Galicia ha superado por primera vez desde que empezó la pandemia la cifra de 200 pacientes con COVID-19 ingresados en unidades de cuidados intensivos. De las 284 camas que están actualmente disponibles, 210 de ellas están ocupadas, es decir, el 74%. Son 17 más que el día anterior. La presión sobre las unidades de críticos se eleva por encima de la que se registró en la primera ola, aunque la Xunta trata de esconder los primeros colapsos en estos servicios. Algunos centros hospitalarios, como es el caso del Arquitecto Marcide de Ferrol, están trasladando enfermos a otros hospitales para liberar camas.
Tampoco había habido nunca tantos pacientes con coronavirus ingresados en planta. El total asciende a 1.121, de acuerdo con la última actualización del Servizo Galego de Saúde (Sergas). Son 35 más que el jueves.
La cifra de nuevos contagios detectados ha repuntado y se ha situado en 1.643 en 24 horas, de los que 1.390 se han confirmado mediante una PCR. Estos nuevos positivos provocan que el total de casos activos vuelva a subir una jornada más, hasta los 22.124, un nuevo máximo.
También registra cifras récord la realización de test PCR en la comunidad. Se hicieron 13.653 en 24 horas. De cada 100 personas que se sometieron a la prueba dieron positivo 9,2. El porcentaje mantiene su tendencia a la baja, pero sigue por encima del 5% que la Organización Mundial de la Salud (OMS) señala como referencia para evaluar si la pandemia está bajo control.