Los trabajadores de la planta de aluminio primario de Alcoa en San Cibrao (en Cervo, Lugo) y los de la de Vestas en Viveiro, ambas en la comarca de A Mariña, han protestado en la ciudad de Lugo contra la amenaza de cierre de las instalaciones. El acto, al que se han unido centenares de personas -3.000, según los organizadores- ha congregado a una multitud ante el edificio de la Subdelegación del Gobierno en Lugo.
Los presentes lanzaron huevos y harina al edificio y han quemado un cartel con una imagen de la ministra de Industria, Reyes Maroto. “Continuamos reclamando que la Xunta, y concretamente el señor Feijóo, pida de una vez, por escrito, la intervención de la SEPI. Y que la ministra de Industria se deje de cuentos”, ha manifestado el presidente del comité de empresa de Alcoa-San Cibrao, José Antonio Zan.
Los trabajadores de Alcoa aseguran que no van a parar de protestar y anuncian una manifestación para el próximo 17 de octubre en Viveiro. Reclaman un plan industrial para la comarca de A Mariña, en la que están amenazados centenares de puestos de trabajo. En esta fábrica de aluminio primario, más de 500 personas siguen pendientes de que se despeje el futuro de las instalaciones. Hace más de un año y medio que se negocia una venta, pero las conversaciones acumulan ya varios intentos fallidos. Vestas, por su parte, anunció hace menos de un mes que antes de que termine el año cerrará su fábrica de aerogeneradores en Viveiro, que da empleo a 115 trabajadores.