Cuando sale de viaje, el común de los mortales echa fotos y, como mucho, se abre un blog para contar sus peripecias, pero Anand Sharma tiene una concepción diferente de aquello que ha de pasar a la posteridad. Lo suyo es la cuantificación extrema. Este programador de San Francisco ha aprovechado sus conocimientos técnicos para monitorizar casi todos los aspectos de su vida, incluso los más insospechados.
104 días, 60 ciudades visitadas, 1.280 aspectos muy diversos analizados y hasta 14 burritos (de los que se comen) anotados. Es lo que Sharma ha logrado registrar desde que arrancara su proyecto en marzo de este año. En realidad, su iniciativa es una historia de diseño, tecnología y ausencia casi absoluta de privacidad. Una forma de hacer una biografía técnica de su vida con un sinfín de información relacionada, sobre todo, con aspectos médicos y de salud.
Del dibujo a la realidad
No lo ha hecho por ambición, ni persiguiendo un objetivo concreto: solo por programar de una forma original. Dibuja, piensa, hace bocetos y escribe código. Comenzó esbozando aquello que quería conseguir, primero sobre el papel y a través de dibujos esquemáticos; después llevándolo a Photoshop para dar a su creación un componente visual y, por último, plasmándolo en una pantalla.
Así, aprovechando cada travesía, se preguntó: ¿por qué no contabilizar los kilómetros que recorro de un lugar a otro? ¿Y los pasos que doy? ¿Y la forma en que viajo a cada uno de mis destinos? ¿Y la comida que ingiero? ¿Por qué no los latidos de mi corazón? ¿Y qué pasa con mi sangre? Durante los tres últimos meses, su iPhone ha ido recopilando, a través de diversas aplicaciones, todos estos datos.
Si accedes a su página web, puedes comprobar que tiene la vitamina D por los suelos; que en las últimas 20 horas ha engordado 24 gramos; que la última vez que salió a correr fue hace 5 días y 14 horas, en San Francisco, y quemó 462 calorías; o que tiene 24 años y cada milésima de segundo su vida se apaga un poco - literalmente.
El suyo es un reto personal y profesional, aunque no le reporta ingreso alguno. Cuando le preguntamos por qué lo hace, ofrece a HojaDeRouter.com la más trivial de las respuestas: “¿Y por qué no?”.
Aplicaciones para cuantificar tu vida
A Sharma le obsesiona sacar el máximo partido a los sensores de su móvil, en combinación con ciertas 'apps' basadas en el movimiento.
Moves es la herramienta que ha escogido para contabilizar sus pasos, la distancia recorrida en sus trayectos, el tiempo que se pasa en el gimnasio y las calorías que quema en cada sesión de entrenamiento. También ha utilizado con este fin, entre otras, la aplicación de Nike, Runkeeper o Strava. El ejercicio físico y los lugares por los que pasa quedan en todo momento registrados gracias a Instagram y Foursquare.
De hecho, Sharma reconoce que esa exposición pública es lo que le mantiene “motivado y funcionando de forma regular”. Le gusta dejar constancia de su recorrido y estar conectado con otros atletas de todo el mundo. Así puede combinar tres de sus grandes pasiones: el 'footing', la fotografía y que la gente preste atención a su trabajo.
Sharma afirma que es importante controlar la salud cuando uno hace deporte, porque cualquier extremo es malo. Por eso también ha medido su ritmo cardiaco en 494 ocasiones y ha podido comprobar que su órgano vital late a una media de 69 pulsaciones por minuto.
Reconoce que la primera vez que alguien le habló de Cardiio, la aplicación que se hace cargo de este asunto, no pensó que fuera a resultar realmente efectiva, pero después se convirtió en toda una obsesión para Sharma y descubrió que su corazón, a veces, iba demasiado rápido. “Era una forma efectiva de hacer una buena medición de mi estado actual”, explica.
Por si fuera poco, el programador pidió a su médico una copia de todos los análisis de sangre a los que se hubiera sometido. Pronto recibió la información completa en su email donde podía ver no sólo su situación en ese momento, sino también las estadísticas de cómo habían variado parámetros como, por ejemplo, la cantidad de vitamina D que necesitaba para estar en buenas condiciones o la grasa corporal. “Tenía que volcar esta información en mi proyecto, se merecía mucho más que descansar sobre un PDF cerrado”, comenta.
HealthKit, una aplicación de Apple, le ayuda a completar la información acerca de su estado de salud.
Sharma registra también sus escaladas, los tuits que publica, el número de archivos que intercambia, el número de líneas de código que escribe, los correos electrónicos que lee, los que contesta, las horas que duerme y hasta los alimentos y bebidas que consume.
“Es una buena manera de tener a mano toda la información” sobre sí mismo para utilizarla en el futuro. “Puede ser una buena forma de tomar decisiones y hacer un balance sobre mi vida”, afirma.
Ahora quiere que le imites
Si echas un vistazo a su página web, comprobarás que resulta casi imposible analizar todos los aspectos que ha monitorizado. Son demasiados. Aun así, nos cuenta que está desarrollando secciones nuevas que lanzará próximamente. Entre ellas, una para registrar los vuelos que pilote – porque tiene licencia -; otra sobre las tareas que realice en su ordenador; una acerca de sus finanzas, como sus hábitos de consumo o una barra de progreso hasta convertirse en multimillonario; e incluso un espacio para cuantificar su vida amorosa.
Y es que, según Anand Sharma, hacer un seguimiento de este tipo de cuestiones le ayuda a mejorar. Además, cree que necesita encontrar un equilibrio entre las diferentes mediciones que tienen que ver con su salud “para crear un buen tablero de instrumentos que me permitan analizar todo en conjunto y luego tomar decisiones de mejora”.
“Es algo que todo el mundo debería hacer”, sentencia. Por eso trabaja en una herramienta para que cualquier persona pueda monitorizarse a sí misma. Se trata de un nuevo proyecto llamado Gyrosco.pe, que aún está en fase de desarrolo y que es, en definitiva, una segunda versión de Aprilzero abierta a la comunidad. Se puso manos a la obra tras recibir cientos de mensajes de seguidores interesados en hacerse un seguimiento similar al suyo.
Sharma cree que los avances tecnológicos le ayudarán a continuar con un proyecto que pretende prolongar de por vida. ¿Te imaginas la cantidad de datos que albergará su web si sigue recopilando datos hasta los 80 años? O imagina, aún mejor, toda la información que recibirán tus nietos como herencia si tú eres quien lo hace.
Según Sharma la información que él comparte – y que tú podrás compartir también dentro de poco -, es “inofensiva y poco sensible”, así que, a su juicio, por publicarla en internet no entraña riesgo alguno. Tal vez no estés de acuerdo. Tal vez valores tu privacidad más que este programador americano.
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