El boicot de casi la totalidad de parlamentarios del gobernante Partido del Poder Popular (PPP) en Corea del Sur ha impedido que prospere la moción para destituir al presidente surcoreano, Yoon Suk-yeol, que se ha votado este sábado en la Asamblea Nacional de este país. La iniciativa presentada por la oposición para inhabilitar a Yoon por haber declarado la ley marcial el pasado martes ha sido votada por solo 195 parlamentarios de los 300 que conforman la cámara, un número insuficiente para que el resultado de la votación sea considerado válido.
La iniciativa comenzó a votarse pasadas las 18.00 hora local de hoy (9.00 GMT) después de que abandonaran la cámara todos los diputados del PPP salvo dos, de modo que si incluso estos hubieran votado favor, la moción estaba condenada al fracaso.
Para que la moción de destitución prosperase era preciso el respaldo de dos tercios de la cámara, lo que significaba que el bloque opositor (que cuenta con clara mayoría parlamentaria con 192 escaños) necesitaba obtener al menos ocho votos adicionales de entre los 108 con los que cuenta el gobernante Partido del Poder Popular.
El voto de esta moción en la Asamblea se produce después de otra propuesta para establecer una investigación sobre la primera dama, Kim Keon-hee, por supuesta corrupción, que no salió adelante con un resultado de 198 votos a favor y 102 en contra, lo que ya apuntaba al fracaso de la iniciativa para destituir a Yoon.
Ese resultado reflejaba que únicamente seis miembros del PPP habían roto la disciplina de voto fijada por la formación conservadora, que acordó este mismo sábado rechazar la moción contra Yoon, tras haber dado varios bandazos en días previos al respecto. Ya este sábado, Yoon ha pedido disculpas “por causar preocupación e inconveniencias a la ciudadanía”, en una alocución en la que también dijo que dejaba en manos de su partido “la estabilización de la situación política, incluido su mandato”.
Una polémica ley marcial como detonante
La principal formación opositora, el Partido Democrático (PD), y las otras cinco fuerzas políticas presentaron una moción para destituir a Yoon el pasado miércoles, después de que el presidente decretara por sorpresa la ley marcial en la noche del martes acusando a la oposición de “actividades anti-estatales” y de ser “fuerzas pronorcorenas”.
El estado de excepción fue levantado después de que los partidos de la oposición y algunos del propio PPP votaran en la Asamblea Nacional la revocación de esa medida apenas unas horas después de ser decretada, y pese a los intentos de la policía y de tropas surcoreanas por bloquear los accesos al parlamento y tomar el control de la cámara.
Protesta multitudinaria a las puertas de la Asamblea
Mientras tenía lugar este sábado la votación de la moción, unas 149.000 personas -según datos de la policía- se concentraron frente a la Asamblea para reclamar que Yoon dimita de su cargo o sea destituido.
La protesta, en la que participan plataformas civiles y políticas, además de la Confederación Coreana de Sindicatos (KCTU), el mayor grupo sindical del país, comenzó a las 15.00 hora local (6.00 GMT) frente a la sede del órgano legislativo, y en medio de un gran despliegue de seguridad.
Algunos de los grupos participantes, entre ellos la confederación sindical, se concentraron en otros puntos de la capital antes de la protesta general y se desplazaron hasta la Asamblea en lo que llamaron una 'Marcha de Vigilia Nacional'que podría prolongarse durante la tarde y la noche en función de los resultados de la votación de hoy.
En la protesta participan ciudadanos venidos de otros puntos del país en viajes organizados por asociaciones civiles o grupos sindicales, mientras que en el distrito de Yeouido, donde se ubica la Asamblea, hay centenares de policías desplegados para evitar incidentes.
Un hombre de unos 50 años fue detenido al inicio de la concentración después de tratar de inmolarse en las inmediaciones de la Asamblea Nacional, y tuvo que ser hospitalizado sin que haya trascendido su estado, según informó la agencia local Yonhap.
Debido a las importantes aglomeraciones, la operadora del metro ha informado que los convoyes no se detendrán en las próximas horas en las dos estaciones más cercanas al Parlamento.