El Consell de Mallorca, conformado por PP y Vox, ha manifestado su intención de modificar la fecha de celebración de la Diada de Mallorca del 31 de diciembre al 12 de septiembre y ha llevado a cabo este martes un festejo conmemorándola de manera extraoficial. Ha sido un evento al que no ha acudido la izquierda balear ni el Pi, dado que consideran que el día oficial, por ahora, es el último día del año. Es, de hecho, la jornada avalada por historiadores y expertos en homenaje a la entrada de Jaume I en Madina Mayurqa el 31 de diciembre de 1229.
El presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés (PP), ha declarado que el 12 de septiembre sería la jornada correcta para celebrar la Diada al aseverar que en el año 1276, en ese mismo día, el rey Jaume II juró la Carta de franqueses i privilegis en las cuales se les otorgaba los derechos de los habitantes del constituido Regne de Mallorca. “Esta recuperación de la fecha ahora es la voluntad de los ciudadanos, que lo trasladaron en las urnas, y lo será con el aval de los historiadores. Una fecha que no se tendría que haber cambiado nunca. El 12 de septiembre es la fiesta de Mallorca”, ha declarado durante la ceremonia extraoficial.
Cabe recordar que, desde finales de la dictadura franquista, la Diada se ha celebrado el 31 de diciembre, fecha en la que en 1229 el rey Jaume I desembarcó en Palma. Sin embargo, en 1997, la entonces presidenta del Consell María Antònia Munar y su extinto partido Unió Mallorquina volvieron a instaurar la fecha el día 12 de septiembre, una decisión que se revirtió durante en 2016, durante el primer mandato del pacto de izquierdas liderado por la socialista Francina Armengol. “Este año no se ha podido celebrar de forma oficial por el poco tiempo que llevamos en el gobierno de esta institución, pero trabajaremos intensamente para que así sea el año que viene”, ha aseverado Galmés.
Al evento han asistido varios altos cargos del PP en Balears como la presidenta del Govern, Marga Prohens; el alcalde de Palma, Antonio Martínez, y varios consellers del Ejecutivo autonómico. Asimismo, también han asistido dirigentes de Vox como el presidente del Parlament, Gabriel Le Senne, y otros altos cargos del Consell.
Tensión con la izquierda
La decisión de cambiar las fechas de la Diada ha generado tensiones con PSIB, la formación ecosoberanista Més per Mallorca y el Pi, quienes no han asistido al festejo extraoficial organizado por el equipo de gobierno del Consell al considerar que el 31 de diciembre es el día idóneo para celebrar la Diada.
Por su parte, los socialistas han criticado que han cambiado la fecha sin acuerdo en el Pleno del Consell y que han introducido tradiciones del PP, como la ofrenda floral a Jaume II, como una regla en la celebración. “No seremos cómplices de esta guerra cultural que PP y Vox en el Consell llevan a cabo en contra de nuestra historia, cultura e identidad como mallorquines. Ahora, PP-Vox nos imponen sus actos de partido y los convierten en actos institucionales”, ha remarcado la portavoz del PSIB-PSOE en Consell de Mallorca, Catalina Cladera.
Por otro lado, desde Més per Mallorca acusan a Galmés de emplear “subterfugios” para celebrar el evento este 12 de septiembre de manera no oficial y de comportarse como una “secta” tras “utilizar la institución para actuar de forma caprichosa y unilateral”. “Llorenç Galmés y sus socios fascistas en el Consell celebran hoy un simulacro de Diada; una conmemoración que contradice la oficialidad del 31 de septiembre”, ha destacado el portavoz de la formación en el Consell, Jaume Alzamora.
Por último, los regionalistas de El PI también se han pronunciado sobre esta polémica. El portavoz del partido en el Consell, Toni Salas, ha calificado esta problemática de “infantilismo político”: “Cada cuatro años no podemos cambiar la fecha según el color político que haya”, ha incidido.
El PP, por su parte, ha lamentado la confrontación que ha generado esta decisión y el presidente del Consell ha señalado que la celebración del 12 de septiembre “debería ser motivo de gozo y hermandad, y no de discusión”.
Expertos y asociaciones opinan del cambio
Varios estudiosos y entidades dedicadas al fomento de la cultura e identidad balear también se han posicionado sobre lo sucedido. Gabriel Bibiloni, profesor en la Universitat de les Illes Balears (UIB) y reconocido lingüista catalán, califica de “decisión problemática” la iniciativa de PP y Vox y asegura que el pueblo mallorquín nació en 1230 tras la llegada de Jaume I: “El día 12 de septiembre, creado en 1977 y después suprimido, se ha convertido en un elemento partidista que en lugar de cohesionar a la sociedad mallorquina crea división y confusión”, ha apuntado.
Por otro lado, la Obra Cultural Balear, entidad dedicada al fomento y la protección de la lengua y cultura catalanas, también se ha posicionado en contra del cambio de fecha, alegando que “la Diada del pueblo de Mallorca ha sido, es y será siempre, el 31 de diciembre”, remarcando que “quien pierde los orígenes, pierde la identidad”.