El emprendedor estadounidense Jimmy Wales comenzó a darle vueltas a la idea de crear una enciclopedia onlineonline a finales de los 90. Fue entonces cuando contrató a Larry Sanger para dirigir el desarrollo de lo que entonces bautizaron como Nupedia, una iniciativa abierta que vio la luz en marzo del 2000. Un año después, Sanger decidió lanzar un proyecto colaborativo paralelo para crear artículos antes de que estos pasaran las distintas revisiones que exigía el esquema editorial. Así nacía WikipediaWikipedia.
Hoy, Sanger lleva las riendas del segmento técnico de otra enciclopedia digital, Everipedia, una versión “reinventada para la era moderna”. Desde que dejó su trabajo al lado de Wales, este filósofo de formación ha criticado el funcionamiento de Wikipedia y apuesta por impulsar un nuevo sistema que recopile la información publicada en todas las enciclopedias de internet.
“Compartí la idea de Greater Wiki [ese agregador universal] con los responsables de Everipedia. He hablado con ellos desde los comienzos de su proyecto en 2015 y me invitaron a unirme”, revela a HojaDeRouter.com Sanger, que se sumó a la iniciativa con un cargo directivo a finales del año pasado. Su función es hacer posible el nuevo objetivo de Theodor Forselius y compañía: mudar todo el contenido de Everipedia a una blockchainblockchain o cadena de bloques. Un paso que le acerca un poco más a su anhelada Greater Wiki.
Un nuevo modelo de enciclopedia online
Incorporar la tecnología blockchainblockchain, detrás de las criptomonedas como Bitcoin, convertiría Everipedia en una herramienta descentralizada. La enciclopedia online vio la luz en 2014 con Wikipedia como modelo y como base —empezaron copiando todas sus entradas—. Sin embargo, a diferencia de esta, sus numerosos fundadores, Sam Kazemian, Theodor Forselius, Travis Moore, Mahbod Moghadam, George Beall y Christian Deciga, la han concebido como un negocio.
Hasta el momento, el sistema es prácticamente idéntico al de Wikipedia: cualquier usuario puede contribuir escribiendo y publicando artículos. Una de sus principales diferencias radica en la interfaz, que incluye espacios sociales para que los editores puedan comunicarse. Además, estos ganan puntos cuando crean contenido y los más activos figuran entre los primeros puestos de un ranking públicoranking que aparece nada más abrir la página.
Según sus responsables, se trata de una versión moderna de la Wikipedia, más abierta, inclusiva, menos exigente y con menos censura o eliminación de artículos. En Everipedia, donde no existe ningún criterio de relevancia, “se puede publicar cualquier cosa”, dice Sanger. Por eso abundan, sobre todo, contenidos sobre personajes famosos, estrellas de YouTube u otros asuntos de la cultura popular. Esto, advierte el estadounidense, cambiará en el futuro. “Estamos poniendo más atención en los temas académicos, es uno de los motivos por los que me han contratado”, asegura.
Llevar el proyecto a una cadena de bloques permitirá implantar un modelo donde los usuarios generarán tokens por sus contribucionestokens. “El aspecto de la página no va a cambiar mucho, pero funcionará como una especie de base de datos, una red donde la comunidad irá publicando sus textos”, explica Sanger.
Uno de los aspectos más importante de la futura plataforma es que todos los usuarios podrán valorar los artículos. De esta forma, podrán escoger también entre los de mayor calidad e identificar a los editores más prolíficos y fiables, sin necesidad de establecer filtros desde el principio. Además, para publicar una entrada, los contribuidores deberán entregar una cantidad significativa de tokens que quedarán retenidos: solo si el contenido es válido se les devolverán.
Según el estadounidense, el hecho de que exista un sistema de valoración “cambiará la dinámica radicalmente” y permitirá detectar los mejores artículos. Las entradas de diferentes contribuidores competirán por convertirse en las mejor valoradas por la comunidad y encabezar los rankings de cada tema. Y esto, por sí solo, “mejorará la calidad de la información” y evitará que los textos fraudulentos o deficientes ganen popularidad.
Para implantar este modelo, Everipedia trasladará todo su contenido a la plataforma EOS, un ecosistema blockchain desarrollado por la empresa de software Block.one que verá la luz en junio de este año, junto con la nueva versión de la enciclopedia. También cuentan con una inyección de 30 millones de dólares (algo más de 24 millones de euros) de inversión recibidos de Galaxy Digital, una entidad financiera que, junto con Block.one, ha lanzado un fondo de 325 millones de dólares (unos 263, 6 millones de euros) destinados únicamente al proyecto EOS.
Una enciclopedia para englobarlos a todos
Sanger lleva casi dos décadas fundando o uniéndose a proyectos de enciclopedias online con el fin de crear un sistema que subsane los errores y limitaciones de Wikipedia.
Aunque siempre fue una iniciativa libre, Nupedia estaba pensada en un principio como un negocio, no como una organización sin ánimo de lucro. Tras ella se encontraba la empresa Bomis, capitaneada por Wales, Tim Shell y Michael Davis. Cuando la compañía sufrió los efectos del colapso de la burbuja puntocom a finales del siglo pasado, Wales decidió dejar de pagar a Sanger, que ejercía de editor jefe.
Aun así, el filósofo continuó trabajando tanto en Nupedia como en Wikipedia, pero comenzó a sentirse cada vez más descontento con su evolución. Mientras que en Nupedia un equipo de académicos voluntarios revisaban los artículos y la mayor parte de sus editores provenían del entorno universitario, Wikipedia hacía gala de un proceso de publicación más rápido y abierto. Un modelo que, si bien trajo consigo importantes ventajas, también generó graves problemas.
Según Sanger, entre los nuevos editores de Wikipedia había cada vez más personas irrespetuosas que “actuaban de forma anárquica y escribían artículos sobre temas extraños que luego defendían maleducadamente y con agresividad”. El proyecto carecía de un verdadero líder que estableciese unas normas para solventar las dificultades. “La gente se comportaba cada vez peor y no había nadie que pusiera límites ni que les llamara la atención”, dice el fundador de la enciclopedia online más famosa de internet. Al mismo tiempo, aquellos contribuidores con mayor experiencia y conocimientos comenzaron a perder relevancia.
“A finales del 2002 lancé un ultimátum a Jimmy Wales: le dije que abandonaría el proyecto si no podía corregir el problema ni otorgar a los expertos un papel fijo en el sistema”, cuenta Sanger. Su compañero, sin embargo, “se resistía a ver la realidad”. Así que este filósofo cumplió con su amenaza y dejó Wikipedia.
Después de aquello, Sanger ha probado suerte con Citizendium, una enciclopedia online que lanzó en 2007Citizendiumonline a modo de experimento. No llego demasiado lejos. “Era el momento en que Wikipedia vivía su época de máximo crecimiento y era muy difícil competir”, justifica su creador. Las diferencias con su anterior proyecto eran, principalmente, tres: había expertos que editaban y aprobaban artículos, los contribuidores debían revelar su verdadera identidad y aceptar sus condiciones y funcionamiento.
“He pensado mucho sobre los inconvenientes que surgieron en Nupedia, Wikipedia y Citizendium y llegado a la conclusión de que el problema es utilizar un único sistema”, dice Sanger. Siempre habrá personas que no estén de acuerdo con el modelo o las condiciones de una plataforma en concreto y preferirán otra. Por eso quiere crear “una especie de protocolo” que permita aglomerar el contenido de diferentes enciclopedias y plataformas colaborativas de internet. “¿Para qué querrías consultar Wikipedia si tuvieras un sitio basado en valoraciones que incluyera todos los artículos publicados sobre un tema?”, plantea el estadounidense.
Sanger quiere hacer realidad esta especie de enciclopedia de enciclopedias comenzando por el proyecto de Everipedia. “Veo Wikipedia como una oportunidad perdida: creo que lo podemos hacer mucho mejor”, concluye.
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Las imágenes de este reportaje son propiedad, por orden de aparición, de Larry Sanger y Theresa O'Connor