La Xunta de Galicia interpreta que las cifras de la epidemia de coronavirus pueden avalar un respiro en las restricciones sociales adoptadas para contenerla. Al día siguiente de que el propio Alberto Núñez Feijóo anunciase las primeras, y tímidas, medidas de desescalada, y hablase de ampliarlas dentro de una semana, la presión hospitalaria ha descendido significativamente. En UCI hay 19 personas menos que en la jornada anterior, y 46 menos en planta.
Así, en las unidades de cuidados intensivos son 205 las personas ingresadas, la menor cifra desde el 28 de enero. Y en hospitalización convencional 746, la menor desde el 21 del mes pasado. El total de casos activos también ha descendido, pese a que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) detectó 358 nuevos contagios, 310 confirmados por PCR. Son 12.464, el menor número en el último mes.
Pero la cuenta de personas fallecidas debido a la COVID sigue aumentando. El Gobierno gallego comunicó 28 muertos, lo que eleva el total desde que, a finales de febrero, la pandemia llegó a Galicia a 2.124. La información oficial incluye decesos de varios días. En este caso contabiliza incluso una mujer de 84 años muerta el 28 de noviembre y que “acaba de ser comunicado por la residencia” Vila do Conde de Gondomar (Pontevedra).
108.971 gallegos y gallegas han contraído el virus, de los que 94.400 se han curado.