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Opinión - Cada día un Vietnam. Por Esther Palomera

Así serán el cine y la televisión con Apple, Google y Facebook luchando por el trono

En su presentación más esperada de los últimos tiempos, la del décimo aniversario del iPhone, Apple no solo tuvo tiempo para homenajear a Steve Jobs y presentar tres flamantes modelos de su buque insignia: los de Cupertino también anunciaron la llegada de la quinta generación de su Apple TV, que será una realidad a partir del 22 de septiembre, estará disponible desde 199 euros y nos permitirá disfrutar por vez primera de contenidos en formato 4K.

Sin embargo, la que parece la mayor apuesta de los discípulos de Jobs en lo audiovisual poco tendría que ver con este renovado dispositivo y, de hecho, no estuvo presente en la ‘keynote’. Según The Wall Street Journal, la manzana mordida estaría preparada para invertir el próximo año 1.000 millones de dólares (algo más de 800 millones de euros) en la creación de contenido propio para plantarle cara a Netflix y compañía.

Con Amazon presente en el sector a través de ‘The Man in the High Castle’, la criticada serie de Woody Allen y otros títulos originales; Facebook acechando (los de Zuckerberg quieren tener contenidos propios ‘made in Hollywood’ antes de que acabe el año y están dispuestos a invertir hasta 3 millones de dólares por episodio, unos 2,5 millones de euros) y Google dando sus primeros pasos a través de YouTube, el póker de ases estaría completo: los principales gigantes tecnológicos aterrizan en la creación de contenido mientras que el quinto, Microsoft, ya probó suerte allá por 2014 con Xbox Originals, obteniendo unos pobres resultados que hacen pensar que no habrá una segunda oportunidad.

Los grandes nombres desembarcarán en un sector que ya tiene un abultado número de actores. Solo en España están presentes Netflix, HBO y Sky (aunque sin contenido exclusivo, por ahora), aparte de la patria Movistar+ y de otras plataformas de menor calado y que no tienen títulos de factura propia como Rakuten TV (la antigua Wuaki.tv) o Filmin.

Por si fuera poco, AMC prepara su propia plataformaDisney ha roto su alianza con Netflix para probar suerte de forma independiente con la ayuda de Mickey Mouse y Darth Vader. Además, por estos lares aún tendría que aterrizar Hulu con su ‘The Handmaid's Tale’ ('El cuento de la criada'), que ahora mismo está en el videoclub de HBO España. Un tenso panorama en el que ya se producen más series de las que podemos ver y al que solo le falta el desembarco de cuatro gigantes para ponerlo todo definitivamente patas arriba.

¿Cómo llegarán?

“Podemos apostar que el desembarco será feroz”, augura Roger Casas-Alatriste, CEO de la agencia de contenidos transmedia El Cañonazo. “Están llegando casi tarde a un mercado en el que ya hay varias empresas enormes muy establecidas y no pensarán arrancar con medias tintas. Tienen presupuesto y se lo pueden permitir”.

De hecho, una de las cosas que cabe plantearse de cara al esperado aterrizaje de los gigantes en la creación de contenidos audiovisuales es cómo terminará la película: Facebook y compañía podrían engullir a las plataformas que ya existen, o quizá no sea la ley del más fuerte la que impere en el sector y todos puedan convivir en una relativa paz y armonía.

Ya hay indicios que apuntan a que la segunda opción no va a ser muy factible. En ese sentido, Amazon y Apple ya se están midiendo con las estructuras tradicionales del mercado audiovisual por los derechos de James Bond. Ni 007 parece escapar de un turbulento panorama en el que todo tiene tintes bélicos. Sin ir más lejos, hace escasas semanas Netflix conseguía arrebatarle a la cadena estadounidense ABC a la prestigiosa guionista y productora Shonda Rhimes. Si hasta ahora la pelea por los derechos y los mejores creadores era cosa de unas pocas cadenas, el abanico de contendientes se abre ahora hasta rozar el infinito.

Que los gigantes terminen adquiriendo las plataformas que se han abierto camino en el sector sería poco de extrañar. “Me gustaría pensar que no, pero esto sería traicionar su ‘modus operandi’ tradicional”, afirma Casas-Alatriste. “Solo hace falta echar un ojo a estos 15-20 años de plataformas digitales, en los que las grandes se han revalorizado a partir de comprar aliados potenciales y posibles competidores para anularlos”.

Lo que está claro es que las apuestas del póker de ases —Apple, Google, Amazon y Facebook— demuestran que la televisión es la próxima frontera de los gigantes de internet y la tecnología. “Son movimientos estratégicos para tener posición en un sector que probablemente se va a transformar en los próximos años”, señala Oriol Solé, CEO de Tviso.

No será un camino de rosas

Estas multinacionales contarán con una crucial ventaja competitiva respecto a las plataformas que ya están luchando por su parte del pastel. “Tienen información de primera mano de quiénes somos sus usuarios”, recuerda Casas-Alatriste. “Pensemos en la capacidad que tienen Facebook o Google para saber lo que nos gusta o lo que nos va a gustar mañana”, reflexiona.

Si el algoritmo de recomendación de Netflix aún sorprende a muchos de sus usuarios, las probabilidades de que Facebook y compañía acierten son aún mayores. De hecho, tanto la compañía de Zuckerberg como Google tienen otro punto a favor: ya han atraído a una ingente cantidad de usuarios a la plataforma en la que distribuirán sus contenidos.

“Facebook lleva ya varios años apostando por el video como formato de distribución”, rememora Solé. “Ahora la noticia es que va a empezar a crear contenido propio, pero el ‘feed’ de Facebook se trata de un ‘feed’ audiovisual en el que los usuarios pueden ver vídeo, sobre todo”. Y con Google pasa algo similar: sus contenidos irán a parar a YouTube, donde ya hay más de 1.000 millones de usuarios esperando.

“Pero tal vez la mayor ventaja que tengan es que ya existe un modelo probado: el del propio Netflix”, expone el CEO de El Cañonazo. Efectivamente, si los gigantes se animan ahora (y si, de hecho, llegan aparentemente tarde) es porque ya hay alguien que ha abierto camino en un territorio que estaba inexplorado.

Esto se puede ver también como una desventaja. Si bien es cierto que Netflix ya ha probado que la creación de contenido es una opción viable a la hora de atraer usuarios a las plataformas audiovisuales, también lo es que los cuatro gigantes tendrán que disputarle el trono a la firma de Reed Hastings.

Además, hay otro obstáculo que Facebook, Apple y Google pueden encontrarse en su camino: su imagen actual. “La historia de internet demuestra que muchas veces empresas de un tamaño muy grande se han estrellado haciendo cosas que no formaban parte de su área de conocimiento más cercana”, explica Solé. “Al final el consumidor tiene muy asociados los servicios a una función concreta y es muy complicado cambiar la percepción de un servicio”. Solo hay que repasar la larga lista de fallidos intentos de Google a la hora de crear su propia red social.

En cualquier caso, los usuarios y los productores audiovisuales parecen ser los claros vencedores de esta batalla. Al menos, de momento. Los primeros, porque la edad de oro de las series parece ser esta: nunca ha habido tantas opciones a la hora de elegir qué ver, aunque el daño colateral sea no poder verlo todo.

En cuanto a los segundos, Casas-Alatriste dice que “las grandes beneficiadas serán las empresas de producción audiovisual porque la entrada en juego de las empresas tecnológicas no sólo puede suponer una buena inyección de dinero, sino también de su esencia innovadora”. Los corredores están en sus marcas (o a punto de colocarse) y la carrera solo acaba de empezar. Se admiten apuestas.

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Las imágenes de este artículo son propiedad, por orden de aparición, de Vinnie C, Star Wars, Netflix y Robert Scoble