Tercer aniversario de esperanza tras dos de indignación en Angrois

En el primer aniversario del accidente de tren de Santiago, 13 cargos de Adif entonces imputados por su posible responsabilidad en el siniestro acababan de negarse a declarar. En el segundo aniversario, el maquinista del Alvia, Francisco José Garzón, había vuelto a ser el único acusado por despistarse y no frenar a tiempo antes de la curva de Angrois después de recibir una llama del interventor del tren. El tercer aniversario se cumple este domingo, 24 de julio, y es el primero que las víctimas afrontan con algo de optimismo de cara a que se esclarezcan todas las circunstancias que rodearon el siniestro. Optimismo moderado gracias a que en las últimas semanas la Audiencia Provincial de A Coruña reabrió la instrucción para que se investigue mejor la responsabilidad de Adif y a que la Agencia Ferroviaria de la UE criticó la investigación técnica realizada por Fomento por centrarse sólo en el error reconocido del maquinista. Optimismo que no esconde que, tres años después, 80 muertos y 144 heridos esperan aún justicia.

Cuando el 24 de julio de 2013, víspera del Día Nacional de Galicia, fiesta grande en Santiago, el Alvia descarriló en Angrois, el caso parecía fácil. El maquinista se había despistado y había llegado a 179 kilómetros por hora a una curva que tenía que tomar a menos de 80, se apresuraron a destacar las autoridades. Pero el caso comenzó a complicarse unas semanas después, a medida que La Voz de Galicia y El País fueron contando todos los defectos de seguridad que existían en la línea, en la que Adif había decidido en 2010 no instalar el sistema de frenado automático del AVE (el ERTMS) justo en la curva de Angrois, y en el tren, después de que también Adif autorizase en 2012 a Renfe a desactivar el mismo sistema a bordo de los Alvia. No había ningún sistema de respaldo del maquinista a pesar de que el riesgo de la curva de Angrois era conocido.

Por esos y otros defectos de seguridad el primer juez instructor llegó a imputar hasta 27 cargos de Adif, pero por dos veces la Audiencia Provincial de A Coruña les levantó los cargos. Un segundo juez decidió en octubre del año pasado, amparándose en peritajes de dudoso rigor, que los defectos detectados no tenían relevancia penal y propuso, con el apoyo del fiscal, juzgar sólo al maquinista. Pero a finales de mayo la Audiencia Provincial de A Coruña le ordenó que reabra la instrucción y analice, empleando para ello otros peritajes, si Adif trató como debía el riesgo existente en Angrois.

Poco más de un mes después de esa reapertura de la causa judicial por la Audiencia, las víctimas lograron acceder, con la mediación del BNG, a un informe demoledor elaborado por la Agencia Ferroviaria Europea sobre cómo investigó el accidente la Comisión de Investigación de Accidentes Ferroviarios (CIAF) del Ministerio de Fomento. Igual que había hecho la Audiencia de A Coruña un mes antes, la agencia europea certifica que la CIAF no fue independiente y censura que puso el foco en el error del maquinista sin analizar otras deficiencias de seguridad. Sin embargo, Fomento argumenta que ahora la CIAF ya sí es independiente y que pedirle que haga otra investigación técnica atentaría contra esa independencia.

Responsabilidades políticas

Reabierta la investigación judicial y desmontada la técnica, las víctimas siguen reclamando responsabilidades políticas. Eso pensaban transmitirle en persona el pasado martes a Ana Pastor justo cuando la ministra de Fomento dejó de serlo y pasó a presidir el Congreso. Una cámara baja cuya composición hace difícil que se cree la comisión de investigación que reclaman, ya que PP y PSOE se oponen por miedo a que salpique la gestión de Pastor y del exministro socialista José Blanco. Sin embargo, con las autonómicas previstas para el otoño, tanto el PP gallego como el PSdeG comenzaron a cambiar su discurso. Tras la reapertura de la investigación judicial y del informe crítico de la UE, ambos están dispuestos a que se realice una nueva investigación técnica, y aunque los populares siguen negándose a crear una comisión parlamentaria, el candidato socialista, Xoaquín Fernández Leiceaga, abrió esta semana la puerta a cambiar de postura durante la campaña electoral.

A la espera de que dos meses después de reabrirse la lenta instrucción de la causa su juez instructor decida su próximo paso, este sábado la plataforma de víctimas del siniestro celebra en Santiago una asamblea. El domingo, a las 11.00 horas, las víctimas se concentrarán en la Praza do Obradoiro para reclamar justicia. Y ya por la tarde, a la misma hora en que hace tres años descarriló el tren, las 20.41 horas, recordarán en la curva de Angrois a los fallecidos y heridos.