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El PSIB-PSOE y los ecosoberanistas de Més per Mallorca han reclamado este lunes explicaciones al presidente del Consell Insular, Llorenç Galmés (PP), a raíz de la situación laboral de la portavoz popular en la institución, Núria Riera, quien compagina este cargo con el de jefa de servicio del Govern balear a pesar de las limitaciones que establece la normativa en materia de compatibilidades -en relación al número de horas de jornada laboral que se dedican a las dos funciones y al tope máximo salarial permitido-, y sin tan siquiera haber solicitado formalmente la compatibilidad, tal y como publicó este domingo elDiario.es.
Sobre el papel, Riera dedica un 100% de la jornada laboral a su labor en el Ejecutivo autonómico -donde recaen sospechas de supuesta “inactividad”- y un 75% en el Consell, lo que se traduciría en más de 14 horas diarias y en el embolso de 127.211 euros públicos anuales, una cifra que supera con creces el sueldo de la mayor parte de los presidentes autonómicos e incluso los 90.000 euros que percibe el presidente del Gobierno.
En declaraciones a los medios, el portavoz del PSIB-PSOE en el Consell de Mallorca, Javier de Juan, ha aseverado que Riera “estaría vulnerando ampliamente” las limitaciones previstas en la normativa, por lo que ha exigido a Galmés, quien ostenta la presidencia de la institución insular con el apoyo de Vox, que dé explicaciones sobre estos hechos, recriminándole que en todo el año de legislatura haya ofrecido “la callada por respuesta” cuando se le ha inquirido al respecto. “Exigimos a Galmés que salga a explicar este escándalo”, ha incidido el socialista, quien se ha preguntado cómo es posible que “Galmés permitiera a Riera aumentarse el sueldo como portavoz del PP en el Consell”, para provocar “el absurdo” de una remuneración total del 175% de una jornada laboral ordinaria.
Y es que, si históricamente en el Consell las dedicaciones parciales habían sido de un 50%, la portavoz del PP la elevó al 75% nada más arrancar la legislatura actual. En concreto, la funcionaria lleva a cabo las funciones de portavoz del Grupo Popular en el Consell con una retribución anual de 50.322 euros, mientras que en el Govern, como jefa del Servicio de Gestión de Personal Laboral y Acción Social, percibe 76.889.
Para De Juan, “es evidente que no se están cumpliendo las limitaciones de jornada y de percepciones salariales” que la normativa de los empleados públicos prevé en el supuesto de que se haga compatible la actividad profesional con el ejercicio de un cargo electo. En el caso de Riera, no consta que esté concedida explícitamente esta compatibilidad. El portavoz socialista también ha pedido a Riera que “sea consecuente y que opte por una de las dos ocupaciones remuneradas, que es lo que haría todo el mundo, desde un punto de vista ético y legal”.
Por su parte, el portavoz de Més per Mallorca en el Consell, Jaume Alzamora, también ha reclamado a Galmés que explique “con total claridad y transparencia” la situación laboral en la que se encuentra Riera: “Hay que disipar dudas y aclarar la legalidad de unos sueldos que como mínimo traspasan todos los límites de la ética política”, ha aseverado.
Según Alzamora, la situación, todavía sin explicar, “es grave y podría incurrir en un posible fraude de ley”. “Lo que sí tenemos claro es que de momento el presidente Galmés demuestra una dejadez absoluta en el cumplimiento de sus obligaciones en materia de 'Bon Govern'”. En este sentido, el portavoz ecosoberanista ha criticado la, en su opinión, “debilidad” del pacto PP-Vox que se sustenta, ha incidido, con sueldos públicos. Según Alzamora, Galmés paga el apoyo de Vox pero también los favores de algunos miembros de su partido.
“Parece que el señor Galmés no tiene bastante con mantener su gobierno a base de cargos y sueldos a la extrema derecha sino que busca la fórmula de pagar con dinero público un sobresueldo a la portavoz de su propio partido. No sabemos qué interés oscuro hay detrás”, ha sentenciado.
Cabe recordar que Riera, en agosto de 2017, ya protagonizó una sonora polémica al aprovechar una excedencia como funcionaria para reclamar, como diputada del Parlament balear, la retribución por dedicación exclusiva, percibiendo cerca de 3.000 euros, pese a que ese mes es inhábil en la Cámara autonómica. Riera se acogió al derecho que entonces tenían los parlamentarios de cobrar la dedicación exclusiva si compatibilizaban su trabajo en la Cámara con otra actividad. En declaraciones a Diario de Mallorca, justificó que se trataba de una decisión “por una cuestión personal” e incluso aseguró “haber perdido dinero”. Podemos reclamó su dimisión y el PSIB le instó a “devolver el dinero cobrado de más”. Nada de eso sucedió.