“Grexit supondría la muerte política de todo el sistema monetario europeo”
Yiannis Burnus, miembro del Secretariado Político de Syriza, afirma en la entrevista que el Gobierno de Alexis Tsipras ha conseguido el primero objetivo: desmontar “el chantaje” por el que si el Gobierno se oponía a los planes de la troika, Grecia sufriría un colapso y se vería forzada a abandonar la eurozona.
¿Qué ambiente se respira dentro de Syriza un mes y medio después de las elecciones?
Syriza es un partido democrático y pluralista, creado sobre la base de la unidad conseguida a través de la diversidad. En este periodo crucial, nuestro partido tiene el deber histórico de mantener su unidad interna a todos los niveles para poder enfrentarnos al poder neoliberal de la forma más eficaz. Esto no supone suprimir la diversidad, sino su inclusión en una reflexión conjunta con un objetivo común. Las críticas dentro de los órganos de decisión de un partido de izquierdas con varias tendencias son aceptadas, mientras no pongan en peligro la solidaridad interna o distorsionen nuestras decisiones oficiales.
¿Quedaron sorprendidos por el nivel de las presiones de Bruselas y Berlín? ¿Cree que se ha producido un ataque a la soberanía griega?
La formación del nuevo Gobierno griego y su posición firme en la primera ronda de negociaciones con la UE, el BCE y el FMI abrieron un nuevo periodo de conflictos que nunca antes habían existido, porque el anterior Gobierno no sólo aceptaba todo lo que le llegaba de la troika, sino que en muchos casos lo superaba en intensidad con las medidas de austeridad que aplicaba. El objetivo de la élite europea neoliberal era y es encerrar al Gobierno griego en una estructura que no supone una alternativa real a la hegemonía neoliberal. Intentan poner al Gobierno y a Syriza a la defensiva para que sólo podamos limitar los daños sin tener la posibilidad de aplicar nuestra propia alternativa.
Todos los acuerdos con la UE fueron definidos por nuestros rivales para que el Gobierno (actual) se hundiera o quedara ridiculizado. Pero la posición del Gobierno arruinó sus planes y desmontó el chantaje que circulaba en medios griegos y extranjeros, según el cual si el Gobierno se oponía (a esos planes), nuestro país sufriría un colapso y se vería forzado a abandonar la eurozona.
¿Cuáles serán los próximos pasos del Gobierno? ¿Qué ocurrirá en los próximos cuatro meses y después?
La clave es si el Gobierno griego podrá mantener abierta la ruptura en la lucha contra la dominación total del neoliberalismo. Si conseguimos en adelante algunas victorias, grandes o pequeñas, los acontecimientos políticos en Europa podrían acelerarse, ya que podrían hundir el dogma de TINA (iniciales en inglés de 'No hay otra alternativa'). Si tomamos también en cuenta las elecciones españolas de noviembre, podemos comprender la razón por la que las fuerzas neoliberales de Europa han incrementado la ofensiva contra nosotros.
El Gobierno griego debe trabajar duro para evitar la posibilidad de nuevas medidas de austeridad y al mismo tiempo mejorar las finanzas públicas haciendo que los ricos paguen. En paralelo, se nos juzgará por nuestras iniciativas de democratización del sistema político, la guerra contra la corrupción y la lucha contra la crisis humanitaria.
¿Cómo se ocupará Syriza de la 'cuestión de los oligarcas'? ¿Cómo harán para conseguir el dinero que deben al Estado?
Hay una primera señal positiva al respecto. Los dos fiscales que investigan la lista de los evasores fiscales griegos que enviaron dinero de forma ilegal a bancos suizos y otros han bloqueado 404 millones de euros encontrados en cuentas de 17 personas o empresas. Además, el Gobierno está preparando una gran reforma del sistema fiscal para hacer que los ricos paguen lo que deben en función de criterios democráticos y proporcionales. Las clases bajas y medias han pagado demasiados impuestos. La única manera de restablecer la confianza de los ciudadanos en el Estado es demostrar signos concretos de cambio frente al modelo clientelista de fraude fiscal en las clases burguesas que ha caracterizado a los gobiernos derechistas y socialdemócratas de los últimos 40 años.
Una de las cosas que entristece a algunos de mis amigos griegos es que el asunto de la crisis humanitaria está en los últimos puestos de la lista de medidas del Gobierno enviadas a Bruselas. ¿Qué se ha hecho para reducir el impacto de la crisis en los sectores más vulnerables de la sociedad?
El Gobierno ya ha presentado el primer proyecto de ley, que incluye luz gratis (300 kilovatios al mes) para los hogares que viven en condiciones de extrema pobreza, ayudas al alquiler (70 euros por persona o 220 por familia al mes) para 30.000 hogares, y ayudas a la alimentación para aquellos que viven en pobreza extrema. Habrá después otras medidas humanitarias, incluido el acceso universal a la sanidad.
¿Qué ocurrirá si la UE y las instituciones financieras dejan de enviar dinero? Después de lo que escribió Lapavitsas, ¿es Grexit (la salida de la eurozona) una opción?lo que escribió Lapavitsas
A pesar de lo que desean algunos círculos ultraconservadores, Grexit nunca ha sido una opción, ni para Grecia ni para los acreedores. A pesar de la campaña de intimidación y del hecho de que algunos derechistas de la CDU y CSU o de AfD (euroescépticos) en Alemania desean expulsar a Grecia de la eurozona, mi opinión es que nunca ha habido un plan concreto para Grexit. Un escenario de asfixia financiera, que podría conducir a una suspensión de pagos griega dentro de la eurozona, produciría fuertes pérdidas a los grandes bancos extranjeros que compraron deuda griega. Los bancos alemanes por ejemplo nunca se arriesgarían a perder 80.000 millones de euros. Además, toda la unión bancaria europea asumiría graves consecuencias tras el Grexit. Pero el factor más importante es político. Grexit supondría la muerte política de todo el sistema monetario europeo.
Desde un punto de vista de clase, Grexit causaría graves pérdidas también a los trabajadores, a causa de las sucesivas devaluaciones de la nueva moneda nacional, que a su vez provocarían fuertes reducciones de salarios, pensiones y poder adquisitivo. Syriza recibió el mandato de la mayoría de los griegos para luchar por una salida social y democrática de la crisis, no por una salida de la eurozona.
¿Cómo describiría el ambiente político que se vive ahora en Grecia?
En los sondeos posteriores a las elecciones, más del 70% de la gente aprueba los primeros pasos dados por el Gobierno. A la depresión por el largo periodo de austeridad le sucede ahora la esperanza en una mejora gradual de la vida cotidiana de la gente. Muchas personas se sienten aún inseguras por la propaganda y la intimidación de los medios de comunicación privados, pero la mayoría entiende que es la última carta que juega el campo neoliberal frente a una nueva alternativa.
Lo que está generando optimismo en nuestra sociedad es la puesta en marcha de las primeras medidas contra la crisis humanitaria, los cambios legales para los hogares y empresas pequeñas con deudas que no pueden pagar, junto a los resultados visibles en la lucha contra el fraude fiscal y la reducción drástica de los gastos de la burocracia gubernamental.