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Tras la manifestación histórica de Canarias, la ciudadanía de Balears se está movilizando en diferentes colectivos para establecer demandas concretas y protestas de cara a la saturación que se prevé para esta temporada turística. La convocatoria que se prevé más masiva, organizada por el grupo 'Banc de Temps' de Sencelles, se espera para el próximo 25 de mayo a las 19.00 horas en la Plaça d'Espanya de Palma, para denunciar que “Mallorca no se vende”, si bien el día anterior se celebrará otra en Eivissa.
Existen diferentes formas de organización dependiendo de las islas, pero en lo que sí están de acuerdo todos los agentes implicados es que el modelo turístico de Balears hace tiempo que tocó techo y es urgente actuar antes de que sea demasiado tarde. La carestía de la vivienda está dejando atrás a la clase trabajadora de las Islas, que sufre los altísimos precios de los productos básicos y que está desembocando, además, en un colapso de los servicios públicos del archipiélago.
Asimismo, la falta de políticas valientes y el retroceso en las medidas en defensa del medio ambiente por parte de los gobiernos del Partido Popular en las diferentes instituciones, que están implementando iniciativas depredadoras del territorio y poco respetuosas con los recursos naturales -con la excepción de la reducción del techo de plazas turísticas en Mallorca-, han tenido como resultado la movilización de los ciudadanos, inédita en Balears. Estos se unen a las reivindicaciones que desde hace muchos años están poniendo sobre la mesa organizaciones ecologistas y sociales.
El calendario de reuniones, asambleas y manifestaciones empieza a tomar forma. En Mallorca, donde las movilizaciones ya tienen lugar desde el año 2017, está prevista una asamblea abierta convocada por la plataforma ‘Menys turisme, més vida’ (Menos turismo, más vida', en castellano) en el instituto de la localidad de Sineu el próximo viernes 17 de mayo, a las seis y media de la tarde, para pasar a la acción. El acto está abierto tanto a particulares como a colectivos y organizaciones, que quieran actuar conjuntamente, ante el hartazgo de la masificación turística y de las políticas que desarrolla el actual gobierno del Partido Popular tanto en el Govern como en la isla.
La convocatoria está en boca de todos y se extiende como la pólvora. “Desde hace un tiempo, mucha gente nos viene preguntando: ¿y nosotros cuándo?”, explica a elDiario.es Margalida Ramis, presidenta de la asociación ecologista GOB, una de las entidades que trabaja activamente por la conservación y el respeto al territorio mallorquín y a sus habitantes.
“El modelo turístico de Balears es perjudicial para las personas residentes en la isla ya que encarece la vivienda, que se ha convertido en algo inaccesible. Además, tiene una afección muy negativa en el territorio, ya que supone una pérdida de la biodiversidad, degradando los ecosistemas y el paisaje y reduciendo el suelo de uso agrícola”, aseguran desde el GOB. “El derroche de los recursos -relata- es insostenible, ya que nos obliga a disponer de unas infraestructuras que pagamos los residentes y que son sobredimensionadas por el turismo, lo que supone el empobrecimiento de la población y del archipiélago a costa del enriquecimiento de algunos”.
El modelo turístico de Balears es perjudicial para las personas residentes en la isla ya que encarece la vivienda, que se ha convertido en algo inaccesible. Además, tiene una afección muy negativa en el territorio
La presidenta del GOB asegura que la contaminación que produce el tráfico aéreo desmesurado -que favorece la ampliación de las instalaciones aeroportuarias-, los megacruceros y la ingente cantidad de vehículos de alquiler, entre otros, hace que este tipo de turismo sea insostenible medioambientalmente.
Estos y otros asuntos se tratarán en la asamblea abierta de Sineu, en la que se prevé una gran afluencia de entidades y particulares que dicen “basta” a la deriva del archipiélago en cuanto al consumo de territorio y la falta de medidas efectivas para el acceso a la vivienda y la contención de los precios, que no paran de subir, alimentados por un modelo turístico de lujo, consumismo y despilfarro.
Las reivindicaciones por parte de entidades medioambientales y sociales comenzaron en 2017 en Mallorca, cuando se convocaba una manifestación bajo el lema 'Basta masificación turística. Hasta aquí hemos llegado'. El pasado mes de octubre, una treintena de organizaciones ecologistas y ciudadanas, entre las que se encontraba el GOB, Atak Mallorca, asociaciones de vecinos y el movimiento feminista, realizaban una contracumbre bajo el lema 'Menos turismo, más vida', con motivo de la Cumbre de los ministros de Turismo de la Unión Europea que tuvo lugar en la isla. En las tres jornadas en las que se desarrolló, las entidades agrupadas en la Contracumbre reclamaron límites para el turismo en el archipiélago balear.
Además, el próximo 26 de junio se celebra en Mallorca el I Congreso de Turismo de la Sociedad Civil, que se ha presentado esta semana en rueda de prensa y que tiene como objetivo “replantear el modelo turístico, antes de que sea demasiado tarde”. “De este congreso queremos que salga un documento con propuestas para que se pueda hacer llegar a las instituciones con el fin de que ejecuten”, asegura la nota de prensa remitida por el GOB.
“El Congreso contará con dos grandes fases. La primera, que ya ha arrancado, con la publicación del documento ‘¿Cuál es el turismo que queremos?’, con decenas de propuestas sugeridas por un grupo de personas expertas del Foro de la Sociedad Civil. Para completar este documento, queremos que la gente de Mallorca nos haga llegar sus propuestas, sugerencias y enmiendas”, añade la nota.
Estas propuestas se irán incorporando a un documento final que se debatirá en el encuentro del 26 de junio, según han explicado desde el Fòrum, quienes añaden que las propuestas se pueden hacer llegar, entre otras vías, a través de un formulario web. “Algunas de las propuestas que por ahora se recogen son la reducción de la oferta de plazas turísticas, la aplicación de un nuevo modelo de estrellas por hoteles con criterios de sostenibilidad o la creación de un índice de saturación turística para definir la capacidad de carga de la isla”, explican.
Eivissa, la isla más maltratada, despierta
Diferente es la movilización en Eivissa, que a pesar de ser la isla más maltratada en cuanto a consumo de territorio y abuso de precios, tanto en la vivienda como en los productos básicos, no ha contado, hasta ahora, con una base social suficientemente reivindicativa que apoyara las peticiones de las entidades ecologistas y sociales que defienden sus intereses. En la isla pitiusa ya hay convocada una manifestación ante la sede del Consell el viernes 24 de mayo, a las ocho de la tarde, para exigir al gobierno del PP medidas concretas bajo el lema “Eivissa no puede más”.
La entidad PROU (BASTA, en castellano) reivindicará en esta manifestación “la creación y limitación urgente de la entrada de vehículos en la isla con una ley similar a la de Formentera”, según explican en nota de prensa y aparece en sus redes sociales. De hecho, el Consell Insular ha aprobado este viernes elevar al Parlament la iniciativa para regular la entrada de vehículos.
Asimismo, solicitarán “el mantenimiento de la moratoria de nuevas plazas turísticas, la necesidad de incentivos fiscales para reducir estas plazas y reforzar la ley contra alquileres turísticos ilegales para favorecer el decrecimiento”, explican desde PROU. La concentración ante la sede de la máxima institución insular será “el inicio de un movimiento que tendrá continuidad en otras movilizaciones”, tal y como, recuerdan, se hizo en las protestas de 1977 en las que la sociedad civil se unía para pedir la protección del parque natural de Ses Salines.
Sin embargo, la idiosincrasia de la movilización en Eivissa es diferente y hasta el momento se mueve en varios frentes con el mismo objetivo: el decrecimiento. Aunque los demás agentes movilizados, tanto ciudadanos como entidades, han expresado su intención de apoyar a PROU y asistir a la manifestación del 24 de mayo. “Es necesario que todas nos unamos en la acción”, explica a elDiario.es Karen Killeen, activista de Extincion Rebelion, “porque todas tenemos los mismos objetivos, que es salvar a la isla de Eivissa de un desastre inminente”.
Es necesario que todas nos unamos en la acción porque todas tenemos los mismos objetivos, que es salvar a la isla de Eivissa de un desastre inminente
En estos momentos se están produciendo diferentes reuniones por parte de las organizaciones que ya trabajaban en este sentido y que están convocando asambleas ciudadanas. Por un lado, esta misma semana se ha reunido la Xarxa de Moviments Socials que, sin ser una entidad constituida, es un punto de encuentro entre diferentes organizaciones “para compartir objetivos”. A ella asistían Amics de la Terra, el sindicato de Inquilinas de Eivissa y Formentera, Extinción Rebelion, asociaciones feministas, pensionistas, Som Energia y La Utopica, entre otras entidades.
“Creemos que es un comienzo y hay que aprovechar la movilización para hacer más”, cuenta Killeen, después de que desde PROU se haya invitado a partidos políticos y entidades a no formar parte de la organización de esta manifestación, a la que sí van a asistir. “La movilización irá poco a poco abriéndose a colectivos en activo”, reflexiona. Una de las propuestas concretas en la Xarxa surgió del Sindicato de Inquilinas de Ibiza y Formentera. Su portavoz, Daniel Granda, cuenta a elDiario.es que desde la entidad de arrendatarios se propone “una huelga general y una manifestación en el mes de agosto”. “Lo que esperamos es que poco a poco toda la gente se vaya uniendo”, añade. Los integrantes del sindicato también asistirán a la concentración convocada por PROU, como también lo harán todas las entidades integradas en la Xarxa.
Otro de los frentes que se está cociendo en Eivissa es la plataforma ‘Eivissa es planta’, que está formada por ciudadanos particulares. Su organización también ha instado a partidos políticos y otras organizaciones a no formar parte de ella. Todo está siendo improvisado. “Todo viene de un grupo de Instagram donde compartí en mis redes sociales la movilización en Canarias. Entonces se empezó a comentar mucho y parecía que la gente tenía claro que había que movilizarse. Hicimos un grupo en WhatsApp y se empezó a meter mucha gente, incluida gente de asociaciones que ya estaba movilizada”, relata Carlos Ramis. “Lo que queremos es formar un grupo con gente que aún no estaba movilizada y creo que lo bueno es organizarnos. La gente de colectivos lo entendió y se ha ido poniendo a un lado”, asegura.
Todo viene de un grupo de Instagram donde compartí en mis redes sociales sobre la movilización en Canarias. Entonces se empezó a comentar mucho y parecía que la gente tenía claro que había que movilizarse. Hicimos un grupo en Whatsapp y se empezó a meter mucha gente, incluida gente de asociaciones que ya estaba movilizada
Esta misma semana, dado el éxito de la iniciativa, se ha convocado una asamblea. El grupo de Whatsapp está repleto de propuestas, según hemos podido comprobar desde esta redacción, pero aún no se ha concretado nada. “Todo se hablará en la asamblea. Se verá lo que quiere la gente, qué podemos aportar a las otras organizaciones y cómo podemos ayudar”, concreta Ramis. “Ya hemos hablado con la Xarxa para que nos tengan en cuenta en su siguiente reunión en la que aportemos todas las propuestas que surjan de nuestra asamblea. Veremos cómo funciona la asamblea y si la gente, realmente, está implicada”, sentencia.
Diferencias entre el caso de Canarias y Balears
Y es que las movilizaciones que tuvieron lugar en Canarias hace unas semanas parece que han tocado el orgullo de la población balear, aunque la realidad en los dos territorios, a pesar de ser igualmente sangrante, es muy diferente.
“La diferencia fundamental es el régimen fiscal. Ellos tienen, por ser una región ultraperiférica, un régimen fiscal que invita a la inversión extranjera con exenciones y bonificaciones para inversores. Tienen mucho que ver con Balears, sobre todo por el tema de los precios de la vivienda, prohibitivos para las personas residentes. Sin embargo, en Canarias existe un problema añadido que son las bolsas de pobreza y precarización salarial que sufren en aquel archipiélago”, expone Margalida Ramis.
Canarias tiene mucho que ver con Balears, sobre todo por el tema de los precios de la vivienda, prohibitivos para las personas residentes. Sin embargo, en Canarias existe un problema añadido que son las bolsas de pobreza y precarización salarial que sufren en aquel archipiélago
En lo que supera Balears a Canarias es en el número de turistas en un territorio mucho más reducido. Lo cuenta Macià Blázquez-Salom, profesor de la Universitat de les Illes Balears (UIB) y catedrático de Geografía, a elDiario.es: “Canarias tuvo 16,2 millones de turistas el año pasado, nosotros, 17,8. El caso de Balears se sale de la escala a nivel mundial”. Blázquez-Salom asegura que el turismo de calidad “no es que haya menos gente y que pague más, porque hay alguien que queda desplazado para vivir aquí”. Además, “hay que pensar en que habrá turistas que no puedan venir por los precios”, puntualiza
“Creo que se tiene que dignificar las condiciones laborales de los trabajadores para un turismo de calidad, hay que hacer una planificación territorial detallada, con necesidad de segregar usos. Si en una zona residencial metes viviendas turísticas y no tienes los servicios necesarios para la población, te lo estás cargando todo. Hay que acabar con la desigualdad social que supone este modelo. Además, hay que tener en cuenta que hay que dejar de consumir como lo hacemos ahora, el llamado desconsumismo, sobre todo en el ocio”, especifica.
El turismo de calidad no es que haya menos gente y que pague más, porque hay alguien que queda desplazado para vivir aquí. Además, hay que pensar en que habrá turistas que no puedan venir por los precios
Impulso del crecimiento turístico y destrucción del territorio
Para el GOB el decrecimiento turístico es inevitable. “Necesitamos una sociedad civil que sea más fuerte, ahora es muy vulnerable porque depende de un solo sector económico que juega con sus márgenes de beneficio y no a nivel de bienestar social, aunque le llamen circular o sostenible cada vez se están dando más dinámicas de exclusión”, asegura Ramis. “La crisis ecológica y climática que vivimos que no podrá seguir manteniendo los ritmos actuales de vida y menos una economía centrada en el turismo. Necesitamos pensar en la energía y como medida inmediata debemos poner límites claros”, añade.
Para ella, “es fundamental no ampliar aeropuertos, reducir los jets privados, los megacruceros y los coches de alquiler”. Y expone: “Hay que hacer políticas activas de decrecimiento turístico. El Govern está impulsando políticas neoliberales de mercado para que hagan lo que quieran desde el punto de vista del territorio y turístico. No quieren trabas para nuevas inversiones turísticas inmobiliarias y de construcción. El escenario pinta mal. Ya han anunciado no límites en los cruceros. Dicen que lo que se trata es de gestionar bien el éxito y la solución no va por ahí”.
El Govern está impulsando políticas neoliberales de mercado para que hagan lo que quieran desde el punto de vista del territorio y turístico. No quieren trabas para nuevas inversiones turísticas inmobiliarias y de construcción. El escenario pinta mal
“La presidenta Marga Prohens nos dice que tiene claro que el turismo en el archipiélago necesita límites, pero estamos esperando las políticas. El Govern plantea esta limitación según la capacidad de carga, pero no especifica si es una capacidad de carga turística o ecológica y social, que ya está super desbordada. Las medidas de apertura a nuevas líneas aéreas o las obras de ampliación de la capacidad operativa son incompatibles con el decrecimiento”, argumenta Ramis.
En el mismo sentido se manifiesta el catedrático Blázquez-Salom. “Las moratorias son fundamentales, hay que limitar los precios al alquiler, limitar la entrada de personas a las Islas por cuestiones de límites biofísicos, aquí no puedes extender la toalla en la playa. El peligro es que se creditiza todo y solo está al alcance del que lo puede pagar. Esto es un problema grave que hay que atender con políticas públicas. Tiene que haber un crecimiento justo”, demanda.
“Hay que tener en cuenta que el Govern se basa en estudios que pagan ellos mismos para neutralizar los estudios científicos que, además, no puedes publicar personalmente. Los datos son necesarios, pero si eso lo combinas con políticas para crear un buen ambiente de negocio, quitando el límite de plazas, dando rienda suelta al crecimiento, con amnistías urbanísticas en suelo rústico, estás haciendo lo contrario a lo que dices”, explica. “Hicimos un contraste entre las medidas propuesta por la Organización Mundial del Turismo que pedían desestacionalización, pero esto solo contribuye al crecimiento, para que la cosa siga igual”, sentencia.
Estudio de saturación turística
Por su parte, el Govern ha puesto en marcha un plan piloto, ‘IB Digital’, para medir el grado de saturación turística en el archipiélago durante este verano. Según palabras de la presidenta del Ejecutivo balear, Marga Prohens, “ayudará a que la convivencia de los residentes no se vea afectada como sucede ahora en determinados lugares y momentos puntuales”. A partir de estos datos, se estudiarán acciones como “redireccionar los flujos turísticos y solucionar los problemas en determinadas zonas”, tal y como ha publicado Diario de Mallorca.
Por su parte, fuentes de la Conselleria de Vicepresidencia, que se ha hecho cargo de este plan, explican a elDiario.es que “será impulsado en próximas fechas”, aunque no han sabido precisar cuándo. “La idea es basar las decisiones en datos y no en opiniones o sensaciones”, aducen. Esta redacción ha puesto sobre la mesa la saturación en las playas y en las poblaciones que han copado portadas de informativos en todo el mundo como prueba de que esto sucede sin que desde Vicepresidencia hayan querido comentar nada e insistan en la recogida de datos objetivos.
Las medidas que hasta el momento ha puesto en marcha el actual equipo del PP en el Ejecutivo autonómico distan mucho de las propuestas de la ciudadanía y las entidades de carácter ecologista y social. El GOB advierte de que Balears afronta “nuevas amenazas” porque “el Govern del PP ha decidido impulsar aún más el crecimiento turístico y la destrucción del territorio”. Además, la entidad ecologista critica el anuncio del Ejecutivo de que levantará la moratoria turística y modificará las leyes de sostenibilidad y circularidad del turismo de Balears, así como la de Menorca Reserva de Biosfera, “para suprimir todo aquello que consideran un obstáculo para el desarrollo turístico”.