Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
El Constitucional acusa al Supremo de sentenciar los ERE sin argumentos
Las denuncias por acoso dinamitan una investigación de la Universitat de Barcelona
Opinión - El porno es el nuevo demonio. Por Ana Requena

“Derecho internacional”: las dos palabras que muestran una brecha de la UE ante el conflicto entre Israel y Hamás

Una vivienda del campamento de refugiados palestinos de Shati, en Gaza, destruída en un bombardeo israelí.

Irene Castro

Corresponsal en Bruselas —

25

“Las palabras importan”. Fue la justificación que encontró el portavoz de la Comisión Europea, Eric Mamer, para la tardanza en matizar al comisario húngaro, Olivér Várhelyi, que había anunciado la suspensión de la ayuda europea al desarrollo para Palestina. El retraso en la difusión del comunicado aclaratorio, tras haber avalado el mensaje trasladado en redes sociales por el hombre de Viktor Orbán en Bruselas, pretendía no dejar margen al error o la interpretación. 

Por eso, casi una semana después del ataque de Hamás a Israel, no hay margen al error o la interpretación en la posición expresada por la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien ha eludido en todo momento hacer referencia al derecho internacional en su alegato sobre el derecho de Israel a defenderse. 

Y es que cada palabra cuenta y, en este caso, esas dos –“derecho internacional”– marcan la delgada línea entre vulnerar o no la legalidad. “Israel tiene derecho a defenderse, hoy y los próximos días. La Unión Europea está con Israel”, escribió en X (antes Twitter) Von der Leyen al día siguiente del ataque de Hamás, cuando Benjamín Netanyahu había declarado el estado de guerra.

Para entonces, el alto representante, Josep Borrell, había apelado al derecho de Israel a defenderse “en línea con el derecho internacional”. Y fue la línea seguida por la mayoría de dirigentes y portavoces europeos, a excepción de Von der Leyen, que ha eludido esas dos palabras en todas sus comunicaciones sobre el asunto incluso tras los bombardeos contra edificios de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) o el bloqueo a Gaza, que mantiene sitiados a sus más de dos millones de habitantes. También después de que Borrell acusara a Israel de violar el derecho internacional por dejar a la población sin agua, electricidad y otros suministros básicos. “Condenamos todos los ataques a civiles y todos son todos”, advirtió el político catalán.

Frente a ello, ni una palabra por parte de Von der Leyen, quien aseguró este miércoles que “el horror que ha desatado Hamás traerá más sufrimiento a palestinos inocentes”. “Solo Hamás es responsable de sus actos”, apostilló. La presidentas de la Comisión Europea y la Eurocámara, Roberta Metsola, visitan este viernes Israel.

“El respeto al derecho internacional es la base de la UE, por lo que cualquier declaración que hacemos en relación a conflictos, obviamente, implica que debe haber respeto al derecho internacional. Es una constante en nuestros comunicados”, justificó el portavoz de la Comisión Europea este jueves, preguntado por la omisión. Sin embargo, él mismo reconoció que cada palabra cuenta y Von der Leyen sigue sin hacer referencia al derecho internacional. 

La tolerancia hacia la actuación de Israel contra la población civil en Gaza quedó patente en la rueda de prensa de la Comisión este jueves cuando los periodistas recordaron al portavoz las palabras de Von der Leyen en referencia a los ataques de Rusia en Ucrania. “Los ataques selectivos a infraestructuras civiles con el claro objetivo de dejar a hombres, mujeres y niños sin agua, calefacción y electricidad con el invierno llegando, son actos de puro terror. Y tenemos que calificarlo como tal. Los ataques de Rusia contra infraestructura civil, especialmente electricidad, son crímenes de guerra”, dijo en octubre de 2022. 

¿Es un crimen de guerra dejar la Franja de Gaza sin luz y agua? “Estás discutiendo un comentario hecho en un contexto muy específico donde había un ataque no provocado por parte de un país miembro del Consejo de Seguridad la ONU contra un vecino pacífico. La situación que estamos experimentando en la que sigue habiendo ataques desde Gaza hacia Israel, por tanto, Israel está en una situación en la que debe de defenderse a sí mismo en una situación muy complicada. Aquí no podemos juzgar cuáles son las acciones exactas que deben ser llevadas a cabo por Israel para luchar contra los terroristas de Hamás, que han atacado su territorio. Por supuesto, subrayamos el hecho de que haciendo eso tiene que respetar el derecho internacional y que todos los esfuerzos deben hacerse para asegurar la seguridad de los civiles”, fue la respuesta del portavoz del Ejecutivo comunitario, Eric Mamer, a esa pregunta. Él sí hacía referencia al derecho internacional; la presidenta no lo ha hecho. Borrell sí elevó el tono al asegurar que Israel estaba vulnerando la legailidad internacional con el bloqueo de Gaza.

La línea de Von der Leyen es, sin embargo, la que figura en el comunicado conjunto rubricado por los presidentes de Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Alemania e Italia: “Nuestros países apoyarán a Israel en sus esfuerzos de defenderse a sí mismo y a su gente contra estas atrocidades”. El texto también apuntaba de forma velada a terceros países: “No es el momento de que ningún adversario de Israel aproveche estos ataques para sacar rédito”.

“Tendremos que vigilar de cerca la postura de Irán, dado su prolongado apoyo a Hamás”, dijo la alemana durante la concentración de condena al ataque a las puertas del Parlamento Europeo, donde también estaban presentes la presidenta de esa institución, Roberta Metsola, y el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, a quien el equipo de Von der Leyen recortó en la imagen que acompañaba su tuit que recogió aquel momento. 

También el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, apeló a que las organizaciones y países “hostiles” a Israel, entre los que mencionó a Irán y a la milicia libanesa Hizbulá, no se aprovechen del enfrentamiento entre el Estado israelí y el grupo islamista Hamás. Él, que representa a Estados Unidos, pero también a países como Turquía, también hizo equilibrios al pedir una respuesta “proporcional” al ataque sin entrar en calificativos de lo que está ocurriendo en Gaza, mientras que sí condenó las “atrocidades” perpetradas por Hamás en suelo israelí. 

“A medida que este conflicto evoluciona, es importante proteger a los civiles. Eso fue también claramente expresado por los aliados. Hay reglas de la guerra, hay peticiones de proporcionalidad, y eso fue destacado por muchos aliados, y eso es algo que manifestaron al mismo tiempo que condenaron muy claramente las brutales atrocidades y la violencia de las que ha sido responsable Hamás”, sentenció Stoltenberg. 

La presidenta de la Comisión Europea, muy activa en redes sociales, también evitó desautorizar al responsable de Vecindad y Ampliación cuando aseguró que se suspendía de manera inmediata la ayuda al desarrollo a Palestina. Su portavoz dijo al día siguiente que había ido por libre y que no había consensuado con nadie la propuesta y que la presidenta mantiene el apoyo en todo el Colegio de Comisarios. La única alusión a ese asunto que hizo Von der Leyen fue durante la concentración de repulsa al ataque de Hamás. “Nuestro apoyo humanitario al pueblo palestino no se cuestiona. Sin embargo, es importante que revisemos cuidadosamente nuestra ayuda financiera a Palestina. La financiación de la UE nunca ha ido ni irá destinada a Hamás ni a ninguna entidad terrorista. Así que ahora revisaremos de nuevo toda la cartera a la luz de la evolución de la situación sobre el terreno”, expresó. 

La amenaza a la ayuda que se canaliza a través de la Autoridad Palestina y de la UNRWA tensó a la UE y los recelos permanecen una vez que la Comisión Europea ha dicho que no habrá suspensión inmediata de los pagos, pero sí una auditoría de los proyectos. El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, expresó su “temor real de que esa revisión sea una suspensión de facto de la cooperación”. Y pidió conocer “cuál va a ser la extensión de esa revisión, cuánto tiempo va a durar y cuáles son los objetivos que se persigue con ella”. Unas preguntas que la Comisión Europea por ahora no contesta. 

Etiquetas
stats