La empresa estatal de energía atómica ucraniana, Energoatom, ha comunicado este jueves que la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, ha sido desconectada de la red eléctrica. Según Energoatom, la cuarta y última línea de trasmisión activa que conectaba la central fue cortada debido a los incendios en los vertederos de cenizas de la central. Las otras tres líneas de transmisión ya habían resultado dañadas previamente por bombardeos rusos, señaló la empresa.
Es la primera vez que la central de Zaporiyia está desconectada completamente de la red eléctrica y Energoatom ha acusado a Rusia de lo sucedido. “Las acciones de los invasores provocaron la desconexión total de la central nuclear de Zaporiyia de la red eléctrica, la primera en la historia de la planta”, dijo la empresa en un comunicado.
Energoatom informó que las necesidades de energía interna de la central se están cubriendo actualmente a través de la red eléctrica de Ucrania, por lo que la central no se encuentra apagada, pero no ha proporcionado información sobre el funcionamiento de los sistemas de automatización y seguridad. La empresa dijo que se están llevando a cabo operaciones para conectar una de las unidades de potencia a la red.
Situada en Enerhodar, en la orilla sur del río Dniéper y al suroeste de la ciudad de Zaporiyia, la central, construida en la era soviética, es un punto estratégico para Ucrania, ya que a pleno funcionamiento proporciona un 20% de la electricidad del país. Durante las últimas semanas, se ha convertido en uno de los focos principales de preocupación internacional por la posibilidad de que se pueda desencadenar un accidente nuclear en medio del conflicto.
Las instalaciones fueron tomadas por las tropas rusas al principio de la guerra, pero sus alrededores han sufrido ataques en las últimas semanas y ambas partes se lanzan acusaciones cruzadas. El Gobierno de Kiev acusa a Rusia de usar la planta como almacén de armas y de lanzar ataques desde sus alrededores, mientras que Moscú acusa a Ucrania de disparar imprudentemente contra la instalación.
Posible visita de la ONU
La semana pasada, Rusia rechazó una propuesta del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para desmilitarizar la zona alrededor de la planta. Pero este jueves, el ministro de defensa ruso, Serguéi Shoigú, dijo a su homólogo francés que Moscú brindará a los inspectores del Organismo Internacional de Energía Atómica de la ONU (OIEA) la asistencia necesaria en una posible visita de éstos a la central.
El director general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi, dijo este jueves que hay un “principio de acuerdo” con Ucrania y Rusia para que la agencia realice una inspección de la central nuclear de Zaporiyia y que podría llevarse a cabo “en los próximos días”.
Según Grossi ha habido “dudas y objeciones políticas” por ambas partes, pero no hay bloqueo. “Creo que estamos muy cerca de que los dos lados acepten la visita. No podemos arriesgarnos, además del drama de la guerra, a que haya un accidente nuclear”, dijo el responsable.
El presidente francés, Emmanuel Macron, indicó el pasado fin de semana, tras una conversación telefónica con su homologo ruso, Vladímir Putin, que Rusia estaría a favor de una inspección de la OIEA.