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Inspección de Trabajo investiga la empresa de un líder de Vox en Balears por explotación laboral

Inspección de Trabajo ha iniciado una investigación por explotación laboral contra Terracor, el conglomerado del que es socio el secretario general de Vox en Balears y conseller del Consell de Mallorca, Toni Gili. El organismo ha abierto este trámite tras la investigación publicada por elDiario.es en la que los trabajadores denuncian jornadas de hasta 17 horas diarias, hacinamiento y falta de higiene en sus aposentos, por los cuales pagan 80 euros al mes.

Tras conocer la información que manejaba elDiario.es, el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones se puso en contacto con la Delegación del Gobierno en Balears para solicitar a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social que realizara una inspección con “celeridad y urgencia”. De hecho, prevé que durante este viernes el director de la Inspección se reúna con la Guardia Civil a efectos de coordinar todo el operativo, ya que se considera necesario que también estén presentes durante cualquier intervención. Por el momento se está a la espera de recibir nuevas informaciones por si fuera necesario reubicar a los temporeros o tomar cualquier otra decisión.

La propia ministra Elma Saiz ha expresado su preocupación por el caso a través de la red social X (antiguo Twitter) y ha confirmado que en coordinación con la Delegación del Gobierno ha dado aviso a Inspección de Trabajo “para depurar responsabilidades”. “Este ministerio y la Secretaria de Estado de Migraciones nunca van a escatimar esfuerzos en combatir la explotación laboral”, ha señalado.

Asimismo, tras la publicación del reportaje, Terracor ha emitido un comunicado en el que señala que el grupo siempre ha puesto su empeño “en cumplir con la normativa vigente” y que cuenta con “el aval” de Unió de Pagesos. Asimismo, aseguran que la empresa se ha “sometido y superado” verificaciones de los alojamientos de temporeros por parte de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganadores (COAC). Sin embargo, no concretan si las instalaciones revisadas fueron las mismas a las que hace referencia el reportaje de elDiario.es. Por su parte, Gili ha asegurado que no es socio de la empresa desde el pasado mes de julio.

“Me da vergüenza contarlo a mis amigos”

Varios empleados de Terracor, que es un conglomerado mallorquín formado por seis empresas dedicadas al cultivo y venta de frutas y verduras, han narrado a elDiario.es su experiencia en la empresa: jornadas de hasta 17 horas diarias -aunque lo “normal” es hacer 12 horas la día-, un salario de 6 euros la hora, nóminas sin horas extra remuneradas y falta de transparencia a la hora de comunicar las condiciones de vivienda a los trabajadores antes de convencerles para hacer más de 8.000 kilómetros desde su país para venir a Mallorca a laborar.

“Sé que me puede perjudicar porque igual no dan una buena referencia de mí y el año que viene… Pero quiero que se dé a conocer la realidad, que las nuevas personas que vengan no tengan que estrellarse contra el muro con el que nos damos nosotros”, comenta uno de los afectados. “Me dio vergüenza contárselo a mis amigos. No les envié ninguna foto y sólo les dije que las condiciones no eran muy aptas. A mi madre ni de chiste le cuento”, afirma otro de los temporeros.

Los trabajadores residen en casas prefabricadas -donde duermen hacinadas hasta tres personas, según su relato- o campamentos precarios. Las imágenes que ha publicado elDiario.es demuestran la falta de higiene de las estancias. En las habitaciones compartidas algunas tienen la puerta abierta porque es la única ventilación de la que disponen, mientras que en otras las ventanas están tapiadas por paneles de madera.

Terracor asegura a elDiario.es que el año pasado superó una inspección en los alojamientos de los temporeros, pero no ha sabido concretar qué organismo se encargó de dicha inspección ni cuáles fueron las instalaciones revisadas. “Los trabajadores no tienen ningún lujo, es cierto, pero cumplimos la normativa”, añade la compañía. Tampoco ha podido proporcionar información sobre las condiciones laborales ni las jornadas de trabajo actuales de los empleados.