El Partido Comunista de Grecia (KKE) no ha mutado con el paso del tiempo. El edificio, de estética constructivista soviética, está presidido por una estatua de Lenin y la hoz y el martillo. El eurodiputado del KKE Kostas Papadakis, partido que no está adscrito al GUE –“sólo quieren embellecer la UE”–, tiene muy claro que estarán en la calle contra el Gobierno de Alexis Tsipras, favorito para ganar las elecciones este domingo, “desde el primer día”. ¿Por qué? “Porque no es un partido revolucionario, está a favor de la UE, la OTAN y el gran capital”.
¿Grecia está virando a la izquierda con la previsible victoria de Syriza?
Primero hay que clarificar que el Partido Comunista de Grecia (KKE) debería ser más fuerte tras estas elecciones porque creemos que habrá hechos concretos que seguirán contra la gente. El cambio de Gobierno no cambiará aspectos cruciales, como que el país seguirá en la UE, que el pacto de estabilidad y el memorándum no desaparecerán, seguirá esta agenda de la UE. Todas estas medidas reaccionarias continuarán.
El segundo factor es que la deuda del país seguirá aquí. Nosotros luchamos por salir de la UE y la completa anulación de la deuda. Queremos salir de la UE, pero con la condición de que se socialicen los medios de producción. Ahora la gente ha de desafiar todo el poder de la oligarquía. El día siguiente de las elecciones, la oligarquía seguirá aquí.
Por eso, pedimos a la gente que tenga esto en la cabeza, porque tras las elecciones el pueblo seguirá del otro lado. En los años que Syriza, con un 27%, ha estado en la oposición, ha habido una bajada del conflicto social. Nosotros decimos que eso vale para España, donde en el año de la irrupción de Podemos han caído las movilizaciones. La gente piensa que sólo con un voto cambian las condiciones de vida, pero decimos que es importante creer que no hay salvadores ni mesías, la gente ha de salvarse por sus luchas, su decisiones y por enfrentarse a la UE, la OTAN y los monopolios.
¿Está comparando a Syriza con el Pasok o Nueva Democracia?
Syriza ha dejado muy claro que no va a desafiar a la UE ni la OTAN. ¿Qué clase de izquierda es esta? El término izquierda tiene criterios concretos: contra la UE, la OTAN, luchar por salir de ellos, por enfrentarse a los empresarios y la oligarquía. Los empresarios ya han dicho que dan la bienvenida al 'radicalismo de Syriza'. La misma contradicción vale para la UE, donde se habla de políticas más extensivas o restrictivas, pero esto no cambia la vida de la gente. Hemos oído sobre el programa de Draghi: tiene una condición, que exista el programa, el memorándum. Y Syriza dice que seguiremos el programa europeo, con reglas y medidas. Nueva Democracia dice que hay que continuar con la deuda, Syriza, con un recorte. Pero nuestro pueblo ha vivido los mayores recortes, acompañados con las más duras medidas para pagar la deuda. Y habrá más medidas para pagar la deuda, pero esto se esconde. Rena Dourou, presidente de Syriza de la región de Attica, ya ha hecho lo contrario de lo que dijo.
Pero Syriza sí dice que cambiarán las cosas.
Dicen que eliminarán los memorandos, pero tienen exigencias concretas. ¿Qué ley contra los trabajadores cambiarás? ¿Cuál contra las pensiones? Todas esas medidas que ha aprobado Nueva Democracia seguirán. ¿Qué propone Syriza? Dicen que presentan el programa de Salónica, que estaba pensado para los primeros 100 días y para luchar contra la emergencia social. Pero ahora resulta que es para cuatro años. Pero lo que hace el programa es comida de caridad y luz para los más pobres, además de 750 euros mínimos mensuales para aquellos que tengan convenios colectivos. Los que tienen trabajos parciales o por horas no se benefician de esto. Esta es la realidad. El pueblo ya ha perdido gran parte de sus pensiones, y la respuesta de Syriza es subir 1,20 euros al día a las más bajas. Esto no cambia la vida, y se lo decimos a la gente. Nueva Democracia cultiva el miedo y Syriza, las ilusiones. Pero si queremos algún alivio, debemos luchar, y esto es una línea roja, (recuperar) lo perdido desde 2008.
Entonces, no apoyarán la investidura de Tsipras.
Por todo esto, por responsabilidad ante el pueblo, después de haber examinado bien lo que dice Syriza, no podemos tomar parte de un Gobierno burgués capitalista, en el que continuará esta barbaridad. Hace una semana Syriza nos interpeló para dar el voto de investidura, pero no lo hizo sinceramente, porque saben nuestras posiciones de todos estos años y estaremos frente a este Gobierno, porque estará en manos de la oligarquía mientras siga en la UE. No nos podemos manchar las manos, no podemos dar un salto al vacío mientras la gente esté del otro lado. Además, ha ido a sus filas lo más podrido del Pasok, con diputados que han votado memorandos y que han boicoteado el movimiento obrero y sindical.
¿Saldrán a la calle desde el primer día?
Tenemos gran capacidad de movilización y gran presencia entre los sindicatos. Estas ideas de Syriza intentan conseguir una coartada para el día siguiente. Los griegos tienen en gran estima al KKE, es un partido serio, militante, tranquilo, y lo que Syriza quiere es tener una coartada con nosotros para calmar a la gente, para que no haya lucha. Conocemos Syriza y desde el primer momento estaremos en la calle, y nos lo reprochan. Pero decimos: si realmente hubiera un Gobierno de izquierdas, esperaríamos, si fuera un buen Gobierno para la gente, el KKE no acompañaría en la lucha. Tienen miedo de que tener el KKE enfrente pueda desenmascarar que van a ser corresponsables de lo que está pasando.
¿Cómo están tan seguros?
Tenemos experiencia en el movimiento de partidos comunistas europeos en Italia, en Francia, que votaban por la mañana a favor de privatizaciones, pensiones, salarios, y por la tarde organizaban movilizaciones contra los acuerdos de la mañana. Nosotros hemos llegado a conclusiones de estas experiencias negativas y queremos un Gobierno contra la UE, la oligarquía, y no daremos un salto a la nada. No participaremos en discusiones sobre qué va a perder el pueblo por decisiones del Gobierno, el pueblo nos necesita al día siguiente de las elecciones. Se han comprometido con empresarios en Texas, en el Club Bilderberg, en la City de Londres... Ya se han comprometido con el gran capital.
Esa idea de Syriza no está muy extendida.
Fuera de Grecia, no. Pero aquí sabemos que ellos no son un partido revolucionario, todo lo contrario. La gente que vota a Syriza lo hace con el corazón frío, sin confiar en ellos. La gente está desesperada y no quiere seguir con Nueva Democracia, pero esa idea, de que no puede haber un Gobierno peor, ya se usó con anteriores gobiernos. Está claro que pasará lo que decimos. No hay miedo de la UE a Syriza, no es la preferencia de la oligarquía, pero es la nueva socialdemocracia, útil para el sistema, que no contraataca a favor de los derechos de la clase trabajadora. Hay que organizar la lucha para enfrentarse a ellos.
¿Ustedes sí se consideran un partido revolucionario?
Hay hechos concretos que lo demuestran: luchamos contra la UE y la OTAN, queremos romper las cadenas del capitalismo, socializar los bienes de producción, centralizar toda la riqueza para distribuirla, así como la fuerza del trabajo para que no haya problemas de desempleo. Nuestro país tiene riquezas y gran localización estratégica al norte del Mediterráneo. Hay tecnología, ciencia, progreso en todos los medios de producción, y la gente debería disfrutar de este progreso, pero existe esta contradicción. No ha habido otro periodo de la historia con la gente incluso muriendo de frío mientras hay plantas eléctricas por todas partes.
¿No les genera dudas el colapso de la URSS?
Lo hemos estudiado mucho. Y hemos llegado a la conclusión de que hubo grandes beneficios con la socialización de los bienes de producción. La clave está en que los problemas que fueron surgiendo, intentaron resolverse con respuestas capitalistas, no socialistas. Con las reformas en los 60 con la entrada del mercado, entró el antagonismo y creó problemas concretos que con los años crecieron y generaron consecuencias negativas en la dirección del partido.
El principal asunto es que en un país socialista no se pueden resolver los problemas con recetas capitalistas, sino socialistas. Hemos aprendido de estas experiencias, y es importante tener tu propio programa, y el Partido Comunista Griego tiene organizada la lucha, no sólo por los problemas diarios, pero también con la perspectiva. El pueblo debe saber qué camino es el que propones, y no se fía de los partidos que no son claros. Nosotros somos muy claros. Y Syriza, Nueva Democracia y el Pasok siguen el camino del capitalismo. Nosotros somos los únicos que tenemos una propuesta política completamente diferente, un camino radical.
A nosotros se nos reconoce haber predicho lo que iba a pasar. En 2010 dijimos que venía la tormenta. Y teníamos razón. La gente reconoce que el partido lee muy bien la realidad, es un partido militante que dice la verdad a pesar de las consecuencias. A pesar de los caminos sencillos que algunos ofrecen, la gente en Grecia está viviendo una crisis muy grave con graves consecuencias y ahora son conscientes de que la vida no se cambia fácilmente sólo con un voto. No decimos que Syriza es lo mismo que Nueva Democracia, son diferentes partidos, pero cuando tienes una estrategia concreta que tiene la misma prioridad, servir a los beneficios del capital y la UE, objetivamente te lleva al mismo sitio: capitalismo, producción capitalista, UE.
¿Tanto tienen en común Syriza y Nueva Democracia?
Son diferentes versiones del capitalismo, pero no son diferencias cruciales en la esencia de qué tipo de políticas se promoverán. En los 80, el Pasok hablaba de salir de la CEE y de la OTAN, hablaban de socializar medios de producción... Pero, ahora, Syriza ni siquiera llega a decir eso.
En España hay un partido con el que compartimos estrategia, el Partido Comunista de los Pueblos de España (PCPE), y es un partido que lucha para mantener la luz del único camino que puede ofrecer a la gente una salida. Porque el resto, tanto Podemos y el PCE, que ha mutado tras seguir el eurocomunismo y se ha vuelto pro Unión Europea, los partidos del GUE, quieren embellecer la UE, que pueda haber una UE mejor. Y esto es peligroso para la gente, porque tienen apoyos, cautivan ilusiones con la idea de que de una manera o de otra se puede negociar con Merkel o el FMI para conseguir que el enemigo adopte posiciones a favor del pueblo. Esto sí que es una utopía.
Somos claros, esta carretera es difícil, pero hay que luchar por salir de la UE. Cultivar la ilusión de que el halcón pueda convertirse en paloma es una ilusión. Por eso, decimos que Podemos en nuestra opinión está haciendo lo mismo que Syriza, empezando con unos eslóganes y, con el tiempo, serán lo mismo. Iglesias ya ha dicho recientemente que han escuchado a los aliados financieros y que hay posiciones no realistas... Estamos hablando de la nueva versión de la socialdemocracia adaptada a los términos de la crisis. Esto es lo que necesita el capital. Porque la gente no confía ya en el Pasok o el PSOE, a pesar de sus nuevos líderes, y aparecen nuevas cartas en el juego y la gente debería ser estricta al examinar las posiciones y vivir su propia lucha.
¿Cree que puede haber grietas en la coalición de Syriza?
Siempre en la historia de la socialdemocracia ha habido una corriente izquierdista que decía luchar por hacer virar el partido. Pero nunca se ha confirmado que pueda convertirse en revolucionario. Tienen un blog, protestan de vez en cuando, pero enseguida dejan de hacerlo.