Alrededor de una veintena de personas han muerto en las disputas violentas entre disidencias de las FARC (Las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia) y guerrilleros del Ejército de Liberación Nacional (ELN) en tres municipios del departamento colombiano de Arauca. La ola de violencia ha tenido lugar este fin de semana en las localidades de Tame, Fortul, Saravena y Arauquita, fronterizo con Venezuela, según ha informado este lunes La Defensoría del Pueblo.
Aunque la cifra de muertos no está confirmada, el gobernador de Arauca, Alejandro Navas Ramos, habla de 22 fallecidos. “Al parecer se rompió un pacto que tenían entre ellos de no agresión entre sí, pero del otro lado de la frontera, todo indica que el ELN atacó a un campamento de las Farc y ahí hubo muertos; algunos cuerpos los pasaron a este lado de la frontera”, ha señalado. El gobernador indica que el motivo de la disputa es el “control de las economías ilícitas”.
Por su parte, Juan Carlos Villate, personero –funcionario público que trata temas sobre derechos humanos en las comunidades– de Tame, ha dicho a la emisora local W Radio que las muertes ocurrieron en los dos primeros días del año, que hay 24 asesinados y que “seguramente la cifra podría subir a 50 durante este lunes”. “Tenemos 24 muertos, algunos son conocidos como mandos medios de las Farc, del ELN, otros son simpatizantes, milicianos o población civil que ha sido señalada de ser militante o líder político de alguna organización que fueron declarados como objetivo militar”, aseveró.
El alcalde de Arauquita, Etelivar Torres, informó el domingo de que en una comunicación que tuvo con el gobernador de Arauca se hablaba de “17 personas asesinadas”.
Villate ha dicho que la situación obedece a un conflicto entre el ELN y el frente décimo de las disidencias de las FARC, “quienes se han declarado la guerra abiertamente”.
“Todo empieza por operativos del ELN en los centros poblados reteniendo personas, algunas asesinándolas y los cuerpos han ido apareciendo poco a poco”, ha dicho el personero.
Sobre la situación en Arauca, la Defensoría del Pueblo ha dicho que, según información recopilada por su oficina regional, en las “últimas horas se han presentado homicidios, amenazas, retenciones ilegales, desplazamientos masivos y riesgo de desplazamiento forzado en municipios de frontera, específicamente en Tame, Fortul, Saravena y Arauquita”.
La Oficina en Colombia del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha instado a través de Twitter a respetar el Derecho Internacional Humanitario y a proteger a la población civil y activar los planes de contingencia.
La oficina de la ONU también ha pedido cumplir con las recomendaciones de la Defensoría del Pueblo en las que advertía del riesgo inminente que corrían más de 69.000 personas de la sociedad civil, entre las que se incluyen poblaciones de especial protección como los indígenas, por la reciente escalada de violencia.