“Queda todavía dar el paso desde las grandes proclamas a las pequeñas acciones”

Acaba de salir de la imprenta Ecoloxía Política. Olladas desde Galicia, un volumen colectivo coordinado por Xan Duro y Xoán Hermida que recoge 17 trabajos sobre distintas temáticas medioambientales y sobre la relación que establecemos con nuestra entorno. El libro, publicado por OBenComún (sello editorial de Espazo Ecosocialista Galego) se presentará este miércoles 4 en Compostela (a las 20 horas en la librería Couceiro) y el sábado 7 en A Coruña (a las 12 horas en la Casa da Fariña). En las próximas semanas habrá actos de presentación en Ferrol (miércoles 11), Pontevedra (jueves 12), Vigo (miércoles 18), Ames (jueves 19), Ourense (jueves 26), Lugo (viernes 27) y Ribadeo (sábado 28).

La obra realiza una serie de propuestas para un modelo social y económico alternativo, en un contexto de superación del pico del petróleo convencional y de escasez de materias primas, que obligan además a una presión cada vez más insoportable sobre la naturaleza, y en un contexto también de crisis global del sistema capitalista y de efectos sociales cada vez más importantes. Entre los y las autoras de los trabajos que componen la obra, encontramos a Ramón Fernández, Carolina Jack, Jose Manuel Sánchez, Xiao Varela, Xoán Doldán, Isabel Vilalba, Xosé Veiras, María Durán Beloso, Antonio García Allut, Xosé Santos Otero, Fernanda Couñago, Pablo Ángel Meira Cartea, Manuel Dios, Pepa Vázquez, Emilio Manuel Martínez Rivas o María Xosé Vázquez Rodríguez.

“Aunque a nivel estatal hay bastante literatura sobre estos temas, sobre la ecología política y los cambios que puede traer el futuro, no había un libro pensado desde la óptica gallega o adaptado a nuestra realidad social y económica”, destaca Xan Duro. El libro es fundamentalmente divulgativo y propone una puerta de entrada a muchos temas, escogiendo aquellos que son centrales en Galicia, desde el transporte, los residuos, la pesca, el rural, la soberanía alimentaria... Y también incorporando otras cuestiones más amplias, recurriendo a la frase de 'piensa global, actúa local', como por ejemplo las aportaciones sobre el mundo de la cooperación o la realidad de la pobreza. Hablamos con Xan Duro.

¿Hay más conciencia ecológica en la sociedad? ¿O la crisis económica y otras necesidades más inmediatas relegan estas preocupaciones a uno segundo plano?

En Galicia hay un momento clave para la eclosión de una conciencia de los problemas medioambientale, que fue el accidente del Prestige. A partir de ahí va creciendo esa conciencia de que algo no va bien, y de que la solución pasa por cambios de modelo. Pero para que esa conciencia se traduzca en cambios de hábitos hay que dar aun un paso, y mucho más en un contexto de crisis económica. Cuando la crisis económica entra por la puerta, el ecologismo sale por la ventana. Luego escuchas decir que 'todas esas medidas medioambientales están muy bien, pero que ahora lo prioritario es crear empleo'. Y cuando se habla de crear puestos de trabajo, se habla siempre de hacerlo empleando la ortodoxia económica que dominó estas últimas décadas. Queda aún dar el paso desde las grandes manifiestos a las pequeñas acciones. Y hasta que se dé ese paso, los grandes manifiestos sirven para poco.

¿Ese paso cuesta más cuando requiere un esfuerzo individual, como usar menos el coche personal, o un cierto sacrificio social, como cerrar la central térmica de As Pontes o trasladar ENCE?

Hay un problema, que es enfrentar estos temas de forma muy compartimentada. Se habla de sacar a ENCE fuera de la ría de Pontevedra, y luego crece el discurso que alerta de la pérdida de puestos de trabajo. Pero no se está hablando de promover un nuevo modelo, de introducir en Pontevedra otro tipo de empresas y otro tipo de puestos de trabajo. Hay que trabajar en la construcción de alternativas y ahí las administraciones tienen un papel que cumplir. Nosotros en este libro queremos ayudar la esa construcción de alternativas. Por mucho activismo que tengamos los colectivos sociales, la realidad es que gran parte de la capacidad de cambio reside en los poderes públicos y en el dinero público.

¿Falta impulso desde la administración?

Falta impulso desde la administración, sí. Todo lo relativo a la educación ambiental está a nivel cero en Galicia, prácticamente. Los cambiso requieren un esfuerzo y un cambio de mentalidad, y si además tu contexto administrativo y social no te ponen las herramientas necesarias para facilitar ese cambio de mentalidad, todo depende de lo voluntarista que seas.

La gravedad de ciertas situaciones, como la escasez de materias primas o los efectos del cambio climático, ¿sitúan las propuestas (algunas ya viejas ) del ecologismo en el primer plano del debate político?

El ecologismo es una propuesta transversal de cambio de nuestra realidad y eso abarca todos los temas. Y cada día las propuestas del ecologismo tienen más centralidad, porque las predicciones y alarmas lanzadas desde el ecologismo se demuestran ciertas y son asumidas cada día por más colectivos e instituciones. No nos alegra tener razón, pero la realidad hace que las propuestas del ecologismo estén cada vez más en el centro del debate.

¿Cómo valoras el papel del ecologismo en la política gallega y española?

El papel del ecologismo en la política española y gallega fue cautivo en las últimas décadas. Yo siempre eché de menos no un partido verde, pero sí ser capaces de articular algún tipo de fuerza que pudiera conjugar todas las propuestas de cambio social y económico de nuestra realidad y llegar a las instituciones con un proyecto distinto. Esto, en realidad, no se dio en ningún país, ni siquiera en Alemania, porque los Verdes, que son quizás la referencia en este aspecto, tampoco llegaron a conseguir esa transversalidad que necesitamos. Hoy en día la realidad no está compartimentada, está todo enlazado, y necesitamos un enfoque global.

En mayo hay elecciones municipales y hay muchas cuestiones que tratáis en el libro, desde la gestión de residuos hasta la movilidad y el transporte, en las que los Ayuntamientos tienen un papel clave. ¿Cómo introducirlas en el debate?

Creo que la única manera es participando. El movimiento ecologista tiene que salir de su espacio cómodo de denuncia, de propuesta, de acción teórica. Los militantes ecologistas deben dar un paso más y mojarse, tienen que acceder a las administraciones. Y ahí nacerán contradicciones, pero sin contradicciones no hay avance. Es el momento de participar en el ámbito municipal, y hay muchas opciones en las que hacerlo, y es el momento de poner sobre la mesa esas propuestas alternativas.

Parece que el tema de los residuos va a estar presente, aunque fuera por culpa de la subida de precios de Sogama...

El aspecto económico es siempre uno de los grandes motores del cambio. El incremento de precios de Sogama les tocó los bolsillos a muchas personas, y ahí creció el debate sobre la gestión de residuos. En el momento en que la escasez de petróleo comience a provocar un incremento del precios energéticos, también se acelerará el debate en este aspecto. Eso tardará un año o diez años, pero va a obligar a un cambio de modelo. Lo que nosotros queremos hacer con este libro es promover que este cambio se haga de manera ordenada y en un plazo más amplio de tiempo, para reducir los efectos sociales negativos. La otra opción es esperar la que todo explote y tomar decisiones radicales por pura necesidad.

Cuando el litro de gasolina pase de 1,20 a 1,80 euros, el debate sobre movilidad se situará en el primer plano...

...Ahí no va a haber ni debate, ahí va a haber un cambio obligado de usos de movilidad. Porque no se podrá mantener con esos precios el actual ritmo de uso del vehículo personal. Y el debate se producirá a posteriori: mientras la gente busca soluciones como puede, las administraciones comenzarán a pedir consejo y alternativas. Lo que necesitamos es aplicar un cambio de paradigma desde ya, un plan a 10, 15 o 20 años. Pero es algo que las administraciones hoy ni contemplan. El actual gobierno de la Xunta anunció a comienzos de la legislatura un plan de movilidad alternativa, un plan muy bueno, elaborado por una consultora con mucha experiencia en estos asuntos. Sin embargo, es un plan que nunca tuvo presupuesto, nunca se aplicó y que está metido en un cajón desde entonces.