El PP de Galicia cree que la alcaldesa de Boimorto (A Coruña), María Jesús Novo, que se vacunó sin tener relación con actividades sanitarias, debería dimitir “por ejemplaridad” y dejarle el puesto a alguien que sí haya respetado los códigos de conducta marcados por el partido. Así lo ha manifestado el portavoz parlamentario del Grupo Popular, Pedro Puy. Ha aludido a que las explicaciones dadas por la regidora “no fueron satisfactorias”.
Después de que Novo reconociese haberse vacunado, el PP gallego le abrió un expediente disciplinario y la suspendió de militancia cautelarmente. Como respuesta, ella decidió mantenerse en el cargo y pidió la baja en el partido. Este comportamiento es interpretado por Puy como que “no tiene otra explicación”. “Creo que lo que ha hecho el partido, que es pedir su baja, su dimisión, es lo adecuado, pero estas cuestiones dependen mucho de la voluntad individual”, ha indicado.
Los políticos deben “ser ejemplares”, en especial en temas “de tanta relevancia política y social”, ha defendido el portavoz parlamentario del PP gallego. Ha pedido que “nadie se salte los protocolos establecidos” para la vacunación, “aunque tenga oportunidad de hacerlo por un error en los listados o por otro motivo”. También ha defendido la reacción del partido, que ha considerado clara.
La alcaldesa admitió que se había vacunado cuando las primeras dosis llegaron a las residencias de ancianos. Lo hizo, según su relato, porque ella es la jefa de personal del geriátrico de Boimorto. Su nombre figuraba en la lista que el centro facilitó al Gobierno gallego y que se usó tanto para los cribados como para distribuir las dosis del fármaco contra la COVID-19. Tras abrir un proceso disciplinario contra ella su partido, el PP, Novo solicitó darse de baja y continúa al frente del consistorio.