Ahora que Feijóo empieza a poner las cartas electorales boca arriba, la oposición quiere frenar sus prisas. Los partidos que no apoyan su gobierno coincidieron esta mañana en que todavía no es momento de hablar de las elecciones y que no lo será mientras no existan “garantías sanitarias y de democráticas para convocarlas” y la epidemia de coronavirus se encuentre realmente bajo control. De fondo, el estado de alarma que el Ejecutivo central pretende prorrogar, a lo que el presidente de la Xunta es contrario. No así la oposición.
“A fecha de hoy, Feijóo no ha trasladado ninguna información del calendario electoral a las fuerzas de la oposición”, denunció Gonzalo Caballero, secretario general de PSdeG, para quien el popular “coloca los intereses del PP de Casado por encima de los intereses de las gallegas y los gallegos”. Los socialistas, aseguró, no discutirán de momento sobre el calendario electoral. Y antes exigen datos: los contagios por concellos o qué sucede realmente en las residencias de ancianos. “Feijóo no quiere rendir cuentas y escapa del Parlamento”, añadió Caballero. Y es por eso que se opone a una extensión del estado de alarma que le impediría convocar ya elecciones. El PSdeG la defiende como “marco de coordinación de la desescalada”.
“No es tiempo de hablar de elecciones”, afirmó igualmente Antón Gómez-Reino, candidato a la presidencia gallega de Galicia en Común. En todo caso, a su ver, la nueva llamada a las urnas debe realizarse “por consenso entre los partidos” y solo cuando se den “garantías sanitarias y democráticas para poder ir votar”. Gómez-Reino tildó de “enormemente grave” que Núñez Feijóo haya insinuado la posibilidad de buscar vías para alargar la legislatura hasta 2021. “Tiene que buscar el consenso, porque se trata de un gobierno caduco. Su mandato expiró el pasado 5 de abril”, la fecha inicial para las elecciones al Parlamento de Galicia.
A la procura de acuerdos instó también el BNG. Su portavoz nacional, Ana Pontón, reclamó un “pacto de país” en la Cámara gallega y “pensar con las luces largas”. Y recordó que su organización no considera “sensato hablar de fechas electorales en medio de una pandemia”. “El momento será cuando el proceso electoral se pueda afrontar con garantías sanitarias”, puntualizó, antes de explicar que el Bloque “no se opone” a la prórroga del estado de alarma, pero pide al Gobierno de Sánchez que rectifique “su política de centralización” y adapte el desconfinamiento a la realidad gallega.