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Iberdrola, enemiga de las renovables
Pues no puede ser. O mejor dicho, sí que podría ser, de hecho Greenpeace no solo ha demostrado que esto es posible en su estudio Energía 3.0, sino que ha desarrollado un concepto de empresa que lo haría realidad, Iberogreen.
El problema es que hay alguien que no quiere que se hagan realidad los cambios necesarios que permitirían la existencia de actividades como la de Iberogreen a gran escala. Ese “alguien” es Iberdrola.
A pesar de su imagen verde, Iberdrola ataca a las energías renovables para proteger su negocio prioritario de energía sucia, y para ello utiliza toda su red de influencias políticas para lograr una legislación favorable a sus intereses.
Como muestra el informe “Iberdrola: empresa enemiga de las renovables”, el principal negocio de Iberdrola es el gas, el uranio y el carbón, no las energías renovables. El avance de las renovables está perjudicando las enormes inversiones que ha hecho esta empresa en centrales térmicas de gas. Por ello Iberdrola emprendió una campaña de descalificación a las renovables. Y usa todo su poder para influir en gobernantes y políticos, de todos los colores, que luego fichan en su empresa.
Gracias a ese poder de influencia, ha ido consiguiendo normativas y legislación que favorecen sus intereses económicos y que perjudican gravemente a sus competidores de las energías renovables. El ejemplo más reciente ha sido el trato de favor a su central nuclear de Garoña para que pueda permanecer sin desmantelar a pesar de haber sobrepasado todos los plazos legales.central nuclear de Garoña
Ya hemos sobrepasado demasiadas líneas rojas en cambio climático, peligro nuclear, crisis económica y pérdida de empleo. España necesita otro modelo energético, y necesita energías renovables como solución a esos problemas.
Iberdrola tiene que reconocer que el futuro solo puede ser 100% renovable y, en consecuencia, debe abandonar sus inversiones en energías sucias, dentro y fuera de España y volver a invertir a gran escala en generación renovable. Pero si Iberdrola no está dispuesto a hacerlo, que no impida a que lo hagan otros.
Si piensas que Iberdrola y el Gobierno deben actuar para que España vuelva a ser líder en el desarrollo de energías renovables y crees que una Revolución Energética es imprescindible, exige a Iberdrola que detenga ya su campaña de ataque a las energías renovables y deje de presionar al Gobierno para someter la política energética a sus intereses.
Mientras no lo haga, denunciaremos su responsabilidad como enemiga de las renovables.
Pues no puede ser. O mejor dicho, sí que podría ser, de hecho Greenpeace no solo ha demostrado que esto es posible en su estudio Energía 3.0, sino que ha desarrollado un concepto de empresa que lo haría realidad, Iberogreen.