Un “fallo estructural”. Esa ha sido, “probablemente”, la causa del derrumbamiento de una parte del paseo das Avenidas, en el puerto de Vigo, durante la celebración en la noche de este domingo del último concierto de O Marisquiño. Así lo asegura Enrique López Veiga, presidente de la Autoridad Portuaria, que “no cree” que el hundimiento se deba a problemas “de mantenimiento” y que coincide en el diagnóstico con el alcalde, Abel Caballero. En todo caso, ya ha anunciado que la entidad encargará de inmediato un estudio técnico para conocer las causas del colapso, al igual que el Ministerio de Fomento, como así ha anunciado al regidor.
Según aclara López Veiga, todo indica que “el hormigón” sobre el que se asentaba el paseo de madera “partió”, lo que provocaría que también las estructuras superiores hayan cedido. No fue, por tanto, la pasarela de madera la que cedió, sino su base, lo que reforzaría la tesis de un error “estructural” en un paseo que fue obra de la Zona Franca en los años 90, que se encuentra en terrenos gestionados por la Autoridad Portuaria y cuyo mantenimiento ordinario es competencia del Ayuntamiento de Vigo.
Se refiere a una estructura de unos 55 metros de largo, unos 10 de ancho y un grosor de entre 30 centímetros y medio metro. Un muelle pilotado y clavado en el fondo de la ría, en la dársena náutico-deportiva.
“Es una zona compleja de administrar”, insiste López Veiga en declaraciones a varios medios, donde ha asegurado que la Autoridad Portuaria revisará también el resto del paseo das Avenidas por si hubiese más problemas. “Las responsabilidades del Puerto son las que son; el cálculo del aforo es responsabilidad de los organizadores y del organismo que da la licencia para el festival, que es el Ayuntamiento”, añade. Según detalla el Ayuntamiento, en el recinto había 4.500 personas con un aforo máximo previsto de 5.000 en el momento del accidente.
“Hay varios permisos; nosotros sólo ponemos el suelo pero la licencia de actuación o de actividad la da el Ayuntamiento”, dice Veiga, quien advierte de que la causa del derrumbamiento pudo ser “un exceso de peso”, y por tanto de asistentes, sobre la zona que se hundió, de la que varios usuarios de los pantalanes de embarcaciones deportivas habían advertido de sus deficiencias desde hace años.
“El mantenimiento corresponde claramente al Ayuntamiento, las obras las hizo Zona Franca y el Puerto las pagó”, intentó aclarar López Veiga. En ese “mantenimiento” está la polémica, al ser la estructura en terrenos portuarios una parte que no dependería del mantenimiento “ordinario” del que se encarga el Concello.
Abel Caballero, alcalde de Vigo, por su parte, ya había reclamado antes que el Puerto de Vigo estudie lo antes posible qué falló para que se hundiese esa parte del muelle y apuntaba a se debía a “un colapso de la estructura de hormigón del puerto”, una obra que, como aclaró, tiene 25 años. “Es como el hundimiento de un edificio”, comparó el regidor, que pidió a la Autoridad Portuaria que diga “en qué circunstancias se encontraba” la estructura donde aconteció el accidente.
“Todo estaba en orden, la documentación era correcta y había reunido todos los requisitos”, dice Caballero respeto de los permisos del festival, que solicita el espacio al Puerto, que se lo concede, para que luego el Ayuntamiento compruebe que toda la documentación sobre planes de seguridad es “correcta”, como así hizo. Según el regidor, será la Autoridad Portuaria y la Justicia los que deben investigar las causas del siniestro.
El caso es que los problemas en el paseo da Avenidas han sido advertidos en diversas ocasiones y por diversas autoridades y particulares en los últimos tiempos. El debate viene de lejos: desde el Concello insisten en que ellos se encargan del mantenimiento “ordinario” pero no, por lógica, de la estructura de una zona en terrenos portuarios.
“Esa zona colapsó”, ha aclarado Caballero en rueda de prensa, tras advertir de que el accidente nada tiene que ver “con el mantenimiento del paseo de madera” superior, pero sí con el colapso “de toda una estructura sólida y muy consistente, que tenía que aguantar”.
Hace tan sólo dos días, y ante las deficiencias del paseo de madera, Caballero advirtió de que era el Puerto quien tenía que asumir la reparación del pavimento pero que “como no lo iba a hacer” le hacía la propuesta de que fueran Ayuntamiento y Autoridad Portuaria los que lo arreglasen de forma conjunta, pagando cada entidad la mitad de la reforma.
El Puerto aclaraba que el convenio de los años 90, Abrir Vigo al Mar, no dejaba claro de quién era competencia ese paseo. El acuerdo había sido firmado por Zona Franca, Ayuntamiento y Autoridad Portuaria, que en un comunicadoasegura que la “autorización y vigilancia” del festival le corresponde al Concello y que el citado convenio le otorga a la administración local “el mantenimiento de toda la actuación en perfecto estado de conservación, bien con sus medios o bien con la oportuna contratación de obras y servicios”.
Abel Caballero, por su parte, insiste en que la zona afectada no es competencia del Ayuntamiento y ha afeado al presidente de la Xunta, Núñez Feijóo, su ausencia en Vigo en la noche del accidente. “Me gustaría que hubiese estado aquí, pero no estuvo; hoy habló mucho, pero ayer no estuvo aquí”, ha asegurado.
Además, la portavoz del PP en el Ayuntamiento de Vigo, Elena Muñoz, aseguraba el pasado martes que el lugar donde se celebraría O Marisquiño no estaba “en condiciones”. “Maderas rotas, puntas al aire... El Paseo das Avenidas presenta una situación peligrosa. Esperemos por el bien de todos que no pase nada durante ni después del evento”, aseguraba en sus redes sociales. Apuntaba a la parte visible y de madera del paseo, pero no a la estructura inferior, que fue la que cedió y provocó el derrumbe.
“Se cumplían las condiciones de seguridad”
La organización del festival lamentó “profundamente” el accidente que tuvo lugar en la noche de este domingo y “se solidarizó” con todos los heridos y sus familiares, quen son, destacó, “prioridad absoluta para todos ahora mismo”. O Marisquiño aclara que los conciertos organizados por el festival “cumplían todas las condiciones de seguridad requeridas por la legislación” y la organización aclara que están “a disposición de las autoridades competentes para todo lo que puedan necesitar”. El recinto, como aclaran, se encuentra ahora “bajo precinto judicial, a la espera de los informes de los peritos para delimitar las causas técnicas del derrumbamiento de la pasarela afectada”. Además, O Marisquiño destaca “el civismo demostrado por el público que abandonó de forma ordenada el recinto y permitió el trabajo de los equipos de rescate y seguridad, que realizaron una gran labor”.