Sabrina se prepara para la asamblea de esta tarde en el corazón de Buenos Aires. Noelia sigue de cerca las últimas informaciones que aparecen en las redes sobre Escocia y todas sus movilizaciones. Isabel, desde Washington, espera que la próxima protesta sea “tan increíble” como la Women's March de 2017. Silvana coge fuerzas para marchar en Santiago de Chile un año más. Todas llevan semanas ultimando la próxima gran protesta feminista. Desde cada rincón del mundo, activistas y mujeres anónimas quieren dejar una cosa clara el Día Internacional de la Mujer: “Sin nosotras se para el mundo”.
Se espera que este año las marchas de todo el planeta avancen por el centro de las ciudades todavía con más fuerza, espoleadas por el movimiento #MeToo que lleva meses destapando casos de ataques contra las mujeres. “Es la primera vez que veo en toda mi vida que un movimiento feminista se expande así, casi a la velocidad de la luz. Cada país se está enfrentando a su manera a todo esto”, decía Virginie Despentes la semana pasada durante un encuentro en Madrid.
En Honduras, en Marruecos y también en Kurdistán, mujeres de decenas de países irán a la huelga el próximo día 8 de marzo para gritar por sus derechos, por la igualdad salarial, por tener acceso al aborto o para denunciar el último ataque machista que se ha producido en San Francisco, en Londres o en Madrid.
En España, la Comisión 8 de Marzo convoca a todas las mujeres a que hagan huelga laboral, de consumo, de cuidados y de educación. En muchos países, como por ejemplo en Argentina, los términos de este paro todavía se están debatiendo en asambleas multitudinarias. Sabrina Cartabia, del movimiento Ni Una Menos, explica a eldiario.es que de las asambleas que se lleven a cabo este viernes en Argentina saldrán las propuestas para la jornada de protesta.
“El entramado de la huelga se está construyendo todavía. Cada viernes, mujeres del mundo de la política, de sindicatos o de círculos económicos están debatiendo qué pasará el próximo 8 de marzo”, dice Cartabia. “La idea es que se produzca un paro económico formal e informal, es decir, que hagan huelga todas las mujeres y no solo las que trabajan con un contrato. Queremos movilizar un paro con esa transversalidad”.
En Buenos Aires se preparan también para una gran represión policial. “El Gobierno está respondiendo a las protestas de la gente con una represión injustificada”, lamenta la activista. Pero no solo se movilizará la capital, también habrá marchas en el resto del país y actos menos multitudinarios como “ruidazos” o reuniones de muchas mujeres identificadas con un mismo color, “seguramente el violeta”.
En Honduras, el feminismo lucha por hacerse oír tras los duros enfrentamientos vividos a finales de 2017 entre manifestantes contrarios a los resultados electorales y las fuerzas del ejército. “Varias organizaciones, feministas independientes, artistas y estudiantes... estamos planificando una semana de acciones en Tegucigalpa en torno al 8M. En el resto del país también se están produciendo diferentes asambleas”, comenta Erika García activista de Somos Muchas.
“En Tegucigalpa vamos a llevar a cabo diversas acciones desde el 3 hasta el 8 de marzo. Las acciones protesta van dirigidas a visibilizar las diferentes formas de violencia que ejerce el Estado, los medios de comunicación, la iglesia y el sistema educativo en este contexto de represión y militarización que estamos viviendo”. Este año la protesta será diferente en la capital hondureña, en la que se realizarán “performances en las calles más transitadas, cine-foros, un taller de escritura, activismo digital, conciertos y una gran manifestación”.
Este año en Chile quieren poner el foco en las mujeres que viven en el medio rural, las mujeres migrantes, las indígenas y las lesbianas. “La marcha del 8 de marzo se realizará en la ciudad de Santiago a las siete de la tarde. También se van a realizar distintas reuniones y marchas en todo el país”, comenta Silvana del Valle, portavoz de la Red Chilena Contra la Violencia hacia las Mujeres.
En Chile preocupa y mucho el 8 de marzo porque, ese mismo día, el Gobierno del país ha decidido firmar el acuerdo TPP 11. “Este acuerdo internacional es una bofetada a las mujeres porque reafirma todas las medidas neoliberales que precarizan el empleo femenino”, protesta del Valle. “Precariza la situación, no solamente de las mujeres que trabajan con una remuneración, sino también de todos los trabajos que las mujeres realizamos, perpetuando el mercado de modelo capitalista. Sobre todo, desfavoreciendo a las mujeres que viven en el medio rural y a las mujeres migrantes, indígenas y lesbianas”.
“En nuestro país se hace un llamamiento a la huelga tanto del trabajo remunerado como del no remunerado: se invita a no realizar trabajos de limpieza, cuidados, estudiantiles y por supuesto, en la medida de lo posible, a no ir a los puestos de trabajo remunerados”, concluye la chilena.
Desde La Paz, México, las mujeres comparten este vídeo con su llamamiento.
Estos días, desde Edimburgo, Noelia Martínez recopila información sobre las movilizaciones que tendrán lugar en Escocia. En Facebook hay decenas de eventos organizados para los primeros compases de marzo. Uno de los más interesantes se llama Wikithon for Women y consistirá en una quedada el mismo día 8 de marzo para “mejorar los artículos de Wikipedia sobre mujeres notables que han contribuido a la política escocesa y al pensamiento humanista”.
Las mujeres de Kurdistán también llaman al Paro Internacional a través de un comunicado. “Queridas hermanas y compañeras. Las abrazamos con todo nuestro amor, con nuestra convicción en la fuerza de la hermandad y nuestra creencia inquebrantable en la libertad. Enviamos nuestros saludos revolucionarios desde las montañas del Kurdistán, en el corazón de la resistencia kurda”.
“Apoyaremos y nos uniremos a la campaña a pesar de la difícil situación de guerra y ocupación que estamos viviendo en todas partes de nuestra nación dividida, hoy especialmente en Afrin, y la haremos parte de nuestras movilizaciones del próximo 8 de marzo”, manifiestan.
En Francia también se hace un llamamiento a una huelga laboral, de consumo, educativa y de cuidados. Las dos manifestaciones más importantes tendrán lugar en París. La primera y más institucional recorrerá las calles de la capital como cada año; la segunda, menos multitudinaria, será más transversal y buscará generar debate en torno a los temas más polémicos que siguen generando debate en el país, como el velo o las trabajadoras sexuales.
Las activistas francesas que forman Grève Internationale des Femmes han publicado en Facebook un mapa colaborativo en el que las mujeres de todo el mundo pueden compartir dónde se llevarán a cabo sus acciones.
Juana Flores, desde San Francisco, prepara también sus pancartas y sus consignas. Confirma que habrá movilizaciones tanto en San Francisco como en Oakland, pero que todavía se están definiendo. “En San Francisco, además, vamos a organizar una una rueda de prensa para denunciar el caso de una señora que sufrió un ataque machista, pero cuando llegó la policía la arrestó porque no había asesores lingüísticos”, explica la activista de Mujeres Unidas y Activas.
En Washington, la abogada de derechos humanos Isabel Martins Barbosa lo tiene claro: la fuerza del movimiento #Metoo hará que tiemble de nuevo la capital. “A Day Without Women pretende mostrar cómo sería la vida sin la contribución de las mujeres al trabajo (remunerado o no) y sin su participación en el consumo general. Parte de la inspiración fue el movimiento A Day Without Immigrants”, recuerda.
“Washington fue protagonista en la Women's March en 2017, con miles y miles de personas marchando por nuestros derechos. Es cierto que, en aquella ocasión, el movimiento ganó fuerza por la toma de posesión del presidente Trump. Pero Washington tiene un papel central en cualquier movimiento con pretensiones políticas, como es el 8M”, concluye Martins.
A dos semanas del próximo 8 de marzo, comienza la cuenta atrás para otro estallido feminista.