La Policía Nacional desalojó de madrugada, en torno a las 6:00, a los estudiantes que estaban encerrados en el rectorado de la Universidade de Santiago de Compostela (USC) y acampados en la Facultade de Historia contra la matanza en Palestina. Un grupo de una veintena de personas estaban dentro del rectorado desde el lunes para reclamar a la universidad que rompa cualquier tipo de vínculo con empresas e instituciones que trabajan con Israel. En la jornada del martes impidieron entrar al personal y estuvieron concentrados ante el edificio, ubicado en la Praza do Obradoiro.
Los agentes vigilaron sus actividades, pero esperaron a un momento de calma y en el que no había actividad en la zona más emblemática y que más visitantes concentra de la capital gallega para entrar en el edificio, identificar a los estudiantes y sacarlos del interior. Algunos de ellos relataban por la mañana que hubo algunos golpes a algunos de los compañeros, pero que su actitud fue de no oponer más resistencia que la de tumbarse en el suelo y no hubo un enfrentamiento. Desde el desalojo un grupo permanece en la Praza do Obradoido, al aire libre, con la protesta.
Los estudiantes prevén mantenerse por el momento en una zona ante la catedral, en donde han colocado sus mantas en el suelo y han desplegado banderas palestinas. Están organizando más concentraciones. A lo largo del martes hubo intentos de negociación, pero no fructificaron. Los estudiantes le reclaman al rector, Antonio López, que se rompan las relaciones con empresas “vinculadas directamente al genocidio”, entre las que sitúan a HP, Siemens, Amazon o el Banco Santander.
El rector manifestó en una rueda de prensa este miércoles que no descarta sanciones o denuncias contra los jóvenes tras lo que ha calificado de desalojo “pacífico”. Dice que aún no se ha evaluado si hay algún desperfecto, pero avisa de que si lo hay tomarán medidas en contra de los estudiantes. “Primero hay que saber quiénes eran”, añadió