La Policía alemana ha detenido en la noche del sábado a un segundo sospechoso en relación con el ataque con cuchillo que este viernes causó tres muertos y ocho heridos en Solingen, al oeste del país. Las autoridades no han confirmado el trasfondo terrorista de los acuchillamientos, a pesar de que apenas unas horas antes el grupo yihadista Estado Islámico ha reivindicado la autoría del ataque.
Agentes de la policía germana han registrado este sábado un centro de acogida para solicitantes de asilo en el centro de Solingen, a unos 300 metros del lugar del ataque, según ha adelantado la agencia Associated Press. “Hemos recibido varias pistas y en base a ellas estamos llevando a cabo varias iniciativas”, ha declarado uno de los portavoces policiales. En el registro han estado implicadas las fuerzas del Comando de Operaciones Especiales de la policía alemana, que no ha confirmado aún si el detenido es el atacante.
El dominical Welt ha informado que una de las víctimas que resultaron heridas ha comunicado a la policía que conocía al atacante y que éste visitaba una mezquita local. Según otro testigo, antes de perpetrar los acuchillamientos, también habría pronunciado la frase “Allahu Akbar”, empleada en actos terroristas del EI. Las autoridades, sin embargo, no han confirmado todavía estos detalles.
Una fuente de seguridad anónima ha informado a la Agencia Amaq, órgano de propaganda del EI, que “el autor del ataque de ayer contra una concentración de cristianos en la ciudad de Solingen, en Alemania, es un soldado del Estado Islámico”. Según el comunicado difundido en Telegram, el informante señaló que el autor, el cual no identificó, llevó a cabo este ataque “en venganza de los musulmanes en Palestina y en todas partes”.
Las autoridades alemanas no han confirmado la autoría del EI, aunque el primer ministro de Renania del Norte-Westfalia, Hendrik Wüst (CDU), ha descrito lo ocurrido como un “acto de terror”. “Este ataque tenía como objetivo sembrar el terror”, ha dicho Wüst a los periodistas durante su visita al lugar de los echos. El ataque estaba dirigido “contra la seguridad y la libertad de nuestro país y también contra la forma en que vivimos aquí”. El ataque “golpeó a nuestro país en el corazón”.
Un adolescente detenido en relación con los acuchillamientos
El responsable del operativo policial tras el ataque, Thorsten Fleiss, el autor del atentado sigue huido. Fleiss ha detallado que el adolescente arrestado es sospechoso de haber tenido conocimiento previo del suceso y de no haber actuado para impedirlo, pero los investigadores creen que no se trata del atacante, que sigue huido y del que se piensa que actuó en solitario.
El joven ha sido arrestado alrededor de las 14:00 de este sábado, fue identificado en base al testimonio de dos personas que escucharon una conversación sospechosa antes del suceso y que, después del ataque, se pusieron en contacto con la policía.
“Solo sabemos que habló con una persona, si esa persona es el atacante no lo sabemos con seguridad”, ha declarado el fiscal responsable de la lucha antiterrorista en la región de Renania del Norte-Westfalia (NRW), Markus Caspers. Según el diario alemán Bild, que cita al fiscal Caspers, poco antes de producirse el ataque, dos testigos escucharon una conversación entre el detenido y una segunda persona, aunque no está claro si se trata del responsable de los acuchillamientos.
El fiscal no ha querido ofrecer una descripción del presunto autor del ataque, debido a los testimonios contradictorios que se han recogido y a la poca claridad que se ha logrado hasta ahora en el caso. “Nada sería mas dañino que dar una descripción, llamar a la población por así decir a cooperar con la operación de búsqueda y descubrir en el curso de la investigación que la persona tiene aspecto completamente distinto”, ha dicho Caspers.
Las fuerzas de seguridad alemanas investigan los posibles vínculos entre la persona arrestada y el responsable de los apuñalamientos, mientras trabajan con la hipótesis de que el ataque tiene una motivación terrorista.
Los agentes parten así de que se trata de un atentado terrorista y no un acto de locura, como se pensó en un principio. “La Policía tiene desplegadas un gran número de fuerzas alrededor del casco antiguo de Solingen, entre ellas fuerzas especiales. En estos momentos se está interrogando a víctimas y a testigos”, ha informado la Policía de la región de Renania del Norte - Westfalia (NRW) en un comunicado.
La celebración, llamada 'Festival de la Diversidad' ha sido cancelada. También hay cierres de carreteras y se ha pedido a los habitantes de la ciudad que no se acerquen al casco histórico de la ciudad y permanezcan en sus casas. El lugar del ataque se trata de una concurrida plaza en el centro de la ciudad, donde se había montado un escenario y tocaban bandas en directo con motivo de la fiesta. Se esperaban durante el fin de semana al menos 80.000 visitantes por el 650 aniversario de la localidad.
“El atacante acuchilló a personas de forma aleatoria. Por eso en estos momentos partimos de un atentado”, ha explicado por su parte el comisario Sascha Kresta, portavoz de la policía de Wuppertal, añadiendo que el agresor trató de herir de forma deliberada a las víctimas en la zona del cuello.
Caspers ha indicado que no se puede excluir la sospecha de que el ataque sea un acto terrorista. “No hay otro motivo aparente. Las víctimas eran desconocidos, sin ninguna relación. Por eso pensamos que es posible que se trate de un acto terrorista”, ha dicho.
Los responsables policiales también hicieron públicas las edades de las víctimas mortales, dos hombres de 56 y 67 años y una mujer de 56 años, y la evolución de los heridos, de los cuales cuatro se encuentran en estado crítico, dos graves y dos leves.
Sin embargo, no quisieron confirmar las informaciones aparecidas en los medios sobre un posible hallazgo del arma del crimen, un cuchillo, puesto que señalaron que han sido recolectadas muchas pruebas materiales cuya conexión con el crimen todavía se está investigando.
El canciller alemán, Olaf Scholz, se ha declarado “conmocionado” por el ataque y ha pedido que el autor sea castigado “con todo el peso de la ley”. “En nuestra sociedad no debemos tolerar algo así y no aceptarlo jamás”, afirmó. Este sábado está previsto que visite el lugar de los hechos la ministra alemana de interior, Nancy Faeser.