Grupos antivacunas se coordinan para un envío masivo de mensajes a diputados del Parlamento de Galicia

Diputados de los tres grupos con representación en el Parlamento de Galicia han empezado a recibir numerosos correos electrónicos con argumentos antivacunas. En el espacio abierto para la participación de la ciudadanía en la tarea legislativa han aparecido en los últimos días centenares de comentarios en la propuesta para cambiar la ley de salud gallega. Superan ya los 450 y tienen el mismo tono contrario a la administración de este tipo de fármacos. Los mensajes van desde afirmaciones falsas sobre que la vacuna contra la COVID-19 está provocando muertes a críticas al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, al que acusan de tener “pretensiones del Tercer Reich”.

Fuentes del Parlamento gallego se quejan del colapso que estos envíos masivos suponen para la labor diaria y los problemas que generan para gestionar los correos electrónicos corporativos, informa Europa Press. Los mensajes han llegado a diputados de PPdeG, BNG y PSdeG y también a personal de la Cámara.

En el caso del espacio 'Lexisla con nós' de la web del Parlamento, las opiniones comenzaron a aparecer el pasado día 2 en la propuesta de modificación de la ley de salud de Galicia. La institución, que explica que se han publicado solo los comentarios que no incluyen insultos o contenido degradante, estudia si puede hacer algo para frenar este aluvión de textos en los que no faltan las referencias divinas y afirmaciones sin respaldo científico.

Un vistazo rápido al resto de propuesta abiertas a opiniones de los ciudadanos muestra que ningún otro proyecto legislativo supera los 10 comentarios. Respecto a la ley de salud, algunos internautas la critican por considerar que atenta contra sus derechos fundamentales. Otros van más allá y la consideran “inhumana”. “Nada y nadie puede obligarte y, en contra de tu consentimiento y en contra de tu voluntad, a un tratamiento, vacuna”, escribe un usuario que se identifica como José Ignacio y que cree que esto terminará en “unos segundos juicios de Núremberg”.

Otro, que se identifica como Playboy, avisa de que los ciudadanos están “hartos”: “No nos pueden obligar a vacunarnos. Si lo hacen, lo que van a conseguir es crear una guerra social, como mínimo”.