“Lo están poniendo complicado. El acceso a todos los documentos relativos a los juicios celebrados en torno a Marivent nos ha sido denegado”. Quien así se pronuncia es el portavoz de Podem Palma, Jesús Jurado, en relación al proceso judicial incoado en los años ochenta contra el Govern balear y la Fundación Museo de Arte Saridakis a raíz del incumplimiento de la razón por la que el pintor de origen griego Ioannes Saridakis había donado el palacio de Marivent a la Diputación Provincial de Balears: la edificación y sus terrenos fueron cedidos a condición de que se convirtieran en un museo que llevase el nombre del pintor y permaneciera abierto al público.
El también secretario autonómico de Sectores Productivos y Memoria Democrática del Govern balear considera, en declaraciones a elDiario.es, que esa documentación es “importante” de cara a conocer exactamente qué fue lo que ocurrió, más allá del expediente de provincialización que recoge los términos en que se produjo la donación y cuyo contenido ha sido publicado en exclusiva por elDiario.es. Nada se sabe tampoco del inventario de los cientos de obras de arte que el palacio alberga en su interior.
“A veces no se andan con tantos remilgos con otros procedimientos, lo cual nos hace sospechar de que a lo mejor hay algún tema detrás que sería interesante conocer”, incide Jurado, quien subraya que la documentación que ha salido a la luz -la escritura de donación, los estatutos del patronato de la fundación o las actas de sus reuniones- demuestra que la familia Saridakis “tenía una idea muy clara en la cabeza desde el principio, que es que esa propiedad fuera disfrutada por el pueblo, por la ciudadanía”.
Pese a ello, recrimina que “mordisco a mordisco se le ha ido usurpando a la ciudadanía el disfrute de un lugar como Marivent. Primero, de una manera un poco subrepticia, se acordó que el Jefe del Estado podía ir cuando pasara por la provincia. Luego ya pasamos a los Príncipes de España, a quienes se les permitía alojarse cuando estuvieran en la provincia. Al final el museo acabó cerrado”.
Y es que las condiciones estipuladas por Saridakis se cumplieron hasta que, en 1973, la Diputación cedió la finca a los entonces príncipes de España, Juan Carlos y Sofía, para que pudieran veranear en ella. La decisión provocó que los descendientes del filántropo llevaran a la Diputación a los tribunales por el incumplimiento de las condiciones de cesión y así poder recuperar los bienes muebles del interior de la finca pertenecientes a su familia. La finca, sin embargo, continuó siendo utilizada por los Reyes para su estancia estival.
La familia del donante ganó en primera instancia y los diferentes recursos hasta llegar al Tribunal Supremo. Los herederos recuperaron los centenares de obras de arte. Pero el Palacio, no. A Marivent renunciaron durante el proceso judicial, y por escrito, según consta en la documentación consultada por este medio. El Govern renunció a la colección y le asignó un valor de 40 millones de pesetas, unos 240.000 euros.
MÉS critica que el edificio haya sido “usurpado” por la Corona
El coordinador general de MÉS per Mallorca, Lluís Apesteguia, subraya, por su parte, que las reivindicaciones en relación con el palacio por parte de un sector de la sociedad “siempre han sido las mismas: Marivent debería dedicarse a lo que se preveía cuando Saridakis cedió su propiedad, que es al arte y a estar a disposición del conjunto de la ciudadanía. No tendría que ser privativo de los monarcas”.
Precisamente, desde la formación ecosoberanista han presentado diversas iniciativas parlamentarias dirigidas a recuperar el edificio, entre otras reivindicaciones como aumentar la fiscalización de las cuentas de la Casa Real o despenalizar los delitos de injurias y calumnias contra la monarquía. “Es un tema no solo de justicia para con el donante, sino también de falta de carácter y talante democrático en las instituciones, de fomento de la educación que se ha mantenido por parte de la Corona, que, como decimos, está usurpando un edificio, un bien que es y debería estar a disposición de todos los ciudadanos”, sentencia Apesteguia.
El pasado mes de septiembre, varios diputados de Podemos acudieron a los tribunales para solicitar formalmente las dos sentencias sobre el palacio y sus bienes dictadas en el año 1986 por el Juzgado de Primera Instancia número 1 de Palma y por la antigua Audiencia Territorial, con el fin de esclarecer si la posesión de Marivent sigue siendo de Juan Carlos I o pasó a manos de Felipe VI, tomando como punto de partida la cesión del inmueble llevada a cabo en 1973 por parte de la antigua Diputación Provincial de Balears a Juan Carlos y Sofía.
Un mes antes, la tradicional presencia de los reyes en Mallorca generó, como es habitual cada verano tras su llegada a la isla, numerosas reacciones de rechazo por parte de un sector que recrimina que la Familia Real continúe haciendo uso de Marivent, construido entre 1923 y 1925 por el arquitecto Guillem Forteza Pinya por encargo de Saridakis, quien vivió allí hasta su muerte. Entre tales acciones de protesta, se celebró la 238 edición de la tradicional 'Cantada per la Llibertat' con proclamas de “fuera 'okupas' de Marivent” para que el inmueble sea devuelto a la sociedad balear.