¿Quién es Daniel Noboa, el heredero de una fortuna bananera que presidirá Ecuador? Noboa se convertirá en el presidente más joven de la historia de Ecuador, con 35 años, tras imponerse por un margen de unos cinco puntos a su rival, la abogada de izquierdas Luisa González. Hijo millennial de Álvaro Noboa, el hombre más rico de Ecuador y cinco veces candidato presidencial, Daniel Noboa, fue la sorpresa de la segunda vuelta en agosto. Este graduado de la Harvard Kennedy School centró su campaña en la creación de empleo y la economía, recomendando exenciones fiscales e incentivos para las nuevas empresas y prometiendo atraer más inversión extranjera.
“Hoy hemos hecho historia”, dijo Noboa en un mensaje en X, antes conocido como Twitter. “Las familias ecuatorianas eligieron el nuevo Ecuador, eligieron un país con seguridad y empleo”. Estas elecciones se celebraron en un contexto de repunte de la delincuencia violenta alimentada por el narcotráfico, que ha convertido al país en uno de los más violentos de la región, con la cuarta tasa de homicidios más alta, superior incluso a la de México.
A sus 35 años, Daniel Roy-Gilchrist Noboa Azín (Guayaquil, 1987) no es nuevo en política, pues ha sido diputado entre 2021 y 2023, si bien en estas elecciones se ha presentado como outsider. Es el mayor de cuatro hermanos en una familia de grandes empresarios y políticos, pues además de las aspiraciones presidenciales de su progenitor, su madre Annabella Azín, doctora en medicina, fue asambleísta y candidata a la vicepresidencia.
Es además nieto de Luis Noboa Naranjo, uno de los empresarios más importantes del país en el siglo XX y uno de los hombres más ricos de Ecuador en su tiempo, que introdujo a los años 60 la marca de avena Quaker, con la que se le ha comenzado a apodar a su nieto.
El candidato de la alianza Acción Democrática Nacional (ADN), que se define como de centroizquierda pero que presenta planteamientos económicos más liberales. Noboa estudió Administración de Negocios en la Escuela de Negocios Stern de la Universidad de Nueva York y continuó su carrera especializándose en tres maestrías: en 2019 en Administración de Negocios y Administración Pública en el Kellogg School of Managment; en 2020 en la Universidad de Harvard y en 2022 finalizó su maestría en Comunicación Política y Gobernanza en la Universidad de George Washington.
Trabajó en la Corporación Noboa, de su familia; donde fue el director naviero más joven de la historia de la compañía. Fue director comercial hasta junio de 2018 y su tarea principal era supervisar la estrategia de ventas global para todos los productos alimenticios.
En 2021 entró en política y en las elecciones generales logró ser elegido diputado por la provincia costera de Santa Elena. Como asambleísta fue presidente de la Comisión de Desarrollo Económico y objeto de críticas por haber liderado la organización, en plena guerra entre Rusia y Ucrania, del viaje, pagado según él por la empresa privada, de seis asambleístas a Rusia, uno de los principales importadores del banano ecuatoriano, junto a la Unión Europea (UE).
Frente a un mandato de apenas 15 meses, Noboa apunta a “atender lo urgente: reducir la violencia, la desocupación juvenil, y generar empleo”.
Prisiones en barcos
En cuanto a la delincuencia, Noboa propuso encerrar a los delincuentes más violentos en barcos frente a las costas ecuatorianas del Pacífico. También sugirió aumentar la presencia militar en las fronteras y la costa, ambos puntos de tráfico de cocaína.
Noboa tomará posesión el 25 de noviembre, pero sólo gobernará 17 meses, hasta 2025, completando el mandato del presidente saliente, Guillermo Lasso, que disolvió el Congreso en mayo durante un juicio político y convocó elecciones presidenciales y legislativas anticipadas.
La campaña presidencial ha estado marcada por una violencia sin precedentes, incluido el asesinato a plena luz del día del candidato anticorrupción Fernando Villavicencio a la salida de un acto de campaña en agosto. Este mes, siete colombianos sospechosos del asesinato fueron a su vez asesinados en prisión.
Los puertos ecuatorianos del Pacífico son el objetivo de los narcotraficantes que introducen cocaína de contrabando, normalmente en contenedores de plátanos, el principal producto de exportación del país. Alrededor del 80% de la cocaína que sale de contrabando de Ecuador tiene como destino Europa, según declaró a The Guardian Juan Zapata, ministro del Interior del país, donde un kilo de cocaína alcanza un precio en la calle de unos 50.000 dólares, el doble que en Estados Unidos.
Zapata afirmó que Ecuador, situado entre Colombia y Perú, los principales países productores de cocaína del mundo, necesita ayuda internacional para hacer frente a un “enemigo transnacional común”. La tasa de homicidios se ha quintuplicado desde 2019, según el Observatorio Ecuatoriano contra el Crimen Organizado, debido a la violencia entre bandas locales aliadas con los cárteles mexicanos de la droga, la guerrilla colombiana y los traficantes balcánicos.
El presidente electo no dispondrá de mayoría parlamentaria y podría tener dificultades para lograr el consenso entre la díscola clase política ecuatoriana para aprobar leyes.
“Hay mucho por hacer”, dijo Zapata. “Espero que el nuevo congreso se dedique a [tratar la situación de seguridad], a diferencia del anterior que perdió tanto tiempo y perjudicó al país”.
Con información de The Guardian y la agencia EFE