El portavoz del Govern, Iago Negueruela, ha avanzado este lunes que el Consell de Govern ha aprobado instar a la Abogacía de la CAIB a interponer una denuncia ante la Fiscalía por las amenazas sufridas por la profesora del colegio La Salle.
En rueda de prensa, Negueruela ha matizado que estas amenazas pueden ser “constitutivas de delito”. Además, ha subrayado que el Govern condena los insultos y las amenazas de muerte que ha recibido la docente y su familia este fin de semana.
Aparte de enumerar los diferentes insultos y amenazas recibidas por la docente, el portavoz del Govern ha insistido en que el “ensañamiento es muy grave”. “Se ha difundido su imagen y hasta su dirección por las redes sociales, incluso de una hija menor de edad. Es intolerable”, ha aseverado.
Negueruela incluso ha destacado que se ha señalado a la docente en un canal “conocido de la ultraderecha” en Telegram, donde se puso su foto y su nombre. “Ha sido tan grave hasta el punto que se ha visto obligada a cerrar sus perfiles en redes sociales. Es intolerable en una sociedad democrática. Esto no puede pasar por alto”, ha recalcado.
Por ello, tanto la Conselleria de Presidencia, Función Pública e Igualdad como la de Educación y Formación Profesional han solicitado este lunes al Consell de Govern este acuerdo, con el fin de denunciar ante Fiscalía estas supuestas amenazas.
El conseller ha remarcado que “independientemente de las actuaciones que lleve a cabo” la Inspección Educativa, a instancias de la Conselleria de Educación, para esclarecer los hechos, es “evidente que el acoso, los ataques y las amenazas” recibidas por la docente.
Es por ello que desde el Govern se insta a la Abogacía de la Comunidad Autónoma a presentar una denuncia ante la Fiscalía. “Los docentes de Balears deben ser respetados y protegidos por este Govern para que puedan desempeñar su labor docente de forma libre”, ha defendido.
Cabe recordar que el colegio La Salle, en Palma, anunció este domingo que abría una investigación interna con el objetivo de aclarar el enfrentamiento entre una clase de primero de Bachillerato y la docente por la presencia de una bandera de España en el aula, en apoyo a la selección española masculina absoluta de fútbol en su participación en el Mundial.
Según defendió la dirección técnica del centro, la docente “estaba cumpliendo con las normas de convivencia del centro y seguía las órdenes del equipo directivo” cuando solicitó a los alumnos que retiraran la bandera de España, indicaciones que fueron “desoídas” por los alumnos, considerándose esto “un acto de insubordinación deliberada”. Por este motivo, la dirección canceló las dos sesiones lectivas que restaban para finalizar la jornada.