En los últimos meses, la crisis-tragedia griega ha dejado espacio a las 'startups' en los medios internacionales. Por ejemplo: The New York Times hablaba de que con las 'startups', los griegos recuperaban su propia economía; Time, de que el florecimiento de startups tecnológicas plantaba cara a la recesión. La narrativa es la misma: la crisis llevó a las 'startups' y las 'startups' pueden llevar a la recuperación. La economía del país lleva en crisis desde 2008, la tasa de desempleo ha alcanzado el 27% y el juvenil ya va por el 58%.
¿Qué pasa? Remontémonos a 2011. Startup Live es uno de los primeros eventos europeos sobre 'startups', en el que durante tres días los participantes se juntan para dar forma a sus ideas de negocio y ponerlas en marcha. Fundado en Austria en 2008, fue en el verano de 2011 cuando Konstantina Zoehrer, consultora y colaboradora en la red de emprendimiento social Ashoka, decidió llevarlo a Atenas.
“Las noticias sobre Grecia son principalmente sobre la crisis, pero hay muchas más cosas pasando en el país con impacto positivo, incluso aunque parezcan pequeñas”, escribió entonces. La próxima edición del evento, el mes que viene, será la tercera. “La primera fue más genérica porque el 'ecosistema' era aún joven”, cuenta por teléfono su actual organizadora, Xenia Matropetrou. “Ahora es más maduro. Muchas 'startups' han salido ya de los eventos y de los espacios de 'coworking'”.
“¡Por supuesto!”, insiste Matropetrou cuando le preguntamos si de verdad la crisis ha tenido que ver con que florezca este 'ecosistema startup'. “La crisis le ha costado el trabajo a muchísima gente. En dos años han entendido que ya no es posible recuperar o encontrar un puesto, así que piensan que podría ser una buena idea”.
A los españoles esta historia nos resulta familiar. Casi tanto o más que la que contaba, el pasado mes de noviembre y durante una conferencia sobre desempleo juvenil, Dimitris Kalavros, cofundador de la red de blogs Nest Media y organizador del TEDxAthens: la de los 'emprendedores obligados'. Kalavros se refería a esas personas que, sumando crisis y la moda de los emprendedores, se veían 'forzados' a convertirse en uno. Durante su intervención, se preguntó si los mensajes animando a todo el mundo a montar empresas, sumados a al alto desempleo juvenil y la elevada cualificación (en resumen: los jóvenes salen de la universidad y no encuentran trabajo), estaban empujando más de la cuenta a emprender sin darse cuenta de que, de hecho, no es tan fácil.
El Global Entrepreneurship Monitor, un informe internacional que lleva años estudiando el emprendimiento en todo el mundo (en todos los sectores, no sólo en tecnología e internet), destaca a Grecia en su edición de 2013. “Su perfil emprendedor es muy diferente al perfil medio de una economía impulsada por la innovación (…) Parece que debido a la crisis, en Grecia, las oportunidades de negocio percibidas son muy bajas, aunque las capacidades para hacerlo son altas”, resume. “Por otro lado, la naturaleza de las actividades emprendedoras tiende a ser poco ambiciosa y llevada por la necesidad”. Según la firma Endeavor Greece, que analizó las oportunidades de negocio en el país, en 2013 se fundaron 144 nuevas 'startups' en Grecia. En 2012 fueron 65 y en 2010, 16.
“Hubo una burbuja”
Tras apuntarse a la fiebre 'startup', ahora las cosas en Grecia se “reorganizan”. Mastropetrou coincide con Kalavros. “No sé cómo es en España, pero creo que aquí intentamos muchas veces copiar a Estados Unidos y no somos buenos en eso. Hubo mucho 'hype' entre 2010 y 2011; en un momento dado hubo una burbuja de emprendimiento. Hace dos años había un evento cada fin de semana, era una locura. Ahora hay menos. La gente ha empezado a entender que necesitas equipos, habilidades y financiación para emprender”.
Endeavor calcula que treinta de las nuevas compañías atrajeron 42 millones de euros de inversión en 2011, comparados con el medio millón de 2010. Y en 2012 tuvo lugar, según la revista Time, un hecho importante: Openfund, una firma de capital riesgo fundada en 2009 con el objetivo de invertir en compañías innovadoras dirigidas a mercados internacionales y que crearan tecnología, empezó a ejecutar fondos del Fondo Europeo de Inversiones que van específicamente a 'startups' tecnológicas. En diciembre de 2012 anunciaron una nueva ronda de 10 millones (el 70% de los cuales vienen de esos fondos europeos). Desde entonces, Openfund ha invertido en ocho empresas (aquí puedes ver cuáles). Y el Gobierno está, como hemos visto en otros 'hubs', haciendo esfuerzos para promoverlo y apoyarlo.
Adivina quién hizo un 'tour de startups' hace unas semanas: durante su visita al país, el primer ministro griego llevó a Angela Merkel a hablar con emprendedores de éxito. Durante la visita, ambos aseguraron que acelerarían la creación de un fondo de 500 millones de euros para pequeñas y medianas empresa patrocinado por Grecia, la Unión Europea y Alemania. Pero eso es sólo su anuncio. Los números dicen que en 2013 se invirtieron unos 55 millones de capital riesgo en Grecia. Y algunas empresas empiezan a dar resultados.
Aunque la narrativa nos hable de crisis y desempleo juvenil, las compañías que están recibiendo rondas de capital semilla tienen detrás a gente con experiencia en 'startups'. Incrediblue, un “Airbnb de los barcos”, nacida en 2012 de mano de tres fundadores de más de 30 años, recibió sus primeros 100.000 dólares a principios de año. Workable, un software para encontrar trabajadores (el llamado 'recruiting'), 600.000 de Openfund y un millón y medio de la firma británico-israelí Greylock. Sus fundadores vienen de una de las 'startups' griegas más notables: la plataforma de monetización móvil Upstream, donde trabajaron juntos como CEO y CTO respectivamente.
También ha habido ventas. La plataforma de analítica móvil Bugsense, fundada en 2011, fue adquirida por una cantidad no pública por Splunk, una empresa de datos de San Francisco que salió a bolsa en 2012. Y otros nombres sonados incluyen Taxibeat, 'app' de taxi fundada en 2011, expandiéndose internacionalmente en Latinoamérica (México, Río de Janeiro y Sao Paulo) que de momento ha recibido 3,4 millones o Pinnatta, la más social: una 'app' para compartir tarjetas de felicitación que funciona principalmente en Estados Unidos, nació en 2011 y anunció recientemente una ronda de 1,5 millones para crecer.
“Es un momento emocionante para Atenas”
¿Y ahora qué? De acuerdo con el Global Entrepreneurship Monitor, la tasa total de actividad emprendedora (la cantidad de gente que quiere crear o ya tiene una empresa) indica que hubo un pequeño 'boom' durante el comienzo de la crisis que se ha tranquilizado durante el último par de años: mientras en 2008 el 9,9% de la población adulta eran “potenciales o establecidos emprendedores”, en 2013 sólo el 5,5%. Todo vuelve a su cauce.
“Grecia necesita empezar a hacer proyectos que tengan también impacto en los problemas de la vida real. Esto y la sostenibilidad son las dos aspectos más esenciales para el ecosistema 'startup' griego”, añade Xenia. También es optimista respecto a los esfuerzos gubernamentales. “Ya no están simplemente dando dinero. También crean espacios de 'coworking', consultorías, financiadas por el fondo griego. Así que el acercamiento es más holístico”. Más de ecosistema conjunto – y no de dar dinero por darlo.
Otros son aún más optimistas sobre la ciudad convirtiéndose de aquí a unos años en un hub de 'startups' importante. Vuelven a ligarlo al desempleo – más todavía al juvenil - a la alta cualificación y a la crisis. En una entrada reciente del blog Digital Hub de Telefónica, Mike Muzurakis, fundador de mist.io (otra 'startup' de allí), examinaba las ventajas de Atenas para concluir que se avecinan tiempos “emocionantes”. “Mientras el ecosistema madura y más 'startups' tienen éxito, somos optimistas pensando que la ciudad podría convertirse en un 'hub' importante en el este de Europa y Asia occidental”.