Ethereum, la criptomoneda de un 'hacker' de 20 años que aspira a desbancar a Bitcoin

El futuro del Bitcoin pende de un hilo. Ayer, miles de propietarios de moneda virtual en todo el mundo vieron alarmados cómo se desplomaba la cotización de la divisa. Una caída generada por la incertidumbre de los inversores ante el cierre de una de las mayores plataformas de cotización del Bitcoin, MT Gox, forzado por el posible robo del 6% de todas las monedas que circulan por el mundo virtual, tal y como señalaban diversos medios de comunicación.

Lo que un día se convirtió en la segunda opción para muchos ciudadanos chipriotas, que vieron cómo sus cuentas quedaban bloqueadas por la Troika durante la crisis financiera de 2013, ha llegado a ser un valor que ha cotizado por encima de los 1.200 dólares para después caer por debajo de los 600 (donde está ahora mismo). Con tales antecedentes, uno puede preguntarse si Bitcoin podría ser el próximo gran desastre financiero. Pero no es necesario exagerar. Como ya explicó en su día Hoja de Router , el Bitcoin se ha estado utilizando como una forma rápida de ganar dinero, y no tanto como una nueva forma de comercio.

El contrato virtual

En este ambiente de permanente incertidumbre, el nombre de Ethereum comienza a sonar fuerte. Ethereum no es una simple criptomoneda. Vitalik Buterin, su creador, un joven desarrollador de 20 años, señala que “a diferencia de las monedas virtuales que han ido surgiendo a raíz del Bitcoin, nosotros hemos ideado una red de criptomoneda que tiende a ser lo más generalizada posible”.

Vale, pero ¿qué es Ethereum? Según sus propios 'padres', se trata de un sistema operativo que permite a los usuarios crear aplicaciones basadas en monedas virtuales que pueden ir más allá de su simple uso financiero. Unas monedas que quedan al gusto y la imaginación de su consumidor. Así, si una persona decide montar una aplicación para hacer transacciones –o lo que es lo mismo, enviar dinero a otras personas-, podrá crear una moneda virtual propia a la medida del servicio que pretende ofrecer.

Las monedas inventadas por los usuarios conforman lo que se denomina ‘monedas de colores’. Algo que no es nuevo, pues la red Bitcoin ya incluía dicha posibilidad. Sin embargo, el atractivo de Ethereum no reside en estas monedas, sino en el contrato que crea el sistema una vez que abrimos la nueva aplicación. Como explica la web Coin Desk, “un contrato es un agente autómata que crea el sistema Ethereum para recibir y enviar transacciones, y guardar los balances de esas transacciones”. He aquí lo innovador de Ethereum, que no sólo establece un sistema que escapa al control de los bancos y las autoridades monetarias, sino que también huye del sistema legal. El sueño dorado de los 'criptoanarquistas'.

Como señala Buterin, con los contratos de Ethereum “se podrán implementar derivados financieros, ligados a diferentes contratos, para que las transacciones complejas no sólo sean posibles, sino también relativamente más fáciles”. Los portales de juegos online, las predicciones de mercados y la industria aseguradora son algunos de los negocios que podrían beneficiarse del contrato virtual.

Minería para todos

Desde los inicios de la red Bitcoin, la minería ha sido la golosina que atrae a cientos de usuarios ansiosos por hacer algo de dinero. ¿Y en qué consiste eso de 'minar' monedas? “Los nuevos bitcoins son generados por un proceso competitivo y descentralizado llamado minería”, señalan desde Bitcoin.org. “Este proceso se basa en que los individuos son premiados por la red por sus servicios. Los mineros de Bitcoin procesan las transacciones y aseguran la red usando un 'hardware' especializado y recogen bitcoins a cambio de este servicio”.

En un principio, cualquier interesado en conseguir dinero virtual tenía que invertir parte de la capacidad de procesamiento de su ordenador para minar bitcoins. A medida que la red acogía a más mineros en busca de fortuna, comenzaron a surgir los ASICs (Circuito Integrado para Aplicaciones Específicas, en español), unos ordenadores más potentes, cuyo único objetivo es minar criptomonedas. No todo el mundo podía – ni aún puede - costearse un ASIC, y eso ha propiciado que sólo unos pocos se hayan enriquecido con la minería.

La red Ethereum cuenta con su propio sistema de 'minado', que se llama Digger. El algoritmo Scrypt, utilizado en Bitcoin, intenta recompensar a los mineros con ordenadores de andar por casa y evita el abuso de los ASICs. Sin embargo, Scrypt no posee suficiente memoria para batallar contra los dispositivos que ya han empezado a desarrollar grandes compañías. Como señala Bitarin en Bitcoin Magazine, “[por ello] nosotros hemos ideado Dagger, una prueba prototipo de trabajo que cuenta con más memoria”.

¿Y en qué moneda recompensa el sistema a los mineros? En ethers, la criptomoneda de Ethereum que permite, además, pagar las transacciones.

Parece que a los desarrolladores de Bitcoin no les asusta la competencia. “Experimentos de monedas virtuales aparecen todos los días”, señala Jeff Garzik en Coindesk.com. “Esperaremos para ver qué ocurre con el resto de monedas virtuales y revisaremos así las características del bitcoin”. La espera puede tener su recompensa, pero Ethereum aspira a lo más alto. Más vale empezar ahora con los cambios, porque quizás mañana sea demasiado tarde.