Galicia participa, junto a otras comunidades del arco cantábrico, en la elaboración de primer censo del oso pardo, que se realizará de manera simultánea y usando la misma metodología. El trabajo permitirá crear perfiles genéticos de los ejemplares de oso y realizar una estimación de su población.
En el proyecto, que coordina el Ministerio para la Transición Ecológica, colaboran también Asturias, Cantabria y Castilla-León y cuenta con el asesoramiento del CSIC y la Universidad autónoma de Barcelona. El trabajo de campo, que se realizará del 1 de septiembre al 15 de diciembre de este año, comenzará con la recogida de muestras de pelo y excrementos manera no invasiva. Esto servirá para crear perfiles genéticos individuales de cada ejemplar y avanzar un cálculo de cuántos ejemplares se mueven por el territorio.
En una segunda etapa, se estudiará el grado de conexión entre los diferentes núcleos de población y de parentesco entre los ejemplares. Este estudio, del que informa la Consellería de Medio Ambiente, se tomará como referencia para la toma de decisiones sobre gestión de la población del oso pardo en su conjunto.
El oso pardo está protegido en España desde 1973 y en Galicia ha mantenido una presencia histórica, especialmente en la provincia de Lugo. Desde el año pasado, se ha encontrado señales de su presencia -y también imágenes- en el Parque Natural do Invernadeiro, en la provincia de Ourense.
Para la realización de este estudio, los técnicos de Medio Ambiente peinarán 43 áreas, de las que 34 está en Lugo, cuatro en Ourense y cinco específicas en O Invernadeiro.