Los cálculos de los informes epidemiológicos que manejaba la Xunta preveían un repunte de casos de coronavirus durante el verano, con la apertura de las fronteras, los viajes y el aumento de las relaciones sociales. Agosto, sin embargo, completará sus 31 días como el segundo mes con más contagios identificados desde que llegó la pandemia a Galicia -solo le separan 200 de los casos registrados en marzo- y confirmará el adelanto en la nueva expansión de virus respecto a las previsiones que marcaban el otoño como el tiempo más probable para el segundo repunte de casos de infección.
Galicia ha multiplicado por diez los casos de coronavirus en este mes: comenzó agosto con poco más de 300 pacientes activos de coronavirus y lo finalizará con más de 3.300. En este tiempo, y a falta de dos jornadas para cerrar el mes, son 3.895 las personas que se han contagiado durante agosto. Esta cifra, provisional hasta que se completen los datos para las últimas dos jornadas, lo sitúa como el tercer mes con más casos identificados. Sin embargo, y teniendo en cuenta que el ritmo de crecimiento de nuevos positivos por día está por encima de 300 en las últimas dos jornadas, es previsible que el mes de agosto se sitúa como el segundo con más casos registrados, por detrás de abril, cuando 5.567 personas contrajeron la COVID-19. En marzo, cuando se comenzaron a identificar positivos por coronavirus en Galicia, se detectaron 4.033 pacientes.
El mes de junio, en el que tras las últimas semanas de confinamiento la Xunta retomó el control sobre sus competencias, salió del estado de alarma e inició la nueva normalidad en el Estado, fue, con diferencia, el período en el que menos contagios se detectaron, con 250. A pesar de que hacia el final de junio y principios de julio se produjo el único rebrote, el de la comarca de A Mariña (Lugo), que conllevó el confinamiento de un territorio en Galicia desde el fin del estado de alarma, las cifras mensuales de julio se quedan en los 615 positivos. La Xunta entonces, a una semana de las elecciones autonómicas, decidió cerrar el tránsito a los municipios de esta comarca y, a pesar de que otras zonas han sido señaladas como preocupantes por Sanidade, el Gobierno gallego no ha vuelto a optar por esta medida, sino que recurre a otras para reducir aforos, reuniones y limitar algunos espacios de encuentro social, bien por horario como en el caso de cafeterías y bares bien prohibiendo su apertura como para el ocio nocturno y fiestas populares.
La escalada en A Coruña
Una de estas áreas que presenta peor situación es la de A Coruña y los municipios de su entorno. A comienzos de agosto se localizó un foco de contagio en un gimnasio de Arteixo que tenía cadenas de transmisión en otros municipios del área metropolitana coruñesa. Es a partir de momento cuando los casos se comienzan a disparar en la zona, con incrementos diarios que podían rozar el centenar y representar más del 60% de contagios diarios de Galicia. El 7 de agosto, la Consellería de Sanidade prohibió el ocio nocturno en nueve municipios del contorno de A Coruña, entre otras limitaciones, sin embargo, tanto el número de casos activos como el de contagios diarios sigue aumentando desde entonces. En esa fecha, el área sanitaria de A Coruña y Cee concentraba el 40% de los pacientes de COVID-19 de la comunidad con 177 casos. Algo más de tres semanas después, esta zona tiene 1.376 -a sábado 29- personas contagiadas con el virus de las 3.294 que hay en la comunidad, por lo que se mantiene en el 41,7% del total.
Menos ingresos en hospitales
Una de las diferencias de este mes de agosto respecto a los peores momentos de la pandemia son las cifras de ocupación hospitalaria. No se puede conocer el número de ingresos por mes, ya que la Xunta de Galicia no facilita ese dato. Hay que acudir al Ministerio de Sanidad para saber que en la comunidad 3.191 personas han necesitado ser ingresadas en un centro hospitalario a causa de la COVID-19 de las más de 15.000 que han pasado la enfermedad. Sin embargo, el Gobierno central solo indica el total y los ingresos en la última semana, que ascienden a 96. La Xunta, por su parte, da el número de personas que se encuentran ingresadas en cada jornada.
El mes de agosto comenzó con 14 pacientes en los hospitales, uno de ellos en la UCI y finaliza con 127 ingresados, de los que 15 precisan cuidados intensivos. En la primera ola de la pandemia, cuando los pacientes dignosticados con COVID-19 sobrepasaban también los 3.000, el número de personas en los hospitales rozaba el millar, 969, de los 147 ocupaban una cama en la UCI. En Ministerio de Sanidad facilita también, al contrario que la Xunta, el dato de porcentaje de ocupación de camas con pacientes COVID en Galicia. Este indica que la presión asistencial está al 1%, lejos de la media estatal del 5%.
Esta diferencia, como explica el conselleiro de Sanidade, se debe al nuevo perfil de persona contagiada, más joven y por tanto con menos tendencia a complicaciones médicas, la detección más temprana de los casos y la mayor experiencia de los sanitarios para identificar síntomas. La nueva situación, con un sistema sanitario más preparado, ha permitido aumentar el número de pruebas PCR que se realizan. En los últimos días, Galicia está realizando por encima de las 4.000 pruebas, alcanzando las 5.000 en el día de ayer, unas cifras que no se alcanzaron en el pico de la pandemia.
De nuevo, las residencias de mayores
Agosto ha traído también de nuevo la preocupación a los centros de personas mayores. El mes arrancó con cero casos entre los residentes y dos positivos en trabajadores de dos centros y termina con contagios registrados en 12 residencias y en dos centros de discapacidad. En total, 148 positivos.
En la segunda semana del mes, se registró un foco en el centro DomusVi de A Coruña que afectó a tres mayores, pero no fue hasta pasar el ecuador de agosto cuando se prendieron los dos rebrotes más preocupantes: el del centro Orpea de Culleredo, próximo a A Coruña, y el de la residencia de O Incio, que acabó siendo intervenida por la Xunta. Este centro tiene a día de hoy a 86 de su apenas más de un centenar personas residentes con coronavirus, además de a 26 de sus trabajadores, y se han registrado cinco muertes entre los mayores. En total, son 112 casos de los 146 que se registran en residencias de mayores de Galicia y dos en centros de discapacidad.
Medidas por barrios y ayuntamientos
El mes termina con más medidas para el control de la expansión del virus en dos nuevos territorios: el ayuntamiento de Arteixo y el barrio de A Milagrosa, en Lugo. La Xunta ensaya un nuevo sistema en el que tiene previsto “actuar de manera más selectiva”, según indicó el conselleiro de Sanidade el pasado viernes. “Se trata de afinar cada vez más, pasar de las áreas sanitarias, a los municipios y los barrios”, apuntó Vázquez Almuiña. Este método, sin embargo, no conllevará restricciones de movilidad dentro de la localidad de Lugo, por lo que los vecinos de A Milagrosa podrán pasar de tener reuniones de cinco personas a diez en cualquier otro punto de la ciudad, mientras que los de Arteixo, municipio muy próximo a A Coruña y donde residen muchos trabajadores de la capital provincial, también podrán moverse por el área. Las medidas, eso sí, afectarán a los bares y cafeterías de estas zonas, que solo podrán servir en terraza a mesas de cinco personas como máximo.