El secretario autonómico de Sectores Productivos y Memoria Democrática del Govern, Jesús Jurado, y el senador de designación autonómica por Balears Vicenç Vidal, de MÉS per Mallorca, han presentado este viernes las enmiendas territoriales de Balears a la nueva Ley de Memoria Democrática, en la que piden que Sa Feixina, en Palma, sea declarado monumento contrario a la memoria democrática.
En una nota de prensa, la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática ha indicado que las enmiendas presentadas fueron registradas este lunes por Vidal en el Senado, donde la Ley comienza su tramitación.
La Conselleria ha explicado que el Fortí es un complejo de edificios que entre 1936 y 1941 fue utilizado como prisión de republicanos y lugar de represión y exterminio, donde fueron asesinadas decenas de personas por defender la República y la democracia. Además, el Govern quiere instalar allí un espacio de interpretación de la memoria democrática.
También ha pedido al Gobierno incluir en dicho Catálogo el edificio que fue la casa de Emili Darder, el último alcalde republicano de Palma, y su cesión al Ayuntamiento, al entender que este espacio necesita ser gestionado por el Consistorio para actividades acordes con la finalidad propia de la Ley de Memoria Democrática.
Así mismo, la Secretaría Autonómica de Memoria Democrática del Govern ha solicitado la declaración de los monumentos de S'Esplanada (Maó) y de Sa Feixina (Palma) como elementos contrarios a la memoria democrática.
El primero de ellos, situado en la Plaza de S'Esplanada de Maó, en terrenos de titularidad estatal del Ministerio de Defensa, porque fue un monumento construido por el franquismo para enaltecer el régimen dictatorial y utilizando, además, mano de obra forzosa republicana. El segundo, ubicado en el Parque de Sa Feixina de Palma, por ser un monumento construido por el franquismo para glorificar la tripulación del crucero 'Balears', responsable del bombardeo de la población civil en la carretera de Málaga a Almería, en 1937.
Jurado ha subrayado que las políticas de Memoria Democrática en Balears van “en la buena dirección, pero todavía hay ámbitos en los que se tiene que seguir trabajando, entre ellos algunos elementos de titularidad estatal”. “Este es el motivo de estas enmiendas a la Ley: explicitar las principales demandas en el texto de la Ley, para poder asegurar los avances que tienen que darse”, ha afirmado.
Por su parte, el senador Vidal ha asegurado que la valoración del grueso de la sociedad civil centrada en la lucha por la memoria es “muy positiva” y ha destacado que, además de la casa de Darder, el Fortí d'Illetes, Sa Feixina y Sa Explanada de Maó, han presentado 18 enmiendas más, que hacen un total de 22, “fruto de la preocupación que expertos y tejido asociativo memorialista tienen respecto a las competencias autonómicas de la materia y la atención a las víctimas”.
Además, Vidal ha recordado que se ha sumado a las demandas de otros grupos referentes a la consideración de Juan Carlos I como heredero de Franco o a la devolución de locales y centros sociales confiscados por el franquismo.