La portada de mañana
Acceder
Sánchez rearma la mayoría de Gobierno el día que Feijóo pide una moción de censura
Miguel esprinta para reabrir su inmobiliaria en Catarroja, Nacho cierra su panadería
Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

La Xunta mantendrá su protocolo anti COVID para el próximo curso escolar a pesar de los rebrotes

La Xunta de Galicia insiste por el momento en mantener su protocolo sanitario para el próximo curso escolar en los centros no universitarios, que está previsto que comience el próximo 10 de septiembre. A pesar de la situación epidemiológica de la comunidad, que actualmente se acerca a los 700 casos activos por coronavirus, la Consellería de Educación no contempla incrementar la distancia entre los alumnos ni reducir la ratio de estudiantes por aula, en contra de las recomendaciones del Ministerio de Sanidad. Tampoco se plantea variar el presupuesto de los centros ni se ha concretado la contratación de más profesores. Las Anpas piden que se adopten nuevas medidas y que no se “deje de lado” a los colegios.

Los sindicatos CIG, ANPE, CCOO y UGT, además de las asociaciones de madres y de padres, convocaron varias manifestaciones durante el mes de julio para mostrar su rechazo a un protocolo que consideran “inviable”. La última actuación en esta materia del Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo fue la publicación, el día 30 de ese mes, de un documento con las directrices para el profesorado de centros no universitarios. Tampoco fue bien recibido por los colectivos docentes.

Las medidas que llevará a cabo la Xunta de Galicia para el curso 2020/21 recogen, por ejemplo, la creación de las denominadas 'aulas burbuja', unos grupos de hasta 25 alumnos de infantil y primaria que podrán relacionarse libremente entre sí pero no con el resto de estudiantes del colegio. También se impone el uso de mascarilla para todo el profesorado y para los alumnos mayores de seis años cuando estos estén fuera de sus aulas. De la ESO en adelante deberán utilizarse cuando no se pueda respetar la distancia de seguridad recomendada por la Consellería de Educación, un metro. Mientras que la ratio de alumnos por aula en primaria e infantil se establece en 25, en ESO y bachillerato podrá haber hasta 30 estudiantes.

Entre las principales denuncias contra el protocolo está el polémico metro de distancia que los alumnos tendrán que guardar en las aulas. La plataforma Profesorado en pé explica que la Consellería de Educación no se refiere a un metro entre pupitres, sino a la separación entre el punto central de cada silla. Por lo tanto, el espacio entre los estudiantes sería mucho menor.

En cuanto a la ratio de alumnos por aula, el Ministerio de Sanidad recomendó reducir esta cifra a 15 estudiantes o, como mucho, a 20. La Xunta de Galicia, sin embargo, fija su máximo en 25 para el curso que viene en las clases de primaria e infantil. Desde el colectivo de Anpas Galegas aseguran que los centros escolares están camino de “convertirse en una trampa para los niños y para sus familias”. Para Núñez Feijóo, todas las directrices cuentan con el visto bueno de las autoridades sanitarias consultadas por la Xunta.

Ante el temor de un nuevo confinamiento y, por lo tanto, del regreso a la educación a distancia, la comunidad educativa también reclama a la Consellería garantías para que el curso transcurra con “garantía de igualdad”. Las Anpas inciden en que los docentes no han recibido formación para utilizar “de manera productiva” las herramientas virtuales y que tampoco se cuenta con el personal suficiente. Recuerdan que durante el último trimestre del curso pasado, muchos alumnos de zonas rurales recibieron una educación de peor calidad por la falta de conexión a Internet.

Sin comedores escolares en Pontevedra

Como consecuencia del protocolo, los comedores escolares de la ciudad de Pontevedra y en el municipio de Marín no contarán con servicio para el curso que arranca en septiembre, así como con el Plan Madruga. Hace poco más de una semana, el presidente de la Xunta calificó como una “amenaza” la decisión de las Anpas, que no podrán hacerse cargo de la gestión del servicio en 23 centros escolares por las dificultades para cumplir con el protocolo de la Consellería de Educación.

De momento, el Ejecutivo gallego no ha dado ninguna solución para las familias afectadas. El presidente de la Confederación Galega de Anpas (Confapa), Rogelio Carballo, manifestó a finales de julio que nadie de la Xunta se había puesto en contacto con ellos a la hora de presentar el protocolo ni después de aprobarlo. El colectivo ha iniciado la semana pasada una campaña de firmas para que sus propuestas sean escuchadas por parte de la Consellería de Educación, que no se ha pronunciado al respecto.