En pleno debate sobre el modelo de financiación autonómica y con el presidente de la Xunta asegurando que no aceptará las “migajas de los banquetes de otros” -en referencia a Catalunya-, el Consello de Contas ha hecho públicos tres informes en los que recoge que el gobierno gallego dejó sin ejecutar la mitad de los 1.183 millones de euros de fondos europeos recibidos en 2022 y el mismo porcentaje de los 102,5 millones procedentes del Fondo de Compensación (FCI), destinados precisamente a “corregir los desequilibrios económicos interterritoriales y hacer efectivo el principio de solidaridad” que tanto invocan los populares. El ejecutivo autonómico ha replicado asegurando que esos fondos “tienen una ejecución plurianual”.
En 2022, la Xunta tuvo dos presidentes: Alberto Núñez Feijóo, durante poco más de un tercio y Alfonso Rueda, su sucesor, a partir del 14 de mayo. En ese ejercicio, el Gobierno destinó a Galicia 39,3 millones de euros en Fondos de Compensación (FFCCI). A ellos, el órgano fiscalizador suma los algo más de 63 millones pendientes de ejecutar de ejercicios anteriores y alcanza así la cifra de 102,5 millones. De ellos, el ejecutivo autonómico sólo consiguió movilizar 50, un 49% del total. El resto, pasaron al presupuesto del año siguiente.
Los 39,3 millones recibidos por Galicia superaron en un 2,08% la cuantía del año anterior lo que, tal y como resalta el Consello, “rompe con la tendencia decreciente de años anteriores”, excepto en los ejercicios 2018 a 2020, cuando -como hoy- se prorrogaron los presupuestos generales del Estado. Si se compara la dotación de 2022 con la de un lustro antes, 2017, Galicia registra un descenso del 11,26% y es la que comunidad que más dotación pierde, unas décimas por encima de Extremadura (-11,19%) y casi tres puntos más que Cantabria (-8,43%). Aún así, es la cuarta receptora de fondos tras Andalucía, Canarias y la Comunitat Valenciana.
Fondos europeos: necesita mejorar
El segundo de los informes del Consello de Contas, referido al mismo ejercicio, fiscaliza el conjunto de los fondos europeos gestionados por la administración autonómica para llegar a una conclusión similar, aunque esta vez, sobre un montante mucho mayor. La Xunta contó en 2022 con 1.183 millones de euros procedentes de Bruselas de los que sólo ejecutó 560 millones, un 47% del total.
Esos fondos, pertenecientes al marco financiero 2021-2027, corresponden a un total de 543 proyectos europeos de los que 472 son considerados “activos” mientras que 324 recibieron pagos. Un 40% del total, por tanto, no percibieron ingresos.
Por departamentos, fue la Consellería de Medio Rural la que recibió el mayor montante, 251 millones, seguida por los 198 de Economía. Sin embargo, los grados de ejecución fueron muy diferentes. Mientras Medio Rural gastaba el 86 por ciento de lo asignado, Economía se quedaba en el 46%.
Las mayores cotas de eficiencia se dan en Mar (97%) y Emprego (96), mientras por debajo destaca negativamente el 20% de Sanidade, capaz de ejecutar sólo uno de cada cinco euros recibidos.
El informe contrasta el grado de ejecución de los fondos europeos con la del presupuesto general de la comunidad autónoma. La tendencia “histórica” de “diferenciales negativos” se incrementa así hasta el 43% en las obligaciones y hasta el 49% en los pagos. Por eso, el Consello concluye: “A la vista de los datos, es necesario adoptar las medidas necesarias para mejorar la ejecución de los fondos europeos con el objetivo de revertir la tendencia de estos diferenciales negativos”.
Dos tercios del Camino de Santiago
El tercer informe dado a conocer hoy desglosa el uso de los fondos europeos destinados a la conservación del Camino de Santiago, un apartado del programa para la promoción del turismo en Galicia, que cuenta en total con un importe cercano a los 100 millones de euros repartidos entre los años 2015 a 2022. Con casi 18 millones, la partida dedicada al cuidado de la ruta xacobea es la segunda de mayor importancia.
Una vez analizado el período 2014-2020, el Consello concluye que, en este caso, la partida sin ejecutar alcanza el 34,34% algo más de 6 millones de los 17,8 de los que consta. Entre las recomendaciones para mejorar la “insuficiente” ejecución, el órgano fiscalizador incluye la necesidad de contar con un diagnóstico de la situación previa. Tampoco existe un seguimiento anual ni una evaluación final por parte de la “entidad responsable de las 86 acciones que se pretendían poner en marcha”.
Por todo ello, el Consello considera que el seguimiento del Plan Director non fue el “correcto” y por eso no hubo “conocimiento oportuno” de las situaciones desfavorables, lo que hubiese permitido adoptar “las decisiones más acertadas para superar las dificultades de su ejecución.
La Xunta defiende una “ejecución plurianual”
Consultadas por el informe del órgano fiscalizador, fuentes de la Xunta responden al informe recordando que los fondos europeos “tienen un período de ejecución plurianual”. Así, un presupuesto anual recoge la dotación para ese año “con el fin de comenzar a movilizar recursos que se van ejecutando en distintos ejercicios”.
Eso “no significa que se pierdan fondos ni que no se ejecuten, sino que se reparten en un período más amplio, tal y como indican las convocatorias y las licitaciones”. Como ejemplo, destacan que la administración autonómica “ya ejecutó a día de hoy al cien por cien los fondos del período 14-20, y tiene en marcha los recursos del período 21-27 que se podrán ejecutar hasta diciembre del 2029”.