si nos gusta o no, es necesario ir más allá”, aseguró al día siguiente de la histórica manifestación en Palas de Rei -el término municipal lucense previsto para las instalaciones-, donde 20.000 personas según la organización desfilaron en contra de Altri.

La posición del candidato del PSdeG al Europarlamento es sin embargo más clara. “Nadie en nuestro partido partido está de acuerdo con la instalación de una macrocelulosa en el corazón de Galicia”, afirmó Nicolás González Casares en una entrevista con elDiario.es, “lo que le decimos al señor Rueda es que diga la verdad a los gallegos”. El presidente de la Xunta de Galicia, del PP, ha optado, de momento, por plegarse a los argumentos de la compañía -“algunas de las cosas que se dijeron allí [en la marcha de Palas] no son así”- y parapetarse detrás de “los técnicos”. Rueda también afea a nacionalistas y socialistas lo que denomina cambio de opinión: el Parlamento de Galicia aprobó por unanimidad una proposición no de ley de apoyo a Altri, solo que el mandatario olvida añadir que en aquel momento se desconocían los detalles y nadie hablaba de macrocelulosa, sino de “fábrica de fibras textiles”. El caso es que el candidato del PP gallego a Europa, Francisco Millán Mon, ha evitado hasta el momento entrar en el debate concreto.

Y eso que su colega del BNG, Ana Miranda, no tiene dudas. “Ese proyecto va en contra de las directivas medioambientales de agua, de hábitat, de Red Natura, de información ambiental. Y además es una fábrica con tecnología moderna pero la filosofía de hace siglo y medio”, explicó a este diario, “mucho tendría que cambiar para caber en el PERTE de descarbonización”. Tras los titubeos iniciales derivados de la falta de información -así lo admitió Ana Pontón en la Cámara gallega la pasada semana-, la izquierda nacionalista gallega se ha sumado a las movilizaciones de la Plataforma Ulloa Viva, impulsora principal de la oposición a la celulosa. Miranda repite en todos los mitines que llevará a Europa “la voz de los afectados por Altri”. Hace algo más de un mes ya invitó a los colectivos contrarios a viajar a Bruselas y reunirse con funcionarios de la Comisión.

Sumar y Podemos, contra la pastera

Sumar también ha respaldado las protestas. Su diputado Manuel Lago Peñas estuvo en la manifestación del 26 de mayo, junto a Juan Manuel Díaz Villoslada, candidato a Europa. La vicepresidenta del Gobierno central, Yolanda Díaz, expresó hace meses su preocupación por el impacto ambiental de la iniciativa. Y es que Altri se ha convertido en uno de los ejes de la campaña gallega de tal manera que Podemos, cuya presencia en Galicia se ha desdibujado, lo ha elegido como mensaje principal de uno de sus actos electorales más importantes. “Votar por Irene Montero [cabeza de lista de la formación] es votar no a Altri”, dijo en A Coruña Pablo Fernández, número tres de la candidatura morada, este lunes, 3 de junio.

Ese mismo día el CEO de la compañía portuguesa aseguraba en Santiago que la oposición a sus planes se basa “en datos falsos” y añadía: “No hacemos inversiones donde las comunidades no nos quieren”. De momento necesita 250 millones de euros de financiación pública sobre un presupuesto total de mil millones.