Borrell: “El Ejército ruso será el mismo Ejército ruso la próxima semana tanto si les compramos gas como si no”
El devenir de la guerra a corto plazo no depende tanto de las sanciones como de las armas. Es lo que ha defendido el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, este lunes en Luxemburgo al término del Consejo de ministros de Exteriores de la UE: “Hay algo de sentido común, y es que la guerra que se está desarrollando y las batallas que se van a dar en los próximos días y en las próximas semanas se van a dar con o sin sanciones. Las sanciones tienen efectos a medio plazo. El Ejército ruso será el mismo Ejército ruso la próxima semana y la otra semana, tanto si les compramos gas como si no. En los próximos días, el Ejército ruso también tendrá los medios para hacer la guerra. Así que hay que concentrarse en los aspectos defensivos. Eso es lo que más importa ahora. No voy a decir que no deberías hacer lo otro. Pero no se hagan ilusiones si cortan el gas ruso la próxima semana, no por eso el Ejército ruso tendrá menos medios para luchar. Los aspectos defensivos, la ayuda a Ucrania, es lo que importa en este momento”.
Hay una línea de puntos: del carbón al petróleo; y del petróleo, al gas. La Comisión Europea y los 27 acordaron a finales de la semana pasada el embargo al carbón ruso. Un embargo que no terminará de completarse hasta el 10 de agosto, cuando concluyan los cuatro meses de cadencia para dar tiempo a que venzan todos los contratos suscritos con Rusia.
El primer embargo energético, al carbón, el combustible que menos compra la Unión Europea, llegó después de la matanza de Bucha, que visitaron este viernes la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y el Alto Representante para la Política Exterior, Josep Borrell. El propio Borrell anunció que este lunes en Luxemburgo los ministros de Exteriores de la UE debatirían sobre el embargo al petróleo, algo que personas de su equipo no tenían tan claro el viernes pasado.
Pero lo cierto es que a la llegada a la reunión, todos los ministros han sido preguntados por el asunto, y el propio Borrell ha reconocido: “Las sanciones siempre están sobre la mesa. Hablar sobre Ucrania significa debatir sobre la efectividad de nuestras sanciones, de las que ya se han decidido y de cuáles son los pasos a seguir”.
Alemania es uno de los países más dependientes de los combustibles fósiles rusos y, por tanto, junto con Hungría, de los más refractarios a correr en el desenganche del petróleo y el gas de Rusia. Así, la ministra de Exteriores alemana, Annalena Baerbock, ha dicho este lunes por la mañana: “Lo hemos debatido dentro de la Unión Europea la semana pasada y hemos decidido que nos retiraríamos de todas las importaciones de energía fósil de Rusia, juntos como Unión Europea. Como gobierno federal alemán, ya hemos dejado claro que habrá una eliminación completa de la energía fósil, comenzando con el carbón, luego con el petróleo y el gas. Y para que esto pueda aplicarse de forma colectiva en la Unión Europea necesitamos un plan acordado conjuntamente para poder eliminar completamente las energías fósiles como Unión Europea”.
La portavoz de la Comisión Europea Dana Spinant ha dicho desde Bruselas: “Nuestro trabajo continúa, no tenemos anuncios que hacer. Es un proceso que lleva tiempo, pero nuestro trabajo es precisamente asegurarnos de que tenga éxito. Pero no hay anuncios que pueda hacer ahora mismo sobre el petróleo”.
El ministro de Exteriores y Defensa irlandés, Simon Coveney, ha explicado al llegar a la reunión en Luxemburgo: “Debemos adoptar un enfoque maximalista de las sanciones para trasladar mayor disuasión ante esta guerra y brutalidad. Y eso debería incluir, en nuestra opinión, el petróleo. Sabemos que es muy difícil para algunos estados miembros y tenemos que mantener una posición unida en toda la UE. Pero ahora tenemos el carbón como parte de un paquete de sanciones y sabemos que la Comisión está trabajando en un nuevo paquete que esperamos poder ver pronto y que también incluirá el petróleo”.
Coveney ha añadido: “La Unión Europea está gastando cientos de millones de euros en importar petróleo de Rusia. Eso está contribuyendo a financiar esta guerra. Y, desde nuestro punto de vista, debemos cortar esa financiación de la guerra, aunque crea enormes desafíos y problemas que la UE debe resolver colectivamente. Tendremos que esperar y ver qué dice la Comisión, están trabajando para garantizar que el petróleo sea parte del próximo paquete de sanciones. Cuanto antes pueda suceder, mejor”.
“Vamos a analizar esa situación, sin duda”, ha dicho el ministro de Exteriores español, José Manuel Albares, al ser preguntado sobre el embargo al petróleo ruso: “Y hay dos cosas que tenemos que tener en cuenta. Por un lado, evitar la financiación de la guerra de Vladímir Putin con dinero y fondos europeos. Y, al mismo tiempo, hay que pensar en los ciudadanos europeos y en la necesidad de no desestabilizar a ciertos países cuya estructura energética ha estado tradicionalmente muy unida a Rusia. Estoy seguro de que esos dos parámetros van a estar ahí, y España será solidaria con las decisiones que se tomen en el marco de la Unión Europea”.
El ministro de Exteriores danés, Jeppe Kofod, ha explicado, por su parte, que la UE va a “seguir aumentando la presión sobre Rusia para que detenga la guerra”. Kofod ha reconocido: “Ya estamos discutiendo el sexto paquete sanciones y, por parte danesa, estamos dispuestos a llegar tan lejos como podamos encontrar un consenso sobre las sanciones, incluida también la energía. Estoy muy satisfecho con el quinto paquete que tenemos ahora: puertos marítimos, transporte, combustibles para aviones... Esta es una reunión muy importante en la que podemos ver cómo podemos aumentar los costes para Rusia por lo que están haciendo, y también ver cómo podemos apoyar a Ucrania aún más”.
En este sentido, el ministro lituano de Exteriores, Gabrielius Landsbergis, ha sido tajante: “Lo único que me alegra es que la Comisión Europea ha sido muy clara en que se está comenzando a trabajar en el sexto paquete de sanciones con opciones de afectar al petróleo. Eso significa que ya ha comenzado el trabajo de lograr el consenso entre los 27, y espero que esta vez ocurra”.
“Rusia está siendo afectada por las sanciones”, ha dicho el ministro neerlandés, Wopke Hoekstra: “Y, por lo tanto, debemos asegurarnos, como Unión Europea y como comunidad internacional, de que continuaremos elevando el listón. Para nosotros, todas las opciones siguen sobre la mesa. Estamos dispuestos a analizar otros aspectos, incluida la energía, siempre que nos aseguremos de mantener la unidad dentro de la Unión Europea”.
Según el titular de Exteriores checo, Jan Lipavský, “la pregunta es qué debe suceder en la UE para tener un embargo sobre el petróleo y el gas y otros productos básicos. La República Checa está a favor de las posibles sanciones más duras que podamos aplicar a Rusia”.
“Ahora hemos aprobado un paquete de sanciones en el que hemos dado un paso adelante por el carbón”, ha dicho la ministra de Exteriores sueca, Ann Linde: “Y hoy pediré que también incluyamos otros combustibles fósiles, como el petróleo y el gas. Creo que puede salir adelante en lo que respecta al petróleo. Nos estamos moviendo y cada vez más personas se dan cuenta de lo importante que es esto. No creo que lleguemos a un acuerdo completo, pero los que estamos presionando con esto intentamos hacer todo lo que podemos”.
Hambruna
“Rusia está causando el hambre en el mundo”, afirma el jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, quien acusa a Rusia de bombardear los silos de trigo y de bloquear las exportaciones cereales de Ucrania: “Las consecuencias son por la guerra, no por las sanciones”.
“Otra batalla”, ha dicho Borrell, “es la batalla de narrativas. Una batalla sobre cómo la gente percibe esta guerra y que va a marcar las próximas décadas la orientación geopolítica del mundo. El paisaje geopolítico se va a ver profundamente cambiado por esta guerra, así que tenemos que seguir haciendo ese esfuerzo de alianza exterior, porque la diplomacia rusa está repartiendo acusaciones sobre las sanciones. Si vino la diplomacia de vacunas, viene ahora la diplomacia alimentaria, porque los rusos hacen descansar sobre nosotros la responsabilidad por la crisis alimentaria diciendo que es por las sanciones”.
Borrell ha insistido: “No, no es por las sanciones, es por la agresión militar, es por los bombardeos rusos, es por la flota rusa que está bloqueando la salida de los puertos ucranianos de barcos cargados de cereales que no pueden abandonar los puertos, están bombardeando almacenes de trigo conscientemente para que no se pueda exportar con barcos que ya no pueden salir de los puertos ucranianos. Y eso es lo que está generando escasez de alimentos, además de que están bombardeando ciudades ucranianas y provocando el hambre en el mundo. Son ellos, los rusos, los que provocan el hambre en el mundo bloqueando las exportaciones de trigo y destruyendo los silos en Ucrania. Así que dejen ya de acusar a Europa por las sanciones. Es el Ejército ruso el que está causando escasez de alimentos. Y en África también tenemos otro problema por la exposición de aquellos países a la crisis de alimentos que se nos viene encima”.
Ataque por el Este
El jefe de la diplomacia europea, Josep Borrell, también ha hablado de la campaña militar. “Me temo que las tropas rusas se están agrupando en el este para lanzar un ataque en el Donbás, los ucranianos están muy al tanto de eso”, ha dicho el Alto Representante: “Me temo que en los próximos días la guerra se incrementará en el Donbás. Normalmente, las guerras se ganan o se pierden en el campo de batalla. Hemos sido testigos de lo que pasa allí, de la brutal, brutal agresión de las tropas rusas contra la población civil. Pueden ir a Kiev, hay que ir a Kiev todo lo que se pueda y presenciar lo que ocurre”.
“Es una guerra”, ha dicho Borrell, “y tiene una dimensión militar predominante. Los rusos han llevado la guerra a Ucrania de manera absolutamente innecesaria, sin que mediera ninguna provocación. Es la guerra de un hombre, quien ha declarado esta guerra es Putin. Y ha fracasado, ha fracasado en la toma de Kiev. Querían una guerra relámpago y han fracasado rotundamente. Yo he visto esos tanques rusos destrozados. No han tenido que replegarse. Fueron incapaces de tomar Kiev y ahora están concentrando sus fuerzas en el Donbás. Rusia va a hacer la guerra como hace la guerra el ejército ruso, como una apisonadora, va a causar más víctimas civiles. Ucrania se prepara a enfrentarse a esta nueva etapa de esta guerra. Y nosotros está claro que les vamos a ayudar. ¿Cómo? Bueno, pues militarmente, porque no intervenimos en la guerra y la única forma de ayudarles es dándoles el equipamiento suficiente para que puedan luchar”.
38