La reforma de la Atención Primaria promovida por la Consellería de Sanidade con el objetivo de instaurar un nuevo modelo para futuras décadas sigue acumulando rechazo de diferentes colectivos de profesionales sanitarios, colegios médicos y personal del sector. Trabajadores de los PAC, interinos, enfermería, entidades en defensa del sistema público... Todos critican la inconcrección y la falta de respuesta a las demandas de un documento que reconoce, explícita e implícitamente, muchos de los defectos que movilizaciones, protestas y huelgas denuncian más intensamente en los últimos meses.
Una de las quejas más repetidas por el personal de la Atención Primaria es la sobrecarga asistencial pero también burocrática, al tener que asumir tareas que no le son propias o que vienen derivadas de médicos especialistas.
El propio borrador presentado por el Servizo Galego de Saúde (Sergas) dedica uno de sus apartados -el “objetivo” 3.2- al intento por “desburocratizar la actividad de los médicos de Atención Primaria”. Y lo hace advirtiendo de la necesidad de que los médicos de familia se ciñan a elaborar los informes de obligada cobertura para ellos y de que los facultativos de atención hospitalaria asuman los trámites derivados de su labor y no trasladen esa responsabilidad a los centros de salud. Para conseguirlo, la Consellería de Sanidade recomienda seguir dos órdenes publicadas por el gobierno bipartito hace diez y doce años respectivamente.
Cumplir esas dos órdenes son las dos “acciones a corto plazo” que el Sergas propone para la “desburocratización” de la labor de los médicos de cabecera. “La Administración del PP está reconociendo que no hizo nada hasta ahora para arreglar esta situación o que sus medidas no han dado resultado”, explican a este diario fuentes médicas que llevan tiempo denunciando esa “sobrecarga burocrática” que los facultativos de la Atención Primaria tienen. Y destacan que la Consellería lo admite instando a cumplir con instrucciones impulsadas por un gobierno que acabó su mandato hace una década “y que ya entonces las publicó para que la praxis fuera la correcta”.
Así, en el punto 3.2.1, Sanidade asegura que “el médico de familia de Atención Primaria (AP) realizará los informes de salud de acuerdo con la Instrucción 3/2009 de la Secretaría General del Sergas (Emisión de informe sobre el estado de salud de los usuarios del Sergas), y los certificados de defunción. Además, aclara que se ”expondrá en los centros de salud información visible para la ciudadanía sobre los informes de obligada cobertura por los médicos de AP“.
Este informe fue publicado en marzo de 2009, con el ejecutivo de coalición PSdeG-BNG todavía gobernando, y firmado por el entonces secretario general del Sergas, Cayetano Rodríguez Escudero. La instrucción, de aplicación desde entonces, advertía ya de la “demanda creciente destinada a la cumplimentación y/o emisión de informe sobre el estado de salud por parte del médico de familia sobre temas muy diversos y heterogéneos”. Esta situación, según decía, generaba “una sobrecarga de trabajo no asistencial para los profesionales, y en ocasiones una cierta controversia en torno a la necesidad o incluso el deber de emitir estos documentos, además de afectar negativamente al correcto desarrollo de las funciones y actividades propias de la Atención Primaria, en tanto que contribuye a incrementar el número de consultas de contenido administrativo, con una ocupación del tiempo necesario para otras tareas”.
Es, este diagnóstico, muy semejante a la queja que muchos facultativos de cabecera expresan ahora sobre la excesiva labor burocrática que tienen que llevar a cabo y que aquella orden, que ahora la Consellería insta a cumplir, ya intentaba limitar hace una década y “como parte del conjunto de medidas propuestas en el Plan de Mejora de Atención Primaria de Galicia 2007-2011” que estaban “orientadas a la merma de la burocratización innecesaria de las consultas de Atención Primaria”.
Lo mismo ocurre con la segunda de las recomendaciones de este apartado. En el punto 3.2.2, el Sergas aclara que “el personal directivo de las áreas sanitarias velará por el cumplimiento de la Instrucción 16/2007 de la Secretaría General del Servicio Gallego de Salud Tramitación de determinados aspectos de la actividad profesional de los facultativos de atención especializada. El objetivo es que ”todos los/las médicos/las de atención hospitalaria asuman los trámites burocráticos que se deriven de su actividad asistencial (prescripción, informes, indicación de transporte sanitario no urgente, citación para otra consulta de revisión hospitalaria...)“.
“Son muchas las labores que nos encomiendan que no entendemos cómo no se llevan a cabo ya por parte de los especialistas”, explica un médico afectado, que pone como ejemplo la tramitación de recetas, la emisión del parte de baja o la realización de pruebas ordenadas desde el hospital. “Incluso con indicaciones que nosotros, en muchos casos, no entendemos al no ser nuestra especialidad”, añade quien reconoce que “hay directrices desde las gerencias sanitarias e incluso avisos de penalizaciones” pero que el resultado de estas medidas es nulo.
Ante esta situación, el Sergas recomienda que se vele por el cumplimiento de la Instrucción 16/2007 de la Secretaría General del Sergas de julio de hace una docena de años y que está basado también en el Plan de Mejora de la AP de Galicia 2007-2011, “aprobado conjuntamente con las principales asociaciones científicas y organizaciones sindicales”. El objetivo es la “eliminación de la burocracia delegada a los facultativos de Atención Primaria” y se dan instrucciones como la “expedición de receta por quien prescribe el tratamiento” o que “le corresponde al facultativo que adopta la decisión de recurrir al transporte sanitario gratuito para pacientes emitir el corresponsal parte”. También, por ejemplo, que “las revisiones recomendadas por el facultativo de Atención Especializada serán emitidas por el propio facultativo” o que “las certificaciones médicas serán obligatorias y gratuitas sólo cuando lo exijan disposiciones legales o reglamentarias”.