Los 27 acuerdan una fuerza de 5.000 soldados: “Todos estamos convencidos de que Europa está en peligro”
“Gastar más y gastar mejor en defensa”. Así resume Josep Borrell una de las principales ambiciones de la brújula estratégica europea que han acordado este lunes los 27 en Bruselas, y que tiene que terminar de ser adoptada por los líderes de la UE en la cumbre del 24-25 de marzo. Entre los puntos clave de las 47 páginas que marcan la nueva estrategia de defensa europea, destaca la creación de una fuerza de intervención rápida de 5.000 soldados.
La idea emergió con fuerza tras el fiasco de la caída de Kabul en tiempo récord, y la incapacidad de la UE de evacuar a su propio personal de forma autónoma. Y, nueve meses después, ha sido asumida por los 27.
“Es un punto de inflexión en Europa”, ha dicho el Alto Representante para la Cooperación y Seguridad tras la reunión con los ministros de Exteriores de la UE: “Europa se convierte en proveedor de seguridad para la política de seguridad y defensa europea. Es un mensaje potente en un momento importante. No es una respuesta a la guerra en Ucrania, pero es oportuno el momento”.
“Hace tiempo dije que Europa estaba en peligro”, ha dicho Borrell, “pero hoy todos estamos convencidos de que estamos en peligro, es obvio, por la invasión de Ucrania. No es retórico, esa invasión y la guerra es un cambio tectónico en Europa. Nuestra reacción es que en la UE podemos actuar firmemente y unidos.
“Hoy, el gasto militar en Europa, de todos los Estados miembros sumados, es de alrededor de 200.000 millones de euros, el 1,5% del PIB. Estaba bajando rápidamente hasta 2014 y desde entonces empezó a subir. Pero tenemos que invertir más. Si queremos impulsar la innovación en defensa y ser más capaces de hacer frente a situaciones como la de Ucrania, necesitamos capacidades. Y un 1,5% del PIB no es suficiente”, afirma el jefe de la diplomacia europea: “Las amenazas están aumentado y el coste de la inacción está claro. La brújula estratégica es una guía para la acción. Plantea un ambicioso camino a seguir para nuestra política de seguridad y defensa durante la próxima década. Nos ayudará a enfrentarnos a nuestras responsabilidades en materia de seguridad, ante nuestros ciudadanos y el resto del mundo. ¿Si no es ahora, entonces cuándo?”.
Borrell ha afirmado: “No queremos un Ejército europeo. No se trata de crear un Ejército europeo. Cada Estado miembro seguirá teniendo su Ejército. Pero tenemos que trabajar juntos de forma más estrecha, tenemos que coordinarnos mejor y ser capaces de reaccionar. No somos una Unión militar, no somos una alianza militar. Pero queremos jugar un papel a la hora de proporcionar a los ciudadanos europeos más seguridad en un mundo problemático y peligroso”.
88