Estados Unidos ha demandado a Edward Snowden por haber publicado su libro de memorias sin someterlo primero a una revisión de las agencias de inteligencia estadounidenses para las que trabajó, un paso con el que busca confiscar todos los ingresos procedentes de la venta de la obra.
El Departamento de Justicia ha informado en un comunicado sobre su demanda contra Snowden, que ha sacado a la venta su libro “Vigilancia Permanente” este miércoles en 23 países, entre ellos EEUU, España, México, Colombia, Argentina, Brasil y Perú.
La demanda no busca “detener o restringir la publicación o distribución” del libro, pero sí “recuperar todos los ingresos ganados por Snowden como consecuencia de no haber entregado su texto para la revisión previa a la publicación”, indica el comunicado.
La acción judicial, por la vía civil, también afecta a “las entidades corporativas implicadas en la publicación del libro de Snowden”, según el Departamento de Justicia, que toma esa medida “solamente para asegurar que no se transfiere ningún fondo a Snowden” mientras se resuelve el caso en el tribunal de EEUU.
El texto de la demanda cita al grupo editorial responsable del libro en EEUU, MacMillan, y a la matriz de la que depende, Holtzbrinck; pero no menciona a la española Planeta, que ha editado las memorias en castellano.
“Edward Snowden ha violado una obligación a la que se comprometió con los Estados Unidos cuando firmó acuerdos como parte de su trabajo en la CIA y como contratista de la NSA”, ha señalado el fiscal general adjunto de EEUU para asuntos civiles, Jody Hunt, en el comunicado. “No permitiremos que nadie se enriquezca a expensas de Estados Unidos sin cumplir con sus obligaciones de revisión previa a la publicación”, ha añadido.
La demanda, presentada ante un tribunal federal en Alexandria (Virginia), alega que Snowden se comprometió a guardar los secretos de la CIA y la NSA en varios acuerdos que firmó cuando trabajaba para esas entidades entre 2005 y 2013.
Esos acuerdos obligaban a Snowden a permitir que esas agencias revisaran cualquier información que pretendiera publicar y que se basara en datos confidenciales “obtenidos como resultado” de su relación con la NSA y la CIA.
Las memorias de Snowden son un recorrido por su vida y no incluyen nuevas revelaciones respecto a las que ya publicó en 2013, cuando abandonó Estados Unidos cargado con 1,7 millones de documentos que revelaron al mundo los programas de vigilancia masiva de teléfonos e internet de la NSA.
Además de esta demanda civil, el Departamento de Justicia sigue acusando a Snowden de cargos criminales relacionados con la publicación de esa información hace seis años y el extécnico de 36 años vive en Moscú en régimen de asilo temporal.