Desde inicios del 2013, en las ferias del mundo del audiovisual no se habla de otra cosa. Todos los fabricantes se han lanzado a producir y vendernos las bondades de esta nueva tecnología que, junto a la OLED, probablemente esté entre los avances más destacados y populares de los últimos años.
Es un hecho. Estamos empezando a ver multitud de televisores 4K. De hecho, ya empezaron a aparecer el año pasado, pero el problema, tanto antes como ahora, llega cuando tratamos de encontrar algo que ver en estos aparatos.
Tenemos el canal, pero no los contenidos
Si te compras ahora mismo un televisor 4K, poco lo podrás aprovechar. Las películas siguen comercializándose en resolución FullHD y aún tardarán en llegar al 4K, por no hablar de las cadenas de televisión que, a duras penas y con retraso, se están adaptando a la alta definición. Tampoco podrás ver tus películas familiares en 4K, porque como ya sabes, todo hijo de vecino tiene una cámara que graba HD o FullHD... ¡Hasta en el móvil! Pocos cuentan con una cámara que grabe 4K. A día de hoy, la opción más económica es la GoPro Hero Black, que cuesta algo más de 300 euros y lo hace a 12 fotogramas por segundo. Aunque ya se empieza a hablar de smartphones que utilizan esta tecnología.
Si bien es cierto que estos televisores pueden readaptar el FullHD al 4K, según dicen algunos de forma sorprendentemente buena, no nos engañemos: no es 4K y por muy bien que pueda escalar la imagen no va a ser lo mismo.
Internet: la vía de escape
A corto plazo, lo más probable es que la forma de aprovechar esta magnífica resolución en los televisores sea el 'streaming'. Se trata de una vía de distribución sencilla y, aunque el consumo de ancho de banda sea mayor con esta resolución, no supone un incremento desmesurado.
Por ahora, YouTube ya permite subir archivos de vídeo en 4K (aquí algunos ejemplos), pero con un proporción de pixeles de 4:3. Vimeo también se ha subido al carro del 4K, pero con el mismo problema que YouTube. No obstante, teniendo en cuenta la escasa cantidad de contenidos disponibles ahora mismo en este formato, es de agradecer que estas plataformas permitan subir vídeos de este tamaño.
Paso a paso, la revolución del 4K se acerca, pero todavía está lejos de entrar en nuestros hogares.