El cabeza de lista de Ciudadanos al Congreso por Lugo, José Manuel Blanco, convocó este martes a los medios de comunicación en la alameda de Vilalba, la villa natal de Manuel Fraga, para hacer público su reconocimiento al fallecido expresidente de la Xunta junto al busto con el que fue homenajeado cuando dejó de ser ministro de Franco. Allí Blanco aseguró que Fraga “no habría consentido la corrupción del PP” ni estaría de acuerdo con la deriva política de Casado al frente del partido.
Sin embargo, hace un año la condena por el caso Gürtel convirtió a quien fue número 3 de Fraga al frente del PP gallego, Pablo Crespo, en el primer diputado de la historia de la autonomía gallega encarcelado por corrupción. El propio Crespo declaró en su momento que en aquella época, con Fraga al frente, era habitual el pago de sobresueldos con dinero negro.
El candidato de Ciudadanos, que fue militante del PP, quiso reivindicar las ideas y el trabajo de Fraga asegurando que bajo el paraguas de Ciudadanos cabe todo el mundo, y lo simbolizó abrigando con el suyo el busto del político fallecido en 2012. Una escultura rodeada de polémica y que ya desapareció en varias ocasiones de ese emplazamiento en el que fue instalada en 1970, la última vez a finales de 2017, para acabar siendo colocada otra copia, mejor anclada, el pasado año por el Ayuntamiento tras un coste de 7.200 euros.
Este martes el candidato de Ciudadanos también quiso recordar la última ocupación política de Fraga, la de senador, destacando también de ella la dedicación del expresidente gallego y comparándola con la del exalcalde de Vilalba Gerardo Criado, que ocupó un escaño en la Cámara Alta esta pasada legislatura destacándose como el representante gallego con menos iniciativas presentadas. “Fraga no permitiría cosas como estas”, destacó el candidato de Ciudadanos.