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El ultra Le Senne se enfrenta a otra querella y a un nuevo delito por romper el retrato de una fusilada por Franco

El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne, tras romper el retrato de Aurora Picornell y las 'Rojas del Molinar' el pasado 18 de junio

Esther Ballesteros

Mallorca —

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El presidente del Parlament balear, Gabriel Le Senne (Vox), se enfrenta a otra querella y a un nuevo delito por romper, en pleno debate de la derogación de la Ley balear de memoria democrática, el retrato de la republicana Aurora Picornell y las conocidas como 'rojas del Molinar', fusiladas por los franquistas la noche de reyes de 1937. Se trata de unos hechos por los que el diputado ultra, de cuya destitución salvó el PP en un pleno extraordinario celebrado a principios de septiembre, está citado a declarar como investigado el próximo viernes, por un presunto delito de odio, en el Juzgado de Instrucción número 1 de Palma.

A las denuncias interpuestas por Memòria de Mallorca, los familiares de Picornell y el PCE, se une ahora la querella presentada por el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE), que añade un ilícito más al comportamiento de Le Senne, el relativo al impedimento del ejercicio de los derechos cívicos, alegando que el político de extrema derecha “no sólo mostró su odio frente a tan valientes mujeres y en su consecuencia al ideario que representan”, sino que también “impidió el ejercicio civicista de diputadas que portaban las fotografías de las históricas políticas y en su conciencia cercenó criminalmente el ejercicio fundamental a la actividad política”.

En concreto, el PCPE, liderado por Julio Díaz y representado en este procedimiento por el abogado Pablo Alonso de Caso, recuerda que al debate sobre la supresión de la normativa democrática, celebrado el pasado 18 de junio, las diputadas socialistas Mercedes Garrido y Pilar Costa acudieron con una fotografía adherida a su ordenador de Aurora Picornell y Antònia y Maria Pascual, “mujeres de reconocido prestigio en la lucha política del ideario comunista y feminista, las cuales fueron represaliadas y víctimas de la represión franquista”.

En un momento del debate, detalla la querella, a la que ha tenido acceso elDiario.es, Le Senne ordenó a las parlamentarias que “hicieran desaparecer las fotografías que exhibían” y, “como quiera que las políticas se negaban -al no tener fundamento jurídico la orden-, Le Senne, con actitud violenta y agresiva, arrancó la fotografía y sin solución de continuidad a su actitud dictatorial expulsó de la cámara a las diputadas que se negaron a retirar las fotografías de las históricas políticas”. 

En su denuncia, de 80 páginas, el líder del PCPE asevera que el Reglamento de la Cámara balear, aprobado en el seno del pleno de esta institución el 19 de marzo de 2019, “no tiene positivada la prohibición de que los diputados porten fotografías de índole político adipadas a sus ordenadores, al igual que ocurre con el resto de reglamentos habidos en el resto del Estado español”. De ahí, incide, que “sean muchos los políticos, adscritos a las distintas cámaras de representación autonómica y estatal, que en ocasiones y en reivindicación de su ideario político porten camisetas, letreros, banderas, etc…”.

La querella realiza un repaso, asimismo, de los numerosos -y polémicos- mensajes y bulos vertidos por Le Senne en redes sociales, desvelados en los últimos meses por elDiario.es. Y es que el parlamentario de Vox, abogado de profesión, se caracteriza por sus controvertidas posiciones sobre el cambio climático, el racismo y la violencia machista, además de propagar en su canal de Telegram loas al presidente de Argentina, el ultraderechista Javier Mileifakes conspiracionistas en torno a la COVID; advertencias ante supuestas amenazas de control por parte del Estado y mensajes negacionistas sobre la crisis climática.

El PCPE se hace eco, asimismo, de la noticia publicada por este medio sobre el acto que auspició Le Senne a título público el pasado mes de enero para presentar el libro Contra el totalitarismo blando. Cancelación woke, feminismo radical, imposición trans, histeria climática, corrección política..., de Francisco José Contreras, exdiputado de Vox en el Congreso conocido por justificar la ejecución por parte del régimen franquista del artista y activista Salvador Puig Antich, uno de los últimos ajusticiados por medio de garrote vil en la dictadura, o por alabar la “audacia” del general Queipo de Llano, responsable del fusilamiento de más de 45.000 personas en Sevilla durante el levantamiento fascista de 1936. 

El pasado 3 de septiembre, el PP se abstuvo en la votación del cese de Le Senne, instado por los grupos de la oposición (PSIB-PSOE, Més per Mallorca, Més per Menorca y Podemos). Con ello, los conservadores, quienes el año pasado auparon al dirigente ultra a la presidencia del Parlament a cambio de que los populares pudieran gobernar Balears en solitario -eso sí, con el apoyo externo de Vox-, facilitaron su continuidad en el cargo.

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