Madrid es una ciudad de bares. Según el Directorio Central de Empresas elaborado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), la hostelería de la región cerró 2023 con 29.840 establecimientos de bebidas y comida censados, lo que supone un bar o restaurante por cada 237 habitantes. En lo que respecta a la capital, los datos son más difusos, aunque se estima que hay alrededor de 14.000 bares en la ciudad. Vamos, uno en cada esquina.
Esta cifra tan llamativa no es para nada casual y tiene su explicación en el movimiento migratorio que se produjo en Madrid alrededor de los años cincuenta. Miles de personas vinieron desde otras comunidades como Extremadura, Andalucía, Galicia o Asturias buscando nuevas oportunidades en la gran ciudad. Su llegada no solo enriqueció a la capital económicamente, también lo hizo en lo que respecta a su cultura y tradiciones. Vamos, que pusieron todo patas arriba y transformaron la ciudad dándole una nueva personalidad.
Madrid ya era una ciudad de tabernas y tascas, sobre todo en en los barrios más céntricos, pero con todos estos migrantes llegaron los que ahora se han convertido en los “bares de toda la vida” para muchos madrileños. De la mano de estos establecimientos se forjó ese sentimiento de barrio tan característico de la ciudad, donde el bar es el punto de encuentro con los amigos, el sitio en el que empiezan los días y acaban las noches, donde se ríe, se celebra y alguna que otra vez también se llora. Pero la gentrificación está desgastando poco a poco a estos negocios de siempre. Muchos han sido sustituidos por cadenas de comida rápida o nuevos conceptos culinarios.
Con cada bar que cierra mueren un poco más los barrios y su gente. Por eso, en Hoy Se Sale hemos decidido rescatar una recomendación por cada distrito de la capital. En este listado no encontrarás locales que destacan ni por su decoración ni por la presentación de sus platos, pero sí lugares donde disfrutar de un buen rato con amigos, por poco dinero y con comida de calidad. De esos bares con servilletas en el suelo, con tapas en la barra, con un olor característico a frito y unas cañas bien tiradas. En los que comer un menú del día contundente y barato o tapear.
Nuestras recomendaciones están basadas en la experiencia de sus propios clientes habituales, que son los que de verdad cuentan con el criterio suficiente para catalogarlos como los mejores. Recopilamos 21 establecimientos de la ciudad que resisten a la gentrificación, el turismo y el paso del tiempo en una ciudad en la que cada vez quedan menos lugares auténticos. Estos son los bares de barrio mejor valorados de cada distrito de Madrid:
La pequeña Graná en Arganzuela
Un clásico del tapeo que no puede faltar en ningún listado de bares en la capital que se precie. Como otros muchos de esta selección, es el resultado de la llegada de migrantes andaluces a la capital con los que se popularizó la tradición de caña más tapa gratis. El nivel que hay en Granada es difícil de superar, ir a esta provincia es pagar solo por beber y comer más que pagando, pero la Pequeña Graná ha conseguido traer esta filosofía hasta la capital, concretamente a la calle Embajadores, donde el bar es todo un icono.
Tapas 100% andaluzas que van desde pescaito frito hasta chopitos, pasando por unas deliciosas tortillas de camarones y que como aspecto diferencial se pueden elegir.
- Dónde: Calle de Embajadores, 124 (Metro Delicias, L3)
Cervecería Ventura en Barajas
La comida y la bebida en un bar son muy importantes, pero recibir el alago constante de los clientes por el buen trato recibido es todo un orgullo. Los dueños de la Cervecería Ventura, Sonia y Omar, están acostumbrados a recibir los buenos comentarios de todo aquel que pasa por allí. Su simpatía la combinan con buenas tapas, variedad en la carta y comida casera.
Imprescindibles sus croquetas, que van desde las típicas de jamón ibérico hasta otras menos convencionales como las de oreja o torreznillos. Sus huevos rotos y sus revueltos de champiñones tampoco te dejarán indiferente.
- Dónde: Calle de Gonzalo de Céspedes, 4 (Metro Barajas, L8)
Bar Río en Carabanchel
El Bar Río es historia de Carabanchel. Cristina y Mariola, sus dueñas, abrieron en 1992 y desde entonces se han convertido en un símbolo para los vecinos del distrito. Desde sus fiestas de carnaval hasta sus tortillas de patatas, el Bar Río es mucho más que un bar. De clientela fiel y adaptado a los nuevos tiempos. Aunque mantiene su esencia inicial, la carta se ha abierto a nuevas opciones con propuestas vegetarianas y dejando espacio para los clientes de cuatro patas.
En lo culinario destacan sus bocadillos y sus tapas de toda índole. Llevan tres décadas dando vida al barrio y pretenden seguir haciéndolo por muchos años más. Sin duda, imprescindible si vas por Carabanchel.
- Dónde: Cale del Halcón, 6 (Metro Vista Alegre, L5)
Bar Santurce en Centro
En el distrito Centro es difícil encontrar establecimientos que no se hayan doblegado al turismo y la gentrificación. Es difícil pero no imposible. El Bar Santurce es mítico. Inaugurado en 1977 por Félix Lázaro, este bar familiar es toda una institución en la zona de bares de El Rastro. Recomendado incluso por la delegada de Cultura en el Ayuntamiento.
Con una oferta gastronómica que tiene en las sardinas a la plancha su especialidad, es conocido por ser una de las pocas tascas en las que se puede seguir tomando una caña bien tirada o un vermú acompañado de alguna tapa tradicional sin dejarse el sueldo. Sus clientes lo destacan por seguir manteniendo la misma esencia inicial, incluso en su decoración, que apenas ha cambiado en todos estos años.
- Dónde: Plaza del General Vara de Rey, 14 (Metro La Latina, L5)
La Bodeguita en Chamartín
Una taberna humilde de las de toda la vida en el barrio de Prosperidad, que cumple con todos los requisitos para ser uno de esos indispensables: cercanía de los camareros, buenas tapas y comida a buen precio. Su plato estrella son las patatas con vinagre.
Suena raro, pero cuando las pruebas sorprenden gratamente y recién fritas son espectaculares. Además, ofrecen un menú del día con buenas y variadas opciones por 13 euros.
- Dónde: Pasaje de Pradillo, 2 (Metro Cartagena, L7)
Gandarío en Chamberí
Si hay algo que caracteriza a los bares de toda la vida es que ir a uno de ellos es como visitar a tu abuela: vas a comer hasta reventar. En Gandarío se toman esto al pie de la letra. Llevan 35 años en Chamberí y sus tablas de carne y patatas son su plato estrella.
Además, han creado un arsenal de 14 salsas caseras con las que acompañarlas que consiguen que más de un cliente termine rebañando el plato. Además, también sirven bocadillos y hamburguesas de un tamaño estratosférico. Es el lugar ideal para ir con amigos y compartir un buen rato sobre la mesa.
- Dónde: Calle de Gaztambide, 28 (Metro Moncloa, L3 y L6)
A'Conchiña en Ciudad Lineal
No solo queda la huella de los migrantes andaluces en Madrid, también de los que vinieron del norte, como es el caso de la cervecería gallega A'Conchiña de Ciudad Lineal. Su especialidad son las patatas bravas, pero sirven todo tipo de tapas. Albóndigas, paella, salmorejo, fabada, estofado... Todo esto solo para acompañar cada bebida.
En su carta, las zamburiñas, el pulpo a la gallega y los pimientos de padrón con patatas no pueden faltar. Vamos, que ir a esta bar es todo un desfile de manjares. Además, televisan partidos deportivos y sus clientes lo definen como un sitio muy acogedor.
- Dónde: Calle de Benidorm, 32 (Metro El Carmen, L5)
El Mordisco en Fuencarral-El Pardo
El Mordisco es uno de esos sitios a los que merece la pena ir a tomar el aperitivo, después quedarse a comer y alargar la sobremesa lo máximo posible. Su carta está repleta de platos cuidadosamente elaborados, fusionando tradición y creatividad. Han sabido mantener su esencia más tradicional a lo largo de los años y continuar sirviendo los platos de cuchara de siempre, que, en este caso, traen de tierras cántabras.
Desde las croquetas caseras hasta los productos de Santoña, pasando por opciones de casquería y otras delicias, tienen siempre algo para cada amante de la buena comida. Además, han sido premiados por el que es su producto estrella: el cocido. Es uno de los mejores de Madrid y se sirve desde finales de octubre hasta abril. Lo sirven en tres vuelcos y se puede elegir entre el madrileño y el montañés. Aunque sus clientes lo que más destacan es su atención cercana y su increíble calidad-precio.
- Dónde: Avenida del Monasterio de Silos, 20 (Cercanías Paco de Lucía, C7 y C8)
La Viña en Hortaleza
“Ya no existen bares con tanta calidad”, dice una de sus últimas reseñas en Google. Y no es de extrañar, ya que es uno de esos sitios que nunca falla. Tienes una comida con amigos: La Viña. Quieres tomar unas tapas por pocos euros y de buena calidad: La Viña.
Sus orígenes son manchegos y por todos es sabido que como en La Mancha se come en pocos sitios. Gachas, migas con huevo, oreja frita... La mejor comida tradicional que se puede encontrar por la zona de Hortaleza. Todo mejor cuando te reciben siempre con una sonrisa, que es lo que más destacan los clientes de su personal.
- Dónde: Calle de Sanlúcar de Barrameda, 10 (Metro Hortaleza, L4)
La Bodega de Toñín en Latina
Toñín es toda una celebridad en el distrito de Latina. Todos los vecinos lo conocen y su simpatía le ha llevado a conseguir una clientela especialmente fiel. Es el bar del barrio de siempre, al que han ido abuelos, padres y nietos. El lugar ideal para tomar unas cañas por tan solo 1,50 euros que siempre van acompañadas de su respectiva tapa. Toñín debe de estar haciendo algo muy bien cuando la gente se agolpa en su barra y en las noches de verano es complicado encontrar un sitio para sentarse.
Sus tostas de gambas, gulas o jamón son lo más solicitado en La Bodega. ¿Y lo mejor del local? Ellos mismos lo dicen: su magia. Y no es sentido figurado. Que no te extrañe entrar al bar y encontrarte un mago en pleno espectáculo.
- Dónde: Calle de los Yébenes, 123 (Metro Eugenia de Montijo, L5)
La Mina en Moncloa-Aravaca
Un local muy auténtico. Así lo definen sus clientes. El lugar ideal para ir a tomar una cerveza, picar algo y quedarse un ratito más. Es acogedor y los precios son de esos que ya casi no se encuentran en ningún sitio. La carta es pequeña, pero suficiente.
Callos, bravas, tortilla, calamares, chorizo al vino, oreja, lacón a la gallega, morcilla y jamón. Vamos, el combo perfecto.
- Dónde: Calle de Martín de los Heros, 29 (Metro Ventura Rodríguez, L3)
Gredos en Moratalaz
Para muchos, las mejores bravas de Madrid. El Bar Gredos se ha ganado un lugar en el corazón de los amantes de este plato tan típico de los bares madrileños. ¿El por qué de su fama? Su precio: dos euros el plato.
@cocituber Bar Gredos, Moratalaz
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En cuanto al bar, es el típico de barra de latón, menús escritos en pizarra, barriles como mesa y una terraza perfecta para los días de verano. Además de sus bravas, no te puedes perder sus champiñones ni su oreja, muy valorada también por sus clientes.
- Dónde: Calle del Arroyo Belincoso, 13 (Metro Estrella, L9)
Bar Madrid en Puente de Vallecas
Ninguna ciudad sin su bar homónimo. El Villalobos es todo un emblema de Puente de Vallecas, donde no solo se puede ir a tapear o tomar algo, también a comer la paella de los domingos. El bar es muy pequeño, pero siempre hay hueco para todo el que esté dispuesto a pasar un buen rato.
Sus desayunos son espectaculares: café, zumo y tostadas para dos por menos de diez euros. Sus huevos rotos con patatas también tienen buena fama. Si te gusta tomar la cerveza en copa congelada y disfrutar de una comida casera y tradicional, el Bar Madrid es tu sitio.
- Dónde: Calle de Villalobos, 145 (Cercanías El Pozo, C2 y C7)
Bar Aguilar en Retiro
Bar de los de toda la vida para ir a tomar el aperitivo, comer de raciones o un menú. El trato es inmejorable y el ambiente espectacular. Quedan muy pocos bares así ya en Retiro, que también se ha visto gravemente afectado por el turismo masificado. Sus clientes, cada vez que salen por la puerto no ven el momento de volver.
Antonio y su familia son muy queridos por todos los vecinos de la zona y ponen mucho cariño en cada detalle y plato que sirven. La carta es muy humilde, pero de allí nadie se va sin comer y beber bien.
- Dónde: Calle de Sánchez Barcáiztegui, 36 (Metro Pacífico, L1 y L6)
Jurucha en Salamanca
Un vasco en el barrio de Salamanca y como buen vasco, templo de los pinchos. Su barra está repleta de estas suculentas creaciones, a cada cual más apetecible. Atún con tomate, champiñones, cangrejo... Es uno de esos sitios a los que vas con la intención de tomarte un par de pinchos y terminas comiendo a base de ellos.
La tortilla es otro imprescindible y en cuanto al precio, nada de rascarse el bolsillo: por diez euros puedes comer o cenar acompañando la comida de un buen vino. ¿Se puede pedir más?
- Dónde: Calle de Ayala, 19 (Metro Serrano, L4)
Trabancos en San Blas-Canillejas
Los callos favoritos del chef Martín Berasategui. Ahí es nada. Desde que el cocino los probó se ha convertido en su lugar de culto en Canillejas y cada vez es más complicado encontrar un sitio para sentarse a probarlos. Su tortilla de patatas también es de otro nivel. Hacen un pincho de tortilla que no tiene nada que envidiar a los más famosos de Madrid.
El bocata de oreja tampoco está nada mal y su ensaladilla también es de ensueño. Eso sí, te avisamos: necesitarás pedir varias raciones de pan durante la comida para rebañar el plato.
- Dónde: Calle de Boltaña, 18 (Metro Torre Arias, L5)
Bar Benito en Tetuán
Benito se ha hecho con el cariño de todos los tetuaneros. Lleva en el distrito más de un año y de dos haciendo tremendamente feliz a sus clientes. En ninguna mesa faltan sus respectivas tapas con cada bebida, tampoco una sonrisa con la que alegrar el día a cualquiera. Benito es un as cortando jamón, así que no olvides pedirlo durante tu visita.
Es el sitio ideal para aquellos a los que les gusta beber y comer pero también compartir una buena conversación, saludar a esos vecinos que hace tiempo que no ves o intentar arreglar el mundo desde la barra del bar. De vez en cuando, la música en directo acompaña sus interminables veladas y ahí es cuando surge la magia.
- Dónde: Calle de las Magnolias, 56 (Metro Ventilla, L9)
La Unión en Usera
Entre todas las opciones de comida asiática de Usera también se abre alguna que otra opción de comida tradicional y castiza. Para sus clientes es “de lo mejor que se puede encontrar en el distrito” y sus desayunos han abastecido a cientos de vecinos del barrio a lo largo de los años. En dos palabras: croquetas y picadillo. Los indispensables de La Unión.
En este bar es posible sentirse como en casa y si eres intolerante al gluten estás de suerte, porque tienen entre su gran variedad de cervezas alguna que otra apta para celiacos. Pepe y Lucía trabajan duro para darle lo mejor a su clientela y por mucho que pasen los años, ahí siguen.
- Dónde: Avenida de Rafaela Ybarra (Metro Usera, L6)
La Taberna de Chana en Vicálvaro
Cocido, callos, caracoles, tapas y platos madrileños en una taberna típica de paredes con ladrillo visto. Por resumir brevemente lo que es La Taberna de Chana. El local de Vicálvaro no es el único que ostentan en la capital, también puedes encontrarlos en otras partes de la capital, aunque en este distrito son todo un emblema.
Son los más madrugadores del barrio, pues son los únicos que abren sus puertas a las ocho de la mañana y dan de desayunar a todos los vecinos y trabajadores de la zona. Con churros incluidos. Es difícil elegir algo de su carta, pero son expertos en pescados y mariscos. ¡No dejes de probarlos!
- Dónde: Bulevar de Indalecio Prieto, 13 (Metro Valdebernardo, L9)
Bar Zoilo en Villa de Vallecas
Uno de los míticos del distrito. De esos bares que se esfuerzan por abrir muy temprano para dar de desayunar a todos los trabajadores que cada día ponen las calles. Los que habitualmente desayunan en el Zoilo recomiendan encarecidamente sus tostadas de aguacate, son las más famosas de Vallecas.
Por supuesto, no todo son desayunos. También sirven buenas tapas. Los torreznos son una apuesta fija, acompañados de un botellín nunca fallan. Y qué decir del trato a sus clientes, eso es insuperable. Para muchos, el bar Zoilo es como su segunda casa. De parada obligatoria si pasas por Vallecas.
- Dónde: Calle del Congosto, 74 (Metro Congosto, L1)
La Morcilla en Villaverde
Para terminar este listado, un icono del distrito de Villaverde: La Morcilla. Si hay algo por lo que destaca este bar es por su habilidad para curar resacas con su famosa trifásica. Es ese bar al que acuden cada domingo jóvenes, niños y mayores para desayunar, tomar el aperitivo o comer. Su nombre obviamente está relacionado con su plato estrella, la morcilla. Tampoco hay que subestimar sus gallinejas.
@cocituber La Trifásica del bar La Morcilla de Villaverde @DeTapasConRufo | Rufo Segovia ♬ Ring My Bell - Silver Disco Explosion
La casquería es su especialidad y con sus bocadillos de oreja frita picante han conseguido revivir muertos. Lleva abierto desde 1970 y es de esos bares que inundan la calle de un olor a fritura característico. Un bar para dejar de lado los políticamente correcto y comer con las manos, rebañar la salsa con pan y disfrutar como antes.
- Dónde: Calle Alberto Palacios, 2 (Metro Villaverde Alto, L3)