La pequeña cala de Porroig, en Sant Josep (Eivissa), es una zona de especial valor ecológico gracias a los fondos marinos, formados por praderas de posidonia, una planta conocida como 'el pulmón del Mediterráneo' por sus beneficios para el planeta -es una de las principales fuentes de oxígeno y ayuda a mantener limpias las playas-. Sin embargo, la situación de Porroig es bastante delicada debido a la masificación de embarcaciones que fondean ilegalmente cuando llegan los meses de verano.
El pasado domingo, varias familias ibicencas y algún turista se enfrentaron a los trabajadores de las embarcaciones que fondean por la zona -los locales y los propietarios de las casetas de pescadores de Porroig denuncian que estos barcos se dedican a llevar ilegalmente a turistas y que dejan la bahía sucia-, como muestra el vídeo grabado por Toni Juan y distribuido por los biólogos y activistas de Maltesa del Mar. En la grabación, uno de los trabajadores le dice a los bañistas: “Señora, [échese] para allá, hombre. Ya está bien”. “No, no, parad vosotros”, comenta la mujer.
“Desgraciado”, afirma un bañista. “Estamos trabajando, ¿no os da vergüenza? ¿Qué hacemos?”, le responde el trabajador. “Pues que no te metas, coño, que no puedes entrar. Si conoces la ley del mar, te lo tienes que saber, joder”, le replica. “Dile a tu jefe que se compre [una embarcación] más pequeña para poder entrar aquí, que seguro que le sobra [el dinero]. No te jode”, añade una bañista. “Allí hay más barcos, tenéis más”, sostiene el trabajador.
Testigos presenciales afirman a elDiario.es que una de las personas que increpó a los trabajadores del chárter estaba haciendo snorkel y que una embarcación casi le pasó por encima a él y a su hijo. Estas mismas fuentes aseguran que en unas 3-4 horas vieron entre 40 y 50 embarcaciones en Porroig, una cala de tan solo 150 metros de longitud, donde muchas de las mismas acaban fondeando ilegalmente al lado de las casetas de pescadores.
Amenazas a los biólogos
La bahía de Porroig lleva años al límite por la proliferación de las embarcaciones ilegales durante la temporada estival. La Guardia Civil investiga el amplio historial de presuntas infracciones administrativas relacionadas con la actividad de uno de los empresarios de la zona, Evaristo Soler Cardona, como publicó elDiario.es. Entre las últimas prácticas investigadas, según confirman fuentes del Ministerio de Transición Ecológica y del Instituto Armado a elDiario.es, Soler Cardona habría promovido actividades de chárter y fondeo ilegal en Porroig.
Miembros de la plataforma Maltesa del Mar, que aboga por la conservación del fondo marino, se han sumergido en varias ocasiones para comprobar el estado del fondo marino de Porroig, y han denunciado amenazas por parte de este empresario. “No quiero volver a veros por aquí, tengo seguro, así que te paso por encima, te mato y no pasa nada”, les advirtió presuntamente Soler Cardona, según reza en la denuncia presentada por Maltesa del Mar.
“Eivissa es muy pequeña y ya nos encontraremos, ya sé quiénes sois, vosotros no sabéis quién soy yo, os vais a enterar, estáis jugando con mi trabajo del cual depende la universidad de mi hijo”, habría continuado advirtiendo, mostrando un comportamiento agresivo, siempre según reza en la denuncia. En dicho escrito se especifica que el denunciado habría manifestado ser “la persona que manda allí” y “conocido” tanto por la gente de la zona, como por las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.
Evaristo Soler Cardona está condenado por amenazas a una concejala de Medio Ambiente de Sant Josep (“Te espero con la escopeta reforzada que tengo”, “pasaré por tu casa, pero iré de noche”, “tengo muchos amigos mafiosos rusos y a los políticos corruptos se los manda a la mafia”, “Sant Josep tiene muchos bosques y la maleza es un combustible excelente”) y está denunciado por desobediencia a la autoridad.
El impacto de los muertos
La entidad ecologista Gen-Gob ha identificado 112 muertos (estructuras de fondeo ilegal de embarcaciones) en las aguas de la bahía de Porroig. El 78% de los muertos fondea sobre la importante extensión de praderas de posidonia oceánica de la zona, catalogada en el decreto sobre la conservación del Govern como área regular, en su parte externa, y como zona de alto valor a proteger, en su parte interna, por lo que las actividades de fondeo están prohibidas.
El impacto se produce no solo por la estructura del muerto, sino también por sus cadenas de borneo que dan vueltas alrededor del muerto arrasando la posidonia, como una segadora. “El fondo marino de Porroig es una de las zonas más impactadas de las Pitiüses, tanto por los muertos que se colocan ilegalmente, como por las embarcaciones que fondean con ancla y cadena”, explica a elDiario.es Xisco Sobrado, técnico del Área Marina del Gen-Gob.